Jesus (Resurrección y ascensión)
Top Bible Verses about Jesus (Resurrección y ascensión)
Salmo 16.8–11
Mateo 12.40
Hechos de los Apóstoles 2.29–31
1 Corintios 15.3–8
Apocalipsis 1.17–18
Famous Christian Quotes About Jesus (Resurrección y ascensión), Pascua
La humanidad y la divinidad de Jesús
Él ora, pero escucha las oraciones. Llora, pero hace que las lágrimas cesen. Pregunta donde fue colocado Lázaro, porque fue hombre, pero resucitó a Lázaro, porque fue Dios. Fue vendido, y a muy bajo precio, por solo treinta piezas de plata, pero redimió el mundo y por un gran precio, porque el precio fue su propia sangre. Como oveja es llevado al matadero, pero es el Pastor de Israel, y ahora también de todo el mundo. Como cordero permanece en silencio, pero es la Palabra, y es proclamado por la de voz uno que clama en el desierto. Es golpeado y herido, pero sanó toda enfermedad y dolencia. Es levantado y clavado en el madero, pero por el árbol de la vida nos restauró; ciertamente, salvó al ladrón crucificado con él; ciertamente, envolvió al mundo visible en oscuridad. Se le dio a tomar vinagre mezclado con hiel. ¿Quién? El que cambió el agua en vino, que destruyó el sabor amargo, el que es dulzura y todo deseo. Él dio la vida, pero tiene el poder para volver a tomarla; el velo es rasgado, pero las misteriosas puertas del cielo se abren, las rocas se parten, se levantan los muertos. Él muere, pero es quien da la vida, y por su muerte destruye la muerte. Lo sepultan, pero se levanta de nuevo, desciende al infierno, pero eleva las almas, asciende al cielo, y vendrá otra vez para juzgar a los vivos y a los muertos.
Él sufrió para establecer la libertad del sufrimiento
Él sufrió para liberar del sufrimiento a aquellos que sufren en él; descendió para poder levantarnos; aceptó la prueba de nacer, para que nosotros amemos al que no es engendrado; descendió a la corrupción, para que la corrupción pueda ser vestida de inmortalidad; se hizo débil por nosotros, para que podamos resucitar con poder; descendió a la muerte, para concedernos la inmortalidad y dar vida a los muertos. Por último, se hizo hombre para que nosotros, los que morimos como los hombres, podamos vivir de nuevo, y que la muerte no reine más sobre nosotros, porque la palabra apostólica proclama: “La muerte no tendrá dominio sobre nosotros.”
Enfócate en Jesús y sacúdete de todos tus temores
Cuando estés ocupado en tu salvación, habiendo echado a un lado toda especulación curiosa con respecto a la majestad insondable de Dios, todas las meditaciones en obras, tradiciones, filosofías y hasta en la ley de Dios también, corre directo al pesebre y abraza a este infante, el pequeño bebé de la virgen en tus brazos, y contémplale tal como nació, mamando, creciendo, conversando con las personas, enseñando, muriendo, levantándose de nuevo, ascendiendo hasta los cielos y teniendo poder sobre todas las cosas. De esta forma serás capaz de sacudir de ti todos los temores y errores, como el sol quita las nubes.