Héroes

Introducción

Vivimos en una época de mucha incertidumbre. Parece que la seguridad nacional y global es tan frágil que podría ser aplastada en cualquier momento.

En estos días el pueblo busca esperanza. Está buscando a alguien confiado y capaz. Está buscando a alguien que tenga la solución a los problemas de la sociedad. Mejor dicho, está buscando a un héroe. Me imagino por eso los superhéroes se han vuelto tan populares porque el pueblo, si lo entiende o no, espera a uno.

Mientras tanto, el pueblo cristiano casi no está presente en la sociedad. No tiene impacto. No ofrece esperanza. Porque no tiene fuerza. La verdad es que el pueblo cristiano carece de influencia porque no tiene fe.

La fe acepta sin condiciones lo que Dios ha dicho. Si Dios lo dice, la fe dice: “lo creo”; la fe dice a eso: “Amén”. - Dwight L. Moody

Si el pueblo cristiano se esconde porque tiene miedo del “¿Qué pasa si esto o aquello?” el mundo cae cada día más en el pantano de desesperanza.

Lo que necesitamos es alguien que se pare y nos diga “¡No se vayan! ¡Párense firmes! ¡Vamos para adelante! ¡Mayor es el que esta en nosotros que el que está en el mundo! Necesitamos a alguien que nos diga ¡Sígame! y después se va corriendo hacía la batalla. Necesitamos a un héroe.

Desarrollo

La audiencia del primer siglo de hebreos experimentaba oposición a su fe en Jesús y se enfrentaba a la presión de abandonar. El escritor les asegura que todo lo que buscan puede encontrarse en Cristo. La esperanza en Cristo es mucho mejor que lo que ofrece la sociedad. Una vez que toda su vida ha sido transformada en Cristo, los creyentes pueden soportar cualquier persecución que el mundo les lance.

En el capítulo 11 llegamos al salon de campeones de la fe. Y se nos da ejemplo tras ejemplo de personas que anduvieron por la fe y por tanto cambiaron su mundo. Mejor dicho, habla de los héroes que buscamos.

Ahora, para aprovechar bien de los ejemplos de los héroes de la fe, es importante que entendamos lo que es.

Leer Heb. 11:1-3.

En los versos 1-2 se nos da la definición de la fe, no de forma exhaustiva, sino de forma que prepara el argumento de la sección en su conjunto.

La verdadera fe bíblica es obediencia plena a la Palabra de Dios a pesar de las circunstancias y consecuencias.

Y en el verso 3 nos dice que la fe es práctica porque por ella entendemos y somos capaces de operar en este mundo.

O sea, para el creyente la fe es a su vida espiritual lo que la salud cardiaca es a la salud física. Es la esencia de su vida.

En el verso 4 empezamos a leer sobre los héroes de dicha fe.

Hebreos 11:4 RVG

4 Por fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.

Abel es primer “antiguo” que recibió buen testimonio por la fe.

1 - Confió en la palabra de Dios

Génesis 3:21 RVG

21 Y Jehová Dios hizo al hombre y a su esposa túnicas de pieles, y los vistió.

Los padres de Abel eran Adán y Eva

Seguramente le habían contado del desastre que causaron por su desobediencia al Creador del mundo

Le enseñaron lo que Dios hizo por ellos a pesar de no merecerlo

Y por tanto aprendió que el hombre pecaminoso adoraba por medio de un sacrificio de sangre

Salmo 119:105 RVG

105 NUN. Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.

2 - Confió en objecto de Dios

Génesis 4:2 RVG

2 Y después dio a luz a su hermano Abel. Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra.

Seguramente por lo que había aprendido de joven se preparó

Pudiera haber hecho o sido lo que quisiera Abel porque el mundo estaba a sus pies

Pero eligió trabajar en algo que facilitaba su adoración a Dios

Llegó a ser pastor de ovejas

Isaías 26:3 RVG

3 Tú guardarás en completa paz, a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.

3 - Confió en la fe en Dios

Génesis 4:4 RVG

4 Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, y de su grosura. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda;

Había escuchado la historia de la maldición de Dios

Había escuchado de cuando su padres fueron echados del huerto por Dios

Había crecido con Caín diciéndole que no había esperanza con Dios porque Él era muy rígido y duro y no amaba a nadie menos a sí mismo

Y a pesar de todo eso, fue a adorar a Jehová y ofrecerle lo que Él quería, cueste lo que cueste

Hebreos 11:6 RVG

6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios ; porque es necesario que el que a Dios se acerca, crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.

Conclusión

Y tanto como el patron que observamos esta mañana con nuestro hermano Abel, la palabra nos señala a un solo objeto, y Él se llama Jesucristo. Y Jesucristo, el Hijo de Dios, nos dice:

Jn 14:6 “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.”

El apóstol Pedro nos dice:

Hechos 4:12 “12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo del cielo, dado a los hombres, en que debamos ser salvos.”

El apóstol Pablo nos dice:

Rom 5:1 “1 Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,”

Abel creyó en la palabra, el objeto de Dios, y puso en práctica su fé y le costó la vida. Pero, alcanzó un buen testimonio de que era justo.

¿Qué tal usted? ¿Cree la palabra?

¿Tiene los ojos puestos y centrados en el objeto de nuestra fe?

¿Anda por fe sin miedo de las repercusiones?

Abel creyó contra toda esperanza, dijo yo sigo a Dios, y corrió hacía adelante.

¿Seguiremos a Él?