PELIGRO DE UN CULTO MUY ELEGANTE

Amós 5:14-15, 21–24

Amós 5:14–15 RVR60

14 Buscad lo bueno, y no lo malo, para que viváis; porque así Jehová Dios de los ejércitos estará con vosotros, como decís. 15 Aborreced el mal, y amad el bien, y estableced la justicia en juicio; quizá Jehová Dios de los ejércitos tendrá piedad del remanente de José.

Amós 5:21–24 RVR60

21 Aborrecí, abominé vuestras solemnidades, y no me complaceré en vuestras asambleas. 22 Y si me ofreciereis vuestros holocaustos y vuestras ofrendas, no los recibiré, ni miraré a las ofrendas de paz de vuestros animales engordados. 23 Quita de mí la multitud de tus cantares, pues no escucharé las salmodias de tus instrumentos. 24 Pero corra el juicio como las aguas, y la justicia como impetuoso arroyo.

INTRODUCCIÓN

Estamos acostumbrados a programas de alta calidad: televisión, cine, videocintas, etc.

Que también se debe realizar en un salón muy cómodo, con música excelente, mullidos asientos, escenario hermoso, predicador elocuente y bien vestido, y un sistema de sonido de óptima calidad.

¿Qué es lo que Dios piensa? (VV. 14-15)

I. EL FRACASO DEL CULTO ELEGANTE. (V. 21-23)

A. Un culto “elegante” no garantiza la santidad. (Is. 1.11-14)

Isaías 1:11–14 RVR60

11 ¿Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. 12 ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros delante de mí para hollar mis atrios? 13 No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes. 14 Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas.

B. Dios quiere un cambio interior. Como en la época de Amós, multitudes van a los santuarios, pero sus acciones no demuestran los cambios que Dios desea.

II. EL VERDADERO CULTO SE DA EN JUSTICIA Y RECTITUD. (V.24)

A. Dios pide una conducta recta y una vida noble. Dios desea que la justicia y la rectitud penetren a cada nivel de la sociedad. Mi. 6.8; Sof 2.3

Miqueas 6:8 RVR60

8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

Sofonías 2:3 RVR60

3 Buscad a Jehová todos los humildes de la tierra, los que pusisteis por obra su juicio; buscad justicia, buscad mansedumbre; quizá seréis guardados en el día del enojo de Jehová.

B. El verdadero culto busca agradar a Dios. No importa lo que hagan los demás: el cristiano debe practicar la justicia en sus tratos comerciales y en sus relaciones interpersonales.

III. EL SECRETO DE LA VIDA CRISTIANA EFICAZ.

A. Adoración en espíritu y en verdad.

B. Dependencia del Señor. Dios quiere una vida de compromiso, lo cual es posible cuando estamos en Cristo. Sin Cristo no podemos hacer nada valioso (Juan 15:4-5).

Juan 15:4 RVR60

4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.

Juan 15:5 RVR60

5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

Conclusión

El verdadero culto a Dios no depende del ritual o los elementos del culto que calificamos como excelentes, sino del espíritu del adorador.