Lo que cuesta Seguir a Jesús

Lucas 9.56-62 (NVI)
56 Luego siguieron la jornada a otra aldea. 57 Iban por el camino cuando alguien le dijo: —Te seguiré a dondequiera que vayas. 58 —Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza. 59 A otro le dijo: —Sígueme. —Señor —le contestó—, primero déjame ir a enterrar a mi padre. 60 —Deja que los muertos entierren a sus propios muertos, pero tú ve y proclama el reino de Dios —le replicó Jesús. 61 Otro afirmó: —Te seguiré, Señor; pero primero déjame despedirme de mi familia. 62 Jesús le respondió: —Nadie que mire atrás después de poner la mano en el arado es apto para el reino de Dios.

1. Renunciar a lo que otros consideran necesidades.

a. Un maestro de la ley o escriba (Mt. 8.19). impulsivo, emocional, romántico.

b. Las preocupaciones pueden matar una fe sincera.

Mateo 13.22 (NVI)
22 El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de esta vida y el engaño de las riquezas la ahogan, de modo que ésta no llega a dar fruto.

c. Dios sabe lo que nosotros necesitamos

Mateo 6.8 (NVI)
8 No sean como ellos, porque su Padre sabe lo que ustedes necesitan antes de que se lo pidan.

Mateo 6.11 (NVI)
11 Danos hoy nuestro pan cotidiano.

d. Ilustración de la cama sep/1999.

2. Renunciar a nuestros derechos.

a. Su padre no estaba muerto, sino más bien en proceso. Cumplir con su deber de hijo o lo que le interesaba era la herencia que su padre le iba a dejar.

b. "si velamos por nuestros deberes Dios velara por nuestros derechos”

3. Renunciar a lo que amamos (especialmente a nosotros mismos)

Mateo 6.21 (NVI)
21 Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Lucas 17.32 (NVI)
32 ¡Acuérdense de la esposa de Lot!

Back (εἰς τὰ ὀπίσω). Lit., to things behind. “The figure is that of a man who, while engaged in labor, instead of keeping his eye on the furrow which he is drawing, looks behind at some object which attracts his interest. He is only half at work, and half-work only will be the result” (Godet).[1]

Mateo 10.37-38 (RVR60)
37 El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; 38 y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.

Conclusión

Juan 12.25 (NVI)
25 El que se apega a su vida la pierde; en cambio, el que aborrece su vida en este mundo, la conserva para la vida eterna.

Dios desea que todos le sigamos, pero tenemos que hacerlo con la motivación correcta y consciente de lo que cuesta.

1. Renunciando a lo que necesitamos. no de manera impulsiva ni emocional ver 57.

2. Renunciando a nuestros derechos. no "jugando seguro". ver.59

3. Renunciando a lo que amamos. no con un corazón dividido ver 61.

Marcos 10.29-30 (NVI)
29 —Les aseguro —respondió Jesús— que todo el que por mi causa y la del evangelio haya dejado casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o terrenos, 30 recibirá cien veces más ahora en este tiempo (casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y terrenos, aunque con persecuciones); y en la edad venidera, la vida eterna.

Lack of discipline (vv. 57–62). Three men could have become disciples, but they would not meet the conditions that Jesus laid down. The first man was a scribe (Matt. 8:19) who volunteered to go until he heard the cost: he had to deny himself. Apparently he was accustomed to a comfortable home.

The second man was called by Jesus (what an honor!), but he was rejected because he would not take up the cross and die to self. He was worried about somebody else’s funeral when he should have been planning his own! Jesus is not suggesting here that we dishonor our parents, but only that we not permit our love for family to weaken our love for the Lord. We should love Christ so much that our love for family would look like hatred in comparison (Luke 14:26).

The third man also volunteered, but he could not follow Christ because he was looking back instead of ahead. There is nothing wrong with a loving farewell (1 Kings 19:19–21), but if it gets in the way of obedience, it becomes sin. Jesus saw that this man’s heart was not wholly with Him, but that he would be plowing and looking back (see Gen. 19:17, 26; Phil. 3:13–14).

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