La Presencia Consoladora de Dios
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Introducción:
Introducción:
El catecismo Mayor de Westminter dice en la Pregunta 29 ¿Cuáles son los castigos por el pecado en el mundo venidero? Los castigos por el pecado en el mundo venidero son la eterna separación de la presencia consoladora de Dios, y los más dolorosos e interminables tormentos en el cuerpo y el alma en el infierno para siempre.
El ser humanos fue creado para habitar en lo que el catecismo llama “la Presencia consoladora de Dios”. Los hijos de Core escribieron sobre de su anhelo de habitar en la presencia consoladora de Dios:
Porque mejor es un día en Tus atrios que mil fuera de ellos. Prefiero estar en el umbral de la casa de mi Dios Que morar en las tiendas de impiedad.
No todos los hombres comparten este anhelo de los hijos de Core. Aun nosotros mismos como creyentes no anhelamos por encima de cualquier cosas estar en comunión con Dios y esto pasa por que no estamos conscientes de que en la vida solo hay dos opciones, habitar en la presencia consoladora de Dios o habitar en las moradas de maldad expuestos al ardor de su ira eterna.
No Existe un camino intermedio, no podemos escondernos de Dios:
O eres una persona bienaventurada que se ha refugiado en Cristo, descansa en su gracia y habita en su presencia consoladora.
O su ira estará sobre ti por la eternidad como dice Juan en:
»El humo de su tormento asciende por los siglos de los siglos. No tienen reposo, ni de día ni de noche, los que adoran a la bestia y a su imagen, y cualquiera que reciba la marca de su nombre».
Esta es una realidad terrible que hace resaltar la gloria del texto que tenemos delante de nosotros esta mañana en Exodo 27.
Recordemos que Moisés estaba en la presencia consoladora de Dios cuando recibió cada una de las instrucciones para la construcción del tabernáculo. El estaba delante de la presencia de Dios en la realidad que luego representaría el tabernáculo y el templo.
Luego de que Dios terminara de hablar con Moisés, el tabernáculo como una sombra de las realidades celestiales, sería un pedazo de cielo en esta tierra, Dios vendría a morar en medio de su pueblo, su presencia consoladora estaría con su pueblo del A.T. Y esta mañana veremos porque como creyentes podemos morar en esta presencia consoladora de Dios, mientras consideramos las instrucciones que Dios dio a Moises para levantar su altar, sus atrios y su luz en medio de Israel.
1. El Altar de Jehová
1. El Altar de Jehová
Este altar debía hacerse con madera de acacia, era una caja hueca (debajo seguramente había piedra sin labrar y madera), cuadrada, de 2.25 metros de ancho y 1.35 Metros de alto que estaba revestido de Bronce, junto con todos sus recipientes (el de recoger ceniza, las palas y tazones para la sangre, los garfios para la carne y los braceros). Tenía en la mitad un enrejado para poner las ofrendas quemadas. El atar también debía tener argollas para ser transportado con varas.
Algunos comentaristas afirman que cuanto más lejos estuvieras del lugar santísimo, los metales utilizados serían de menor valor. En en el tabernáculo todo estaba recubierto de oro, para dos únicos objetos en el patio del tabernáculo Este altar del holocausto y la fuente o lavacro se uso bronce.
El Altar era lo primero que se veía una vez entrabas en el tabernáculo para adorar a Dios y este hecho es muy importante - Mientras que lo primero que vemos nosotros cuando nos congregamos para adorar a Dios es un púlpito y una mesa de comunión, el pueblo del A.T. veía un altar para holocaustos.
Hay una enseñanza pedagógica en esto.... Israel debía aprender que el único camino para tener acceso a la presencia consoladora de Dios era a travez de un holocausto por el pecado. Ellos en este altar tenían un recordatorio constante de la santidad de Dios y la pecaminosidad del hombre.
El pecado nos pone bajo el ardor de la justa ira de Dios. Dios en su santidad y justicia, no puede simplemente barrer debajo de la alfombra y hacerse el de la vista gorda con nuestro pecado, el debe castigarnos y el castigo que merece el pecado es el eterno ardor de la ira de Dios, representada en este altar que debía arder continuamente.
”El fuego del altar se mantendrá encendido sobre el altar; no se apagará, sino que el sacerdote quemará leña en él todas las mañanas, y pondrá sobre él el holocausto, y quemará sobre él la grasa de las ofrendas de paz. ”El fuego se mantendrá encendido continuamente en el altar; no se apagará.
De manera que Israel aprendió que la justicia de Dios debe ser satisfecha, antes de que pudieran disfrutar de su presencia consoladora en el tabernáculo. De manera que ellos debían ofrecer un animal sin defecto que los representara como sustituto para poder disfrutar de la presencia de Dios. El fue ardiendo y la instrucción que Dios les dio para ofrecer sacrificios en este altar, le recordaba a ellos que Dios había hecho provisión para su pecado, ellos podían acceder a la presencia consoladora de Dios, por el camino que Dios trazo- Ellos no tenían que esforzarse para portarse bien, mas bien debían confiar en la provisión de Dios para el pecador.
Cada animal que los adoradores del A.T. ofrecieron a Dios, estaba anticipando el ultimo y final sacrificio que Dios ofrecería para satisfacer su justicia. el sacrificio de Jesucristo, el Dios que se hizo hombre y como hombre fue sin defecto, sin pecado y murió en sustitución de todos aquellos que ponen en él su confianza:
Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, por medio de quien también hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
Los holocaustos anticipaban al cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Por medio de él nosotros ya tenemos acceso a la presencia consoladora de Dios, por esta razón en nuestras reuniones no hay un altar, sino el púlpito y la mesa del Señor, que testifica de Dios esta reinando sobre nosotros por medio de su palabra y su E.S. y que podemos disfrutar de su presencia consoladora en medio de nosotros. Tenemos comunión en su mesa como pueblo redimido en Cristo.
Amados, hoy en Cristo nosotros no tenemos que esforzarnos por entrar en la presencia de Dios, no tenemos que entrar en un transe para sentirnos cerca de su presencia, él está en medio de nosotros hoy, no lo ha dicho en su palabra.
Pero, ¿qué dice? «Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón,” es decir, la palabra de fe que predicamos: que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación.
Así como el altar le anuncio a Israel el día de salvación que vendría con Jesucristo para todos los que creen, hoy la palabra de Dios y la mesa del Señor nos anuncia que no hay condenación para los que están en Cristo y que además un día todos los que hemos puesto en él nuestra esperanza estaremos por toda la eternidad en su presencia consoladora sin el estorbo del pecado.
Podemos morar en la presencia consoladora de Dios, porque se hizo expiación por nuestro pecado.
El altar tenía 4 cuernos en sus esquinas. Es difícil saber que significaban sin no tuviéramos referencias como el Salmo 18:2
El Señor es mi roca, mi baluarte y mi libertador; Mi Dios, mi roca en quien me refugio; Mi escudo y el poder de mi salvación, mi altura inexpugnable.
Los cuernos eran un símbolo de poder salvador.... En estos cuernos los sacerdotes debían untar la sangre de los sacrificios ofrecidos por los adoradores del A.T. esta sangre derramada en los cuernos comunicaba el poder que Dios tiene para salvar a su pueblo de su ira. Hay un evento en 1 de Reyes Adonías, cuando Adonías se declara rey de Israel, pero luego de da cuenta que David antes de su muerte corona como Rey a Salomon, el huye y noten lo que hace:
Adonías tuvo miedo de Salomón, y se levantó, se fue y se agarró de los cuernos del altar. Y avisaron a Salomón, diciéndole: «Adonías tiene miedo del rey Salomón, y se ha asido de los cuernos del altar, diciendo: “Que el rey Salomón me jure hoy que no matará a espada a su siervo”». Y Salomón dijo: «Si es hombre digno, ni uno de sus cabellos caerá en tierra; pero si se halla maldad en él, morirá». Entonces el rey Salomón envió que lo hicieran descender del altar. Y él vino y se postró ante el rey Salomón, y Salomón le dijo: «Vete a tu casa».
Adonías buscó refugio en el lugar donde Dios era poderoso para salvar, y su vida fue perdonada. Dios es poderoso para salvar a los pecadores que se refugian en él. Mis hermanos, esta es una increíble noticia a la luz de todos los enemigos que no rodean, satanás, el mundo y los deseos de la carne, son enemigos muy poderosos que cada uno de nosotros enfrentamos y no tendríamos esperanza si Dios no fuera poderos para salvar a los que se refugian en su misericordia.
El puritano Thomas Brooks nos dice: "¡Ah! Pecador, recuerda esto, no hay forma en la tierra de librarse efectivamente de la culpa, la inmundicia y el poder del pecado, sino creyendo en un Salvador. No es resolver, no es quejarse, no es llorar, sino creer, lo que te hará divinamente victorioso sobre ese cuerpo de pecado que hasta el día de hoy es demasiado fuerte para ti, y que ciertamente será tu ruina, si es no arruinado por una mano de fe. (Precious Remedies Against Satan's Devices, 220)
No tenemos que temer pues a nuestros enemigos, si Dios ha hecho provisión por nuestro pecado y además es el cuerno de nuestra salvación.
Podemos morar en la presencia consoladora de Dios, porque Dios es el cuerno de nuestra salvación.
2. Los Atrios de Jehová.
2. Los Atrios de Jehová.
Los atrios estaban formados por una serie de cortinas de tela que Dios ordeno poner al rededor del tabernáculo.
La entrada al atrio debía dar hacia al oriente, solo por esta puerta podían entrar los adoradores. Vimos el simbolismo de la entrada al oriente, apuntando la expulsión de Adán y Eva del huerto de Jehová, la puerta del Jardín quedo custodiada por querubines y una espada encendida de manera que el hombre no pudiera entrar para comer del árbol de la vida (que era símbolo de las promesa del pacto, de habitar eternamente en la presencia consoladora de Dios en gloria)
Esta entrada del atrio, comunicaba a la iglesia del A.T, que por gracia, Dios había abierto un camino a su presencia consoladora. Aunque el pueblo no pudiera tener acceso directo a Dios en el lugar santo, ellos podían tener comunión Dios en los atrios o patios de su casa de oración. Desde estos atrios ellos podían orar y adorar a Dios en la hermosura de su santidad.
Hoy como Iglesia del Nuevo Pacto, no necesitamos un tabernáculo, no necesitamos un templo para tener comunión con Dios, no necesitamos entrar a los atrios de Jehová.... Jesus le dijo esto a la mujer samaritana: Juan 4:23-24
»Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que lo adoren. »Dios es espíritu, y los que lo adoran deben adorar en espíritu y en verdad».
Jesus estaba haciendo un contraste histórico redentor. El contraste es entre la adoración del Antiguo Testamento y la adoración del Nuevo Testamento. La adoración en el Nuevo Testamento es la adoración que es en Espíritu y en verdad. La hora de la glorificación de Cristo inauguró un modo de adoración que no era posible en el Antiguo Testamento. En otras palabras, el pueblo de Dios del Antiguo Testamento no podía adorar en Espíritu y en verdad porque la hora de la glorificación de Cristo no había llegado.
Su glorificación es el inicio de una nueva era de adoración en el que los creyentes adoran al Padre en Espíritu y verdad. Con la llegada de Cristo, los tipos y sombras del Antiguo Testamento dieron paso a la realidad que prefiguraban.
Con su venida , llego el momento para que el templo de Jerusalén fuera sustituido por el verdadero templo. Él es el verdadero templo.
Había llegado la era del Espíritu. Había llegado la era del Mesías. Y como Cristo nos ha dado su Espíritu que nos une a él, adoramos al Padre en él, por el Espíritu Santo. Es decir, adoramos al Padre en unión con el Cristo glorificado en el reino del Espíritu.
Eso es lo que significa adorar al Padre en Espíritu y Verdad.
El cambio de adoración del Antiguo Testamento a la adoración del Nuevo Testamento es un cambio de la sombra a la realidad o del tipo al antitipo. Es un cambio de las copias terrenales dadas temporalmente por Dios a las realidades celestiales, que significaban.
Dios le dio esta esperanza a los creyentes del A.T., ellos no se mantendrán adorando en una religión llena de sobras y figuras, Dios había prometido revelar la gracia y la verdad en Jesucristo. El Señor le esta enseñando a la mujer samaritana, aquello que Juan testifica en el Capitulo 1
“Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.” (Juan 1.17–18, RVR60)
El autor de Hebreos lo deja muy claro. Contrastando la adoración de Israel en el monte Sinaí con la adoración de Cristo, el verdadero sumo sacerdote.
Porque cuando Moisés terminó de promulgar todos los mandamientos a todo el pueblo, conforme a la ley, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos, con agua y lana escarlata e hisopo, y roció el libro mismo y a todo el pueblo, diciendo: «Esta es la sangre del pacto que Dios les ordenó a ustedes». De la misma manera roció con sangre el tabernáculo y todos los utensilios del ministerio. Y según la ley, casi todo ha de ser purificado con sangre, y sin derramamiento de sangre no hay perdón. Por tanto, fue necesario que las representaciones de las cosas en los cielos fueran purificadas de esta manera, pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos. Porque Cristo no entró en un lugar santo hecho por manos, una representación del verdadero, sino en el cielo mismo, para presentarse ahora en la presencia de Dios por nosotros, y no para ofrecerse a sí mismo muchas veces, como el sumo sacerdote entra al Lugar Santísimo cada año con sangre ajena.
Como nuestro gran sumo sacerdote entro en el cielo mismo, ya no adoramos en las sombras o figuras. Ya no adoramos en un templo terrenal sino en el celestial. El cambio de la adoración del Antiguo Testamento a la adoración del Nuevo Testamento es un cambio de ámbito, pasamos de la tierra al cielo, de la sombra a la realidad.
Hoy no adoramos en un patio como lo hacía Israel, sin tener acceso a Dios aun.... Cristo nos ha abierto un camino al Padre por medio de su sacrificio, hoy adoramos en el cielo mismo por la fe. Lo hoy experimentamos por la fe, será en el día de Cristo un disfrute por vista. Estaremos en la presencia consoladora de Dios por la eternidad.
Cada día del Señor estamos anticipando es día de gloria que hoy disfrutamos parcialmente mientras llegamos a la casa de Dios.
Podemos morar en la presencia consoladora de Dios, porque en Cristo no abrió el camino:
por un camino nuevo y vivo que Él inauguró para nosotros por medio del velo, es decir, Su carne, y puesto que tenemos un gran Sacerdote sobre la casa de Dios, acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, teniendo nuestro corazón purificado de mala conciencia y nuestro cuerpo lavado con agua pura.
3. La luz de Jehová
3. La luz de Jehová
Dios ordena a Moisés pedir al pueblo aceite de oliva puro prensado o extra virgen, para mantener las lamparas del lugar santísimo encendidas. El aceite extra virgen puesto en las lamparas del candelabro daría una luz mas brillante y con menos humo para alumbrar la mesa de la proposición.
Esta instrucción nos da paso a las instrucciones de Dios acerca de los sacerdotes. Ellos tenían la responsabilidad de mantener estas lamparas encendidas todo el tiempo, debían hacer turnos para esto de día y de noche:
Cántico de ascenso gradual. Bendigan al Señor todos los siervos del Señor, Los que sirven por la noche en la casa del Señor. Alcen sus manos al santuario Y bendigan al Señor. Desde Sión te bendiga el Señor, Que hizo los cielos y la tierra.
Esta lampara encendida, garantizo a Israel que no había un momento del día en el que un sacerdote no hiciera ruegos por ellos. De este lado de la historia retentiva, nosotros tenemos un sacerdote que no deja de interceder por nosotros nunca:
Los sacerdotes anteriores eran más numerosos porque la muerte les impedía continuar, pero Jesús conserva Su sacerdocio inmutable puesto que permanece para siempre. Por lo cual Él también es poderoso para salvar para siempre a los que por medio de Él se acercan a Dios, puesto que vive perpetuamente para interceder por ellos.
¿Quién es el que condena? Cristo Jesús es el que murió, sí, más aún, el que resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
Jesus siempre esta de guardia hermanos, la razón por la que nuestra fe seguirá siempre en pie, es su intercesión por nosotros.
Podemos morar en la presencia consoladora de Dios en unión con Cristo quien es nuestro representante que intercede continuamente por nosotros delante de Dios.
Conclusión:
Conclusión:
Hermanos, para terminar debemos saber que Exodo 27 nos da una idea de la realidad que nos espera como pueblo de Dios en gloria. Un día Cristo regresará, reunirá a su pueblo redimido, aquellos que han puesto en él su confianza, de todos los extremos de la tierra y los traerá a la presencia consoladora de Dios, donde habitarán por toda la eternidad.
Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existe. Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios, preparada como una novia ataviada para su esposo. Entonces oí una gran voz que decía desde el trono: «El tabernáculo de Dios está entre los hombres, y Él habitará entre ellos y ellos serán Su pueblo, y Dios mismo estará entre ellos. »Él enjugará toda lágrima de sus ojos, y ya no habrá muerte, ni habrá más duelo, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas han pasado»
Amiigos que nos acompañan, la mala noticia es que no todos podrán entrar a este lugar glorioso:
»El vencedor heredará estas cosas, y Yo seré su Dios y él será Mi hijo. »Pero los cobardes, incrédulos, abominables, asesinos, inmorales, hechiceros, idólatras, y todos los mentirosos tendrán su herencia en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda».
Solo los vencedores, los que han depositado toda su confianza en el sacrificio sustitutivos de Cristo, en el poder salvador de Jehovás y solo aquellos que están siendo sostenidos por la intercesión del hijo podrán morar en la presencia consoladora de Dios.
Amigo, asegúrate hoy de estar unido a Cristo por la fe. Hoy es día de salvación, si pones en Cristo tu confianza podrás tener el consuelo de estar en aquél lugar para el cual fuiste creado.
Hermano, recuerde porque podemos hoy disfrutar la presencia consoladora de Dios según la enseñanza de Exodo 27:
El Señor en quien hemos puesto nuestra esperanza, hizo expiación por nuestro pecado.
El Dios en quien hemos creído, es el cuerno de nuestra salvación, es poderoso para salvarnos.
En Cristo se nos ha abierto un camino para venir a Dios y adorarle en Espiritu y en verdad. Este camino un día nos llevara al disfrute pleno de esta presencia consoladora que hoy disfrutamos por la fe.
Y tenemos la garantía de estar un día en gloria. porque Cristo continuamente intercede por nosotros delante de Dios.
Oremos