El gozo provocado por Jesús
Jesucristo le da gozo a su pueblo. El pueblo de Dios es capaz de gozarse en la venida de su Salvador y Señor, y en todos los beneficios que vienen juntamente con él.
Contexto
Los ángeles anunciaron el nacimiento de Cristo, pero no a los líderes políticos, ni a los sacerdotes, fariseos o escribas, sino a unos pastores. ¿Por qué? El oficio de cuidar ovejas no se consideraba vocación muy elevada. Más bien, el Sanedrín había establecido que quien pastoreaba ovejas no era digno de confianza y no podía aceptarse como testigo. ¿Por qué, entonces, llegaron los mensajeros celestiales a los pastores? Parece ser que Dios, quien sabe todo, incluyendo el corazón humano, encontró en aquellos hombres, pobres y humildes, un corazón dispuesto a creer.
¡Por supuesto que los pastores tuvieron miedo! ¿Desde cuándo un ser celestial se comunicaba con los pastores? O, ¿cuándo habían visto “la gloria de Dios” los hombres sencillos del campo? (2:9) Sin lugar a duda, ellos reconocieron que el acontecimiento era de procedencia sobrenatural. Su fe sencilla los convenció de inmediato que venía de su Dios, y su reacción está de acuerdo con la de unhombre pecador que recibe una comunicación divina por primera vez
Pero el mensaje no era para provocar miedo, sino gozo. “¡Os ha nacido un Salvador!” (2:11) Y como para confirmarlo, apareció una multitud de mensajeros celestiales alabando a Dios. El versículo 13 no dice que cantaron, pero es posible que lo hayan hecho.
La evidencia de la fe de los pastores la vemos en que fueron a Belén para ver con sus propios ojos lo que el ángel les anunció. Y lo hicieron “apresuradamente”, no para comprobar el dicho del ángel sino dijeron: “veamos esto que ha sucedido, y que el Señor nos ha manifestado” (2:15).