Victoria, sobre las fuerzas espirituales
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· 229 viewsEn la guerra espiritual la victoria es segura pues Jesucristo ya la ha ganado en la cruz y en la resurrección. Los cristianos eventualmente compartirán la victoria total de Cristo y a través de él superarán a sus enemigos espirituales.
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Las victorias ganadas por Jesucristo
Las victorias ganadas por Jesucristo
Sobre el pecado y la tentación
Sobre el pecado y la tentación
Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
Ver también Mt 4:1–11; He 2:18; 1 P 2:22
Sobre el mundo
Sobre el mundo
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Ver también Ap 3:21; Ap 17:14
Sobre el diablo
Sobre el diablo
El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
Ver también Mt 12:29; Lc 10:18; Jn 12:31; Col 2:15; He 2:14
Sobre la muerte
Sobre la muerte
al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la muerte, por cuanto era imposible que fuese retenido por ella.
Ver también Ro 5:17; Ro 6:9–10; 1 Co 15:54–57; 2 Ti 1:10
Sobre todos los enemigos
Sobre todos los enemigos
Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia. Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.
Ver también Is 42:13; Flp 2:9–11; He 10:13
Los creyentes tienen la victoria a través de Cristo
Los creyentes tienen la victoria a través de Cristo
Sobre el poder del pecado
Sobre el poder del pecado
¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
Ver también Ro 6:11–14; Col 3:9–10
Sobre las tentaciones
Sobre las tentaciones
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
Ver también Mt 6:13; He 2:18; He 4:15–16
Sobre el mundo
Sobre el mundo
Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
Ver también Jn 15:19; Tit 2:11–13; 2 P 1:3–4
Sobre el diablo
Sobre el diablo
Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche. Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
Ver también Ro 16:20; Ef 6:12–13; 1 Jn 2:13–14; 1 Jn 4:4
Sobre la muerte
Sobre la muerte
Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.
Ver también Jn 11:25–26; 1 Co 15:54–57; 1 Tes 4:13–17
Los creyentes comparten en la victoria de Cristo
Los creyentes comparten en la victoria de Cristo
Ro 8:37; 1 Co 15:57; 1 Jn 5:4–5
Ver también Jn 11:25; Ro 6:5; 1 Co 15:20; 2 Co 2:14; Flp 4:13; He 11:33–34 La victoria se recibe por fe.
La victoria final
La victoria final
La visión de la victoria final en Jesucristo
La visión de la victoria final en Jesucristo
Ap 2:26; Ap 3:5
Será completa al final de los tiempos
Será completa al final de los tiempos
Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia.
Ver también Ap 21:1–3; Ap 21:7
Aunque segura aún no ha sido completamente realizada
Aunque segura aún no ha sido completamente realizada
Todo lo sujetaste bajo sus pies.
Porque en cuanto le sujetó todas las cosas, nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos que todas las cosas le sean sujetas.
Ver también Hch 3:21; Ro 8:24–25; Ef 1:10; Flp 3:20–21; 2 Tes 2:8