Doctrina de la Resurrección de los Muertos

Salmo 90:10 (RVR60)

Los días de nuestra edad son setenta años;

Y si en los más robustos son ochenta años,

Con todo, su fortaleza es molestia y trabajo,

Porque pronto pasan, y volamos.

El hombre con mayor edad sobre la tierra fue el abuelo de Noé, Matusalén que vivió 969 años, pasadas las generaciones los hombres vivían cada vez menos, hasta llegar a un promedio de edad actual en CR de 81 años.

La muerte física es algo inevitable, es parte del gran ciclo de la vida. Cerca de 150mil personas mueren en el mundo diariamente. En Costa Rica mueren más de 26mil personas al año.

La muerte es algo que no podemos evitar. Podríamos considerar que si todo acabara al morir pues lo unico que lamentaríamos es que se acabe tan pronto.

Pero la Biblia enseña que la muerte física es solo el boleto a la eternidad, la Biblia enseña que hay vida después de la muerte. Iniciemos con una historia revelada por Jesús, Lucas 16:19-23 “Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez.Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquél, lleno de llagas,y ansiaba saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; y aun los perros venían y le lamían las llagas.Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado.Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.”

Debemos notar que ambos murieron y que ambos despertaron en un lugar, por cierto diferentes. Su almas o espiritus fueron llevados a lugares espirituales temporales, como dice Eclesiastes 12:7 “y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.”

Cuando una persona muere su cuerpo deja de funcionar pero él, su escencia quien es él sigue vivo según la Biblia en alguno de dos lugares, el Infierno Lucas 12:5 “Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a éste temed.” o en el cielo, Lucas 23:41-43 “Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.”

Ahora, la doctrina que quiero compartirle hoy es la de la resurrección de los muertos. La Biblia enseña que un día todos los muertos serán resucitados, esto mejor dicho quiere decir que un día todas esas almas, o espiritus volverán a tener un cuerpo material, pero diferente al original.

Juan 5:28-29 “No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.”

Debemos distinguir la resurrección de los muertos en condición y tiempo.

En el mundo solo hay dos tipos de personas. Los pecadores redimidos y los pecadores no redimidos, los adoptados y los adoptados, los justificados y lo no justificados, los santificados y los no santificados, los regenerados y los no regenereados.

Iniciemos con estos segundos, los que mueren sin Cristo: Estos mueren y son arrojados a la condenación temporal del infierno, y serán resucitados al final del Reinado Milenial de Jesús, para lo que se conoce como el Juicio del Gran Trono Blanco. Apocalipsis 20:11-16 Estos serán resucitados para se juzgados y condenados ahora sí eternamente en el lago de fuego para ser atormentados en cuerpo día y noche. A esta condenación la Biblia le llama la muerte segunda, y a esta resurrección se le conce como la segunda resurreción.

Ahora veamos acerca de los que han creído en Jesús, los cuales al morir van al cielo como habitación temporal pero que serán resucitados estos en tres etapas diferentes. Veamos con atención.

1. Cristo el primero en resucitar. El es las primicias. 1 Corintios 15:22-23 “Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.” “las primicias” esto quiere decir el primero en una serie contable, como la primera cosecha.

2. Los muertos en Cristo en su venida. 1 Tesalonicenses 4:14-16 “Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.”

3. Todos los Santos del Antiguo Testamento y los mártires de la tribulación. Daniel 12:13 “Y tú irás hasta el fin, y reposarás, y te levantarás para recibir tu heredad al fin de los días.”

Apocalipsis 20:4 “Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.”

Con este último grupo se completa la primera resurrección de la cual participan solo los que pusieron su fe en Jesús. Estos vivirán eternamente dicha, plenitud, gozo y paz. Por eso Jesús dijo Juan 11:24 “Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero.Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.”

Esta verdad fue proclamada aun antes de que Jesús encarnara Job 19:25-26 “Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo; Y después de deshecha esta mi piel, En mi carne he de ver a Dios;”

¿Cómo será esto posible?

Pablo dice en 1 Corintios 15:40-49 “Y hay cuerpos celestiales, y cuerpos terrenales; pero una es la gloria de los celestiales, y otra la de los terrenales. Una es la gloria del sol, otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas, pues una estrella es diferente de otra en gloria. Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción. Se siembra en deshonra, resucitará en gloria; se siembra en debilidad, resucitará en poder. Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual. Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante. Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual. El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo. Cual el terrenal, tales también los terrenales; y cual el celestial, tales también los celestiales. Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial…”

Cristo es nuestra garantía, el resucitó a Lazaro, al hijo de la viuda de Nain, a la hija de Jairo, él mismo resucitó y el poder que le resucitó a él opera hoy en todos los que somos sus hjios. Un dia nos levantaremos de entre los muertos y seremos semejantes a Cristo. Gloria a Dios. Por eso dice la Biblia Apocalipsis 20:6 “Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años.” Aleluya.

Si usted no ha entregado su vida a Cristo que más necesita escuchar Entréguese hoy.

Y si usted ya es de Cristo que dice Colosenses 3:1-3 “Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.”

Deje de vivir para lo terrenal, busque lo celestial, apártese del pecado y viva para Cristo.