Maldiciones Generacionales.

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INTRODUCCIÓN:

Avanzmaos un poco más en esta serie LIBERTAD ESPIRITUAL que es el resultado del conocimiento aplicado.
Solo cuando el conocimiento es aplicado podemos experimentar transformación verdadera en la vida.
Otra causa de la maldición es todo lo relacionado con

1. Las cosas señaladas y apartadas para ser destruidas.

Veamos el ejemplo de un hombre llamado Acán en la conquista de la tierra prometida.
Josué 6:16–19 NTV
16 En la séptima vuelta, mientras los sacerdotes daban el toque prolongado con los cuernos, Josué les ordenó a los israelitas: «¡Griten, porque el Señor les ha entregado la ciudad! 17 Jericó y todo lo que hay en la ciudad deben ser destruidos por completo como una ofrenda al Señor. Sólo se les perdonará la vida a Rahab, la prostituta, y a los que se encuentren en su casa, porque ella protegió a nuestros espías. 18 »No se queden con ninguna cosa que esté destinada para ser destruida, pues, de lo contrario, ustedes mismos serán destruidos por completo y traerán desgracia al campamento de Israel. 19 Todo lo que esté hecho de plata, de oro, de bronce o de hierro pertenece al Señor y por eso es sagrado, así que colóquenlo en el tesoro del Señor».
El verso 17 dice que cuando se destruye todo lo pagano esos tambien es recibido por Dios como una ofrenda agradable Él.
Josué 6:17 RVR60
17 Y será la ciudad anatema a Jehová, con todas las cosas que están en ella; solamente Rahab la ramera vivirá, con todos los que estén en casa con ella, por cuanto escondió a los mensajeros que enviamos.
Josué 7:1 RVR60
1 Pero los hijos de Israel cometieron una prevaricación en cuanto al anatema; porque Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó del anatema; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel.
Después de la conquista de Jerico fueron a conquistar una ciudad pequeña llamada HAI y ahí fueron derrotados y murieron 36 hombres.
La razón de la derrota tener cosas entre sus petenencias que habia sido ordenado que fueran destruídas.
Y además habían tomado algo de lo que Dios había dicho que era consagrado para ÉL.
Josué 7:10–13 NTV
10 Pero el Señor le dijo a Josué: —¡Levántate! ¿Por qué estás ahí con tu rostro en tierra? 11 ¡Israel ha pecado y ha roto mi pacto! Robaron de lo que les ordené que apartaran para mí. Y no sólo robaron sino que además mintieron y escondieron los objetos robados entre sus pertenencias. 12 Por esa razón, los israelitas huyen derrotados de sus enemigos. Ahora Israel mismo será apartado para destrucción. No seguiré más con ustedes a menos que destruyan esas cosas que guardaron y que estaban destinadas para ser destruidas. 13 »¡Levántate! Ordénale al pueblo que se purifique, a fin de prepararse para mañana. Pues esto dice el Señor, Dios de Israel: “En medio de ti, oh Israel, están escondidas las cosas apartadas para el Señor. Nunca derrotarás a tus enemigos hasta que quites esas cosas que tienes en medio de ti”.

Es sumamemte importante que nosotros nos depojemos de todo aquello que no es grato al Señor.

Imagenes, amuletos, licor en las casas, música que no edifica para nada, cosas para la buena suerte, etc.

Josué 7:19–21 NTV
19 Entonces Josué le dijo a Acán: —Hijo mío, da gloria al Señor, Dios de Israel, y di la verdad. Confiesa y dime lo que has hecho. No me lo escondas. 20 Acán respondió: —¡Es cierto! He pecado contra el Señor, Dios de Israel. 21 Entre el botín, vi un hermoso manto de Babilonia, doscientas monedas de plata y una barra de oro que pesaba más de medio kilo. Los deseaba tanto que los tomé. Está todo enterrado debajo de mi carpa; la plata la enterré aún más profundo que el resto de las cosas.
Josué 7:24–26 RVR60
24 Entonces Josué, y todo Israel con él, tomaron a Acán hijo de Zera, el dinero, el manto, el lingote de oro, sus hijos, sus hijas, sus bueyes, sus asnos, sus ovejas, su tienda y todo cuanto tenía, y lo llevaron todo al valle de Acor. 25 Y le dijo Josué: ¿Por qué nos has turbado? Túrbete Jehová en este día. Y todos los israelitas los apedrearon, y los quemaron después de apedrearlos. 26 Y levantaron sobre él un gran montón de piedras, que permanece hasta hoy. Y Jehová se volvió del ardor de su ira. Y por esto aquel lugar se llama el Valle de Acor, hasta hoy.

Un ídolo es una cosa maldita

Deuteronomio 7:25–26 RVR60
25 Las esculturas de sus dioses quemarás en el fuego; no codiciarás plata ni oro de ellas para tomarlo para ti, para que no tropieces en ello, pues es abominación a Jehová tu Dios; 26 y no traerás cosa abominable a tu casa, para que no seas anatema; del todo la aborrecerás y la abominarás, porque es anatema.
La palabra anatema se usa para describir algo que es maldito o destinado a la destrucción.

2. Las cosas dedicadas a Dios

El diezmo es santo y dedicado al Señor.
Levítico 27:30–32 NTV
30 »La décima parte de los productos de la tierra, ya sea grano de los campos o fruto de los árboles, le pertenece al Señor y debe ser apartada, es santa para el Señor. 31 Si deseas volver a comprar esa décima parte del grano o de la fruta que pertenece al Señor, tendrás que pagar su valor, más un veinte por ciento. 32 Cuenta uno de cada diez animales de tus manadas y rebaños, sepáralo, es santo para el Señor.
Malaquías 3:6–12 NTV
6 »Yo soy el Señor y no cambio. Por eso ustedes, descendientes de Jacob, aún no han sido destruidos. 7 Desde los días de sus antepasados, han despreciado mis decretos y los han desobedecido. Ahora, vuelvan a mí y yo volveré a ustedes, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales. »Pero ustedes preguntan: “¿Cómo podemos volver cuando nunca nos fuimos?”. 8 »¿Debería el pueblo estafar a Dios? ¡Sin embargo, ustedes me han estafado! »Pero ustedes preguntan: “¿Qué quieres decir? ¿Cuándo te hemos estafado?”. »Me han robado los diezmos y ofrendas que me corresponden. 9 Ustedes están bajo maldición porque toda la nación me ha estado estafando. 10 Traigan todos los diezmos al depósito del templo, para que haya suficiente comida en mi casa. Si lo hacen —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales— les abriré las ventanas de los cielos. ¡Derramaré una bendición tan grande que no tendrán suficiente espacio para guardarla! ¡Inténtenlo! ¡Pónganme a prueba! 11 »Sus cosechas serán abundantes porque las protegeré de insectos y enfermedades. Las uvas no caerán de las vides antes de madurar —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales—. 12 Entonces todas las naciones los llamarán benditos, porque su tierra será un deleite, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.

DESARROLLO:

Veamos un poco lo que dice Dios en su palabra de lo que se conoce como Maldiciones Generacionales.
Vayamos al inicio.
Génesis 1:26 NTV
26 Entonces Dios dijo: «Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como nosotros. Ellos reinarán sobre los peces del mar, las aves del cielo, los animales domésticos, todos los animales salvajes de la tierra y los animales pequeños que corren por el suelo».
Génesis 2:7 NTV
7 Luego el Señor Dios formó al hombre del polvo de la tierra. Sopló aliento de vida en la nariz del hombre, y el hombre se convirtió en un ser viviente.
Al inicio los seres humanos tenían la imagen y naturaleza de Dios, pero despues de la desobediencia eso cambio.
Despues ya sabemos lo que paso con Caín y Abel y como el pecado y la maldad ya opera en sus vidas.
Todos los seres humanos cuando nacemos ya nacemos con esa tendencia por hacer lo malo, es por eso la necesidad de los padres de enseñar lo bueno a los niños.

Asi que lo que todos recibimos en nuestros GENES es esa tendencia a hacer lo malo (iniquidad) y tambien la consecuencia de esa maldad que es la muerte.

Romanos 5:12 NTV
12 Cuando Adán pecó, el pecado entró en el mundo. El pecado de Adán introdujo la muerte, de modo que la muerte se extendió a todos, porque todos pecaron.

Por ejemplo a los niños se les debe enseñar a decir la verdad, a ellos no hay que enseñarles a mentir.

Asi que vamos a ver un pasaje que nos ayudará a entender muy bien el tema de las maldiciones generacionales.
Ezequiel 18:1–32 NTV
1 Luego recibí otro mensaje del Señor: 2 «¿Por qué citan ustedes ese proverbio acerca de la tierra de Israel, que dice: “Los padres comieron uvas agrias, pero la boca de sus hijos se frunce por el sabor”? 3 Tan cierto como que yo vivo, dice el Señor Soberano, que dejarán de citar ese proverbio en Israel. 4 Pues todos los seres humanos son míos para juzgar, los padres y los hijos por igual. Esta es mi regla: la persona que peque es la que morirá. 5 »Supongamos que cierto hombre es recto y hace lo que es justo y correcto. 6 No participa en los banquetes que se ofrecen en los montes ante los ídolos de Israel ni les rinde culto. No comete adulterio ni tiene relaciones sexuales con una mujer durante su período menstrual. 7 Es un acreedor compasivo, no se queda con objetos entregados en garantía por deudores pobres. No les roba a los pobres, más bien, les da de comer a los hambrientos y les da ropa a los necesitados. 8 Presta dinero sin cobrar interés, se mantiene lejos de la injusticia, es honesto e imparcial al juzgar a otros 9 y obedece fielmente mis decretos y ordenanzas. Todo el que hace estas cosas es justo y ciertamente vivirá, dice el Señor Soberano. 10 »Pero supongamos que ese hombre tiene un hijo adulto que es ladrón o asesino y se niega a hacer lo correcto. 11 Ese hijo también comete todas las maldades que su padre jamás haría: rinde culto a ídolos en los montes, comete adulterio, 12 oprime a los pobres e indefensos, roba a los deudores al negarles que recuperen sus garantías, rinde culto a ídolos, comete pecados detestables 13 y presta dinero con intereses excesivos. ¿Acaso debería vivir ese pecador? ¡No! Tiene que morir y asumir toda la culpa. 14 »Pero supongamos que ese hijo pecador, a su vez, tiene un hijo que ve la maldad de su padre y decide no llevar esa clase de vida. 15 Este hijo se niega a rendir culto a ídolos en los montes y no comete adulterio. 16 No explota a los pobres, más bien, es justo con los deudores y no les roba. Da de comer a los hambrientos y da ropa a los necesitados. 17 Ayuda a los pobres, presta dinero sin cobrar interés y obedece todos mis decretos y ordenanzas. Esa persona no morirá por los pecados de su padre; ciertamente vivirá. 18 Sin embargo, el padre morirá por todos sus pecados: por haber sido cruel, por robar a la gente y hacer lo que es indudablemente incorrecto en medio de su pueblo. 19 »“¿Cómo? —se preguntan ustedes—. ¿No pagará el hijo por los pecados del padre?”. ¡No! Porque si el hijo hace lo que es justo y correcto y obedece mis decretos, ese hijo ciertamente vivirá. 20 La persona que peque es la que morirá. El hijo no será castigado por los pecados del padre ni el padre será castigado por los pecados del hijo. Los justos serán recompensados por su propia conducta recta y las personas perversas serán castigadas por su propia perversidad. 21 Ahora bien, si los perversos abandonan sus pecados y comienzan a obedecer mis decretos y a hacer lo que es justo y correcto, ciertamente vivirán y no morirán. 22 Todos los pecados pasados serán olvidados y vivirán por las acciones justas que han hecho. 23 »¿Acaso piensan que me agrada ver morir a los perversos?, pregunta el Señor Soberano. ¡Claro que no! Mi deseo es que se aparten de su conducta perversa y vivan. 24 Sin embargo, si los justos se apartan de su conducta recta y comienzan a pecar y a comportarse como los demás pecadores, ¿se les permitirá vivir? No, ¡claro que no! Todas las acciones justas que han hecho serán olvidadas y morirán por sus pecados. 25 »Sin embargo, ustedes dicen: “¡El Señor no hace lo correcto!”. Escúchame, pueblo de Israel. ¿Soy yo el que no hace lo correcto o son ustedes? 26 Cuando los justos abandonen su conducta justa y comiencen a cometer pecados, morirán por eso. Sí, morirán por sus acciones pecaminosas; 27 y si los perversos abandonan su perversidad, obedecen la ley y hacen lo que es justo y correcto, salvarán su vida. 28 Vivirán, porque lo pensaron bien y decidieron apartarse de sus pecados. Esas personas no morirán. 29 Aun así, los israelitas siguen diciendo: “¡El Señor no hace lo correcto!”. Oh pueblo de Israel, tú eres quien no hace lo correcto, no yo. 30 »Por lo tanto, pueblo de Israel, juzgaré a cada uno de ustedes, según sus acciones, dice el Señor Soberano. Arrepiéntete y apártate de tus pecados. ¡No permitas que tus pecados te destruyan! 31 Deja atrás tu rebelión y procura encontrar un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué habrías de morir, oh pueblo de Israel? 32 No quiero que mueras, dice el Señor Soberano. ¡Cambia de rumbo y vive!
A veces las maldiciones generacionales son entendidas como la anulación de la voluntad del hijo o hijos.
Ejemplo:
El hijo es alcoholico porque el padre era alcoholico.
Y tratando de justificar el pecado personal hemos recurrdio a una mala interpretación de una maldición.
Porsupuesto que el alcoholismo de un padre incrementa la influencia en el hijo a beber, Pero recordemos que la influencia es externa y algo gneeracional es interno.
La pobreza es otra situación que se ha malentendido como una maldición generacional.
Como mis abuelos y padres han sido pobres yo tambien soy pobre y mis hijo serán pobres.
Claro que crecer en un ambiente de pobreza influye en el desarrollo de una persona, pero si esa persona toma las decisiones correctas y estudia y se prepara y trabaja en su auto estima y busca la gracia y el favor de Dios esa persona cambiará su vida.
Éxodo 20:1–6 NTV
1 Luego Dios le dio al pueblo las siguientes instrucciones: 2 «Yo soy el Señor tu Dios, quien te rescató de la tierra de Egipto, donde eras esclavo. 3 »No tengas ningún otro dios aparte de mí. 4 »No te hagas ninguna clase de ídolo ni imagen de ninguna cosa que está en los cielos, en la tierra, o en el mar. 5 No te inclines ante ellos ni les rindas culto, porque yo, el Señor tu Dios, soy Dios celoso, quien no tolerará que entregues tu corazón a otros dioses. Extiendo los pecados de los padres sobre sus hijos; toda la familia de los que me rechazan queda afectada, hasta los hijos de la tercera y la cuarta generación. 6 Pero derramo amor inagotable por mil generaciones sobre los que me aman y obedecen mis mandatos.
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