Cuatro razones por las que Dios te da un salario--Sermón

CUATRO RAZONES POR LAS QUE DIOS TE DA UN SALARIO--SERMÓN

TEXTO CLAVE: 2 Cor 8.3 (“Doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas,” )

INTRODUCCIÓN:

Cuando hay gratitud por lo que Dios ya hizo en mi vida, el dar para su obra no es un impedimento. Hoy analizaremos: Cuatro razones por las que Dios te da un salario.

I.- PARA HONRAR A TU DIOS

Prov 3.9 “(»Honra a Jehová con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos;”)

Tu salario es un instrumento de alabanza

Asi como honras a Dios con tu voz y tu oración.

Honras a Dios cuando das dinero para su obra.

II.- PARA PROVEER PARA TU FAMILIA

1 Tim 5.8 (“porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo.”)

Dios nunca pretendió que los niños pasaran hambre, ni que las familias pasaran frio.

El bienestar de la familia siempre está por encima de la necesidad de lanchas y diamantes.

No debemos depender de lo que tenemos, ni de las riquezas, ni de las posesiones, ni las circunstancias. Estas cosas son temporales; pronto pasan. Nuestro gozo debe depender de nuestra relación con Dios, así nunca se puede perder.

Rafael Porter

III.- PARA APOYAR A TU PAÍS.

Rom 13.7 (“Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra.”)

Hay que pagar las carreteras.

Hay que sostener las escuelas.

Los ciudadanos del cielo no están exentos de hacer su parte en la tierra.

IV.- PARA DISFRUTARLO

1 Tim 6.17 (“A los ricos de este mundo manda que no sean altivos ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.”)

Estas cuatro prioridades nos ayudan a diseñar una sencilla estrategia para la gestión del dinero.

CONCLUSIÓN.

La distribución ideal es la siguiente:

10% Para Dios

10% Para Ahorro

80% Para gastos

APLICACIÓN.

Después de honrar a Dios y de poner algo de dinero en los ahorros, el 80% que queda siempre será suficiente para las necesidades del día a día.

Si echamos una buena mirada a las prioridades que establecemos para el uso de nuestro dinero, tendremos una buena información de como estamos parados espiritualmente.

Larry Burkett