La Doctrina de Los Roles Bíblicos en la Familia

1 Corintios 11:11-12 “Pero en el Señor, ni el varón es sin la mujer, ni la mujer sin el varón;porque así como la mujer procede del varón, también el varón nace de la mujer; pero todo procede de Dios.”

Vivimos tiempos donde la busqueda de igualdad se ha convertido en el estandarte de la sociedad. Les leo un articulo que encontré por allí.

La igualdad de género es un concepto que cada vez encontramos más en nuestro día a día: en las noticias, en nuestros puestos de trabajo, en las redes sociales… Pero, ¿alguna vez te has preguntado qué significa exactamente? ¿Por qué se sigue reivindicando la igualdad de género si todas las leyes reconocen los mismos derechos a hombres y mujeres? ¿Qué diferencia hay entre igualdad y equidad? Hoy queremos que cuando acabes de leer este artículo, tengas bien claras todas las respuestas.

Según Naciones Unidas, la igualdad de género se refiere a “la igualdad de derechos, responsabilidades y oportunidades de las mujeres y los hombres, y las niñas y los niños”. Por tanto, el sexo con el que hayamos nacido nunca va a determinar los derechos, oportunidades y responsabilidades que podamos tener a lo largo de nuestra vida. La igualdad de género es por tanto un principio jurídico universal, mientras que la equidad de género introduce además un componente ético para asegurar una igualdad real que de alguna forma compense la desigualdad histórica que el género femenino arrastra en cuanto a representación política o mercado laboral, entre otras. La equidad debe aplicarse en el género tal como se aplica en otros ámbitos, como por ejemplo en el sistema tributario, donde cada persona paga más o menos en función de lo que tiene.

Aunque las cuestiones de género llevan años en la agenda internacional, es un hecho que las mujeres y las niñas, sufren discriminación y violencia por el simple hecho de haber nacido mujer en todo el mundo. El informe de la OCDE “Perseguir la igualdad de género: una batalla cuesta arriba” lo deja bien claro cuando asegura que ningún país en el mundo, ni siquiera aquellos más igualitarios, ha alcanzado aún la igualdad de género. Precisamente los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que deben cumplirse en 2030, establecen en su objetivo número 5 “lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y niñas”.

Este tema de la igualdad y equidad es un tema sensible hoy día en nuesta sociedad. Pero más allá de debatir sobre lo bueno y malo de esto, la realidad es que la lucha por “empoderar” a la mujer cual verdaderamente es un temino muy peligroso, he logrado que los hombres evadan su rol natural impuesto por Dios. Mientras el liderazgo de la mujer crece el del hombre disminuye.

Comprendemos por lo que leímos que no estamos hablando de un tema de valor, ni siquiera de capacidades, sino de roles, del orden perfecto que Dios estableció en su palabra al crearnos. Y esto para la iglesia del Señor tiene preeminencia, Somos criaturas de Dios. Él nos creó y él estableció el cómo debe funcionar la familia.

Porque hermanos, este tema de igualdad ha vuelto la sociedad de cabeza que desmedidamente se ha empezado a empoderar a los niños a tal punto que cada vez más los padres pierden la autoridad sobre sus hijos y los hijos cada vez más adquieren poder en sus hogares.

Veamos lo que la escritura dice sobre los roles dentro de la familia.

Esposo, Esposas e hijos.

Empecemos con

1. Los varones, el esposo.

La palabra de Dios nos enseña lo siguiente:

1 Corintios 11:3 “Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.”

“Kephalé” Persona que está a cargo.

Efesios 5:23 “porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.”

Hay un mal que carcome nuestra sociedad hoy día y es que muchos hombres, no quieren asumir su papel de encargados, de líderes en sus hogares. ha sido y es responsabilidad del hombre la estabilidad, desarrollo y bienestar de su familia en todas las áreas.

El hombre ha sido puesto por DIos a cargo, cuando leemos...

Josué 24:15 “Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.”

La forma en que Josué se expresa ilustra de manera perfecta el concepto de familia que tenía este hombre de DIos. Asumiendo el rol que Dios le había dado. Hoy muchos hombres preguntan:

¿Amor, hoy vamos a ir a la iglesia?

¿Nuestro hijo va a ir a la sociedad de jovenes?

¿Vamos a ir al campamento?

¿Puedo apuntarme a ese retiro de hombres?

Hermanos por amor al Señor ustede es el que está a cargo de la vida espiritual de su familia, y de su esposa, es cierto que podemos y debemos conversar muchas cosas en la familia y unirnos en la toma de desiciones, por ejemplo si invertimos este dinero aquí o allá, si hacemos este viaje esta fecha o la otra, pero hay cosas que no se preguntan se asume la responsabilidad, porque así es como tiene que ser.

No decimos ¿Vamos a ir a la iglesia? dedimos Alístense porque vamos a ir a la iglesia. Josué decide por su familia, la familia no decide por Josué. Hombres es tiempo de asumir responsabilidades, de tomar el control de la vida espiritual de nuestra familia. Varones del Señor no seamos cobardes en asumir nuestras responsabilidades, no se quite el tiro como decimos, recuerdan la caida de Adán. (Echando la culpa a su mujer)

Lo mismo sucede en la iglesia, DIos ha establecido areas privadas de servicio para el hombres, como tambien reservó para la mujer en su vida y hogar.

Pero muchos hombres hoy no quieren asumir esa responsabiliad, prefieren entrar a la iglesia y salir sombreados sin asumir la responsablidad que les ha sido dada por Dios. La obra que hacen las mujeres es preciosa en esta iglesia, pero no funcionaría si solo ellas estuvieran, se necesitan hombres que se paren en la brecha. Ezequiel 22:30 “Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé.”

Hombres es tiempo de asumir el rol que Dios les ha dado, es tiempo de ponerse a cargo de su matrimonio, familia y tomar el liderago en las diferentes areas de servicio en la iglesia. Dios nos ha hecho para estar al frente. Y debemos cumplir dignamente con esto.

2. Las mujeres, las esposas.

Ustedes son coherederas de la gracia, iguales en valor delante de Dios. Pero difrentes en posición o rol dentro de su hogar y la iglesia cuando con los esposos se compara.

La mujer ha sido creada para cumplir el rol de “ayuda idonea” Genesis 2:18 “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.” Esta es una expresión preciosa, ya que en el contexto dicho Adán estaba poniendo nombre a todos los animales del huerto, animales que estaban en macho y hembra, pero Adán no tenía a nadie semejante a él, Dios decide darle a la mujer, la mujer fue creada por Dios semejante al hombre un ser de su misma categoria, para que pudiera ayudarle, del hebreo “ezer” que siginifica “alguien que contribuye al cumplimiento de una necesidad o apoyo de un esfuerzo y/o propósito” Con razón una esposa sabia es de tanta bendición para un hogar y una familia, cumpliendo este rol de forma maravillosa y dando impulso al buen cumplimiento de propósitos.

Entendemos que la mujer fue creada para el hombre y a razón del hombre 1 Corintios 11:9 “y tampoco el varón fue creado por causa de la mujer, sino la mujer por causa del varón.” Esto no significa que la mujer es el objeto del hombre y puede hacer con ella como quiere, esto es cesurable y de ninguna manera aceptado por Dios Pedro dice 1 Pedro 3:7 “Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.” lo que quiere proclamar es la claridad de los roles, el hombre fue puesto para que liderar su hogar y la mujer para contribuir en el liderazgo de su marido en toda sujeción, esta sujeción como el resultado natural de una mujer que con amor y gratitud se somete al suave y natural liderazgo espiritual de un hombre consagrado a Cristo. Efesios 5:22-24 “Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.” El enfasis siempre está en la frase “así como Cristo”. ESto es algo de doble vía. Si el esposo lo hace bien, la mujer tambien lo hara bien (Si ambos están en el Señor) pero si alguno está apartado de Dios, no lo haran bien. El hombre no querrá asumir su rol y la mujer empezará a gobernar su casa ante la asuencia de un hombre que lo asuma. Esto trae un trastorno serio a la familia.

3. Hombres y mujeres, hijos.

Los hijos por más que los amemos NO MANDAN EN LA CASA. USTED decide si les queire dar voz, pero jamás les de voto. No en las decisiones transcendentales de la familia en las diversas areas que involucra.

Es el deber de los padres dirigir la vida de sus hijos. Empezando por el papá. No es mamá la que cria hijos, no es mamá la que debe velar por la educación y disciplina de los hijos. Es un asunto de ambos y principalmente como cabeza del hogar del esposo.

Para los hijos estos textos. Efesios 6:1-3 “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.”

Colosenses 3:20 “Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.”

El rol de los hijos es OBEDIENCIA no EXIGENCIA. Pero cuándo cambió esto, cuando empezaron a dejar que los hijos hicieran con ustedes como ellos querían sin poner los limites adecuados y por minimizar las acciones de rebeldía que tenían. (Lo estudiaremos en la noche) Hijos entiendan de una vez por todas, que ustedes no son los que deciden, sus papás han sido puestos por Dios para dirigir sus vidas por la senda correcta. Y padres deben aprender de una vez por todas que las peticiones de sus hijos no son EL SANTO MANDAMIENTO IRREVOCABLE DE DIOS. Papás es nuestro deber corregir, instruir y enseñar a nuestros hijos las sendas correctas de la vida.

NO permita que su hijo se siente en el trono del hogar, no le ponga una corona a su hijo ni le dé el baculo ára gobernar. Ese es suyo esposo, y su esposa estará allí para complementar el trabajo de desarrollar hijos con un caracter sano, una vida sespiritual creciente y una moral bíblica.

Proverbios 1:8 “Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre;”

Proverbios 6:20 “Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, Y no dejes la enseñanza de tu madre;”

Proverbios 23:22 “Oye a tu padre, a aquel que te engendró; Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.”

Hijo su DEBER ES OBEDECER, esa es su tarea, hagala en el Señor, cuando sea dificil someta su carne al poder del Espiritu.

Cada uno en casa asuma su rol, cumpla su papel, pida poder al Espiritu Santo. Y CUMPLA SU PARTE si cada uno lo hace como Dios manda, esa será una familia exitosa, de otra forma empezarán a sufrir las consecuencias de manejar las cosas a su manera.

Señor si usted ha sido dejado, demasiado quieto, ha pasado por alto el liderazgo que Dios demanda de usted, arrepientase y pidale poder a DIos para empezar a tomar el control espiritual de su hogar, con amor y sabiduría como Cristo.

Señora si usted ha sido dura y ha querido mandar su hogar y está acostumbrada a pasarle por encima a su esposo y hacerlo ver de otra manera que la que el Señor manda, pida perdón a Dios, humillese y ponga a abajo para que su familia se ordene según el orden bíblico. Y Dios sea glorificado allí.

Hijo si usted ha querido tomar el gobierno de su casa, siendo terco, insolente y desobediente, o si tan solo tiene dificultades para someterse al mandamiento de sus padres arrepientase y honre a Dios con su conducta.

Familias presentes por qué no se comprometen juntos en honrar a Dios, y vivir bajo su voluntad, en modelar la familia cristiana a un mundo caído.