Mormones y su doctrina Sobre Dios
Los mormones caen en el politeísmo
El mormonismo comenzó como una religión monoteísta y trinitaria. De hecho, el Libro del Mormón presenta una versión básicamente bíblica de Dios. En 2 Nephi 31.21 dice: "Y he aquí que ésta es la doctrina de Cristo, y la única y verdadera doctrina del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, que es un sólo Dios eterno".
Alma 11.26-29 también declara: "Y Zeezróm le preguntó: ¿Dices que hay un verdadero Dios viviente? Y Amulek le contestó: 'Sí, hay un verdadero Dios viviente'. Entonces Zeezróm dijo: ¿Existe más de un Dios? Y él contesto: 'No' ".
Igualmente, el "Testimonio de los Tres Testigos", al principio del Libro del Mormón, enseña la unidad de Dios, diciendo: "Honra sea dada al Padre, al hijo, y al Espíritu Santo, que es un solo Dios".
El mormonismo enseña el politeísmo. Poco después de haberse fundado esta religión, Joseph Smith comenzó a formular teorías acerca de la naturaleza de Dios, las cuales llegarían muy pronto a ser la base del concepto mormón sobre la deidad. Como consecuencia, los mormones de hoy en día enseñan el politeísmo.
Tanto Joseph Smith como Brigham Young afirmaban que tres dioses por separado, llamados Elohím, Jehová y Miguel, colaboraron en la organización y población de la tierra. De haber leído su Biblia un poco más, Brigham y Joseph se pudieron haber percatado de que Jehová y Elohím son diferentes nombres de la misma persona.
Con este concepto politeísta en mente, Joseph Smith dijo: "En el principio el Dios principal convocó un consejo de Dioses; fue así que se reunieron y urdieron un plan para crear el mundo y la gente que lo poblara" (Joseph Smith, Jr., Enseñanzas del Profeta Joseph Smith). Brigham Young afirmó: "Cuántos dioses existen, no lo sé" (Registro de Discursos).
El politeísmo es una de las herejías más serias del mormonismo. La religión judeo-cristiana está edificada sobre el fundamento de un solo Dios verdadero. La Biblia insiste con firmeza que Dios es uno. Jeremías 10.10,11 afirma: "Mas Jehová es el Dios verdadero; él es Dios vivo y Rey eterno; a su ira tiembla la tierra, y las naciones no pueden sufrir su indignación. Les diréis así: Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparezcan de la tierra y de debajo de los cielos".
También Isaías pronunció las palabras de Dios, al decir: "Para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí" (Isaías 43.10). Jesús afirma en Marcos 12.29: "El Señor nuestro Dios, el Señor uno es". Si Dios hubiese querido hacer más evidente la verdad de que El es uno, es difícil imaginar qué otras palabras pudo haber agregado.
Los mormones enseñan que Dios tiene un cuerpo físico. En Doctrina y Pactos 130.22 se dice que: "El Padre tiene un cuerpo de carne y hueso tan tangible como el del hombre; también el Hijo; pero el Espíritu Santo no tiene cuerpo de carne y hueso, sino que es un personaje de espíritu". Los mormones enseñan que la humanidad fue creada a imagen física de Dios. En el libro de Moisés 6.9, una sección de Perla de Gran Precio, se lee: "A imagen de su propio cuerpo, macho y hembra, los creó".
El antiguo apóstol mormón Parley P. Pratt escribió: "Cada uno de estos Dioses, incluyendo a Jesucristo y a su Padre, poseedores no sólo de un espíritu organizado, sino también de un glorioso cuerpo inmortal de carne y hueso" (Clave de la Ciencia de la Teología).
Pratt va más allá al indicar que un dios invisible sería menos poderoso que los ídolos paganos. "Nunca ha habido un ídolo visible adorado por los hombres que fuera tan impotente como lo es éste 'Dios sin cuerpo, partes o pasiones'. El dios de Egipto, el cocodrilo, podía destruir. Las imágenes de muchas naciones podían sentirse y verse. El dios peruano, el sol, podía difundir su suave calor, luz e influencia. Pero no es así con el Dios que carece de 'cuerpo, partes, o pasiones'. Lo que no tiene partes no tiene el todo. Los seres que no tienen pasiones no tienen alma".
La Biblia enseña que Dios no tiene un cuerpo físico. En 1 Juan 4.12 dice la Biblia: "Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros". Sería algo difícil para una deidad de carne y hueso morar dentro de cada creyente. Jeremías también anota: "¿Soy yo Dios de cerca solamente, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? ¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y la tierra?" (Jeremías 23.23,24).
Aquí revela Jeremías que Dios es Omnipotente (en todas partes al mismo tiempo), lo que sería una imposibilidad para un dios de carne. Pablo escribió que Cristo "es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación" (Colosenses 1.15). Es absurdo que un dios de carne parezca humano y a la vez sea invisible.
De nuevo, Juan 4.24 dice que "Dios es Espíritu". En Lucas 24.39 la Biblia dice que "un espíritu no tiene carne ni huesos". Veamos esto lógicamente: (1)Ya que Dios es Espíritu, y (2) Un espíritu no tiene carne ni huesos, luego (3) Dios no tiene carne ni huesos.
La doctrina de que Dios tiene un cuerpo físico es falsa, y con ella los mormones repitieron el error de los antiguos paganos que rechazaron a Dios completamente. A esos idólatras se les describe en Romanos 1.22-23: "Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria de Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible".
Los mormones enseñan que Dios es evolutivo. Los mormones enseñan que Dios ha avanzado, desde una condición de ser humano a su estado presente. El antiguo apóstol mormón, Orson Hyde, dijo: "Recuérdese que Dios, nuestro Padre celestial, quizá fue alguna vez niño, y mortal como nosotros mismos, y avanzó paso a paso en la escala del progreso, en la escuela del avance; ha ido hacia adelante y ha triunfado, hasta haber llegado al punto en que ahora se encuentra" (Registro de Discursos). Más aun, según Joseph Smith en el Registro de Discursos: "Dios mismo está creciendo y progresando en conocimiento, poder, y dominio, y seguirá haciéndolo eternamente" (vol. 6, p. 126).
Si fuera cierto que Dios evolucionó de un simple ser humano a un ser divino, entonces otras personas también podrían progresar hacia la divinidad. Y eso es lo que enseñan los mormones, precisamente. De hecho llevan la teoría a su conclusión lógica de una jerarquía de dioses en diferentes niveles de desarrollo.
Bruce McConkie escribió: "Por lo tanto, si Jesús tuvo un padre, ¿no podemos creer que el padre también tuvo un padre?" Y comenta en el mismo contexto: "Hay un número infinito de personajes santos, derivados de mundos sin fin, que han llegado a la exaltación y por lo tanto son dioses" (Doctrina Mormona).
La Biblia enseña que Dios no es evolutivo. El Salmo 102.27 afirma: "Pero tú eres el mismo, y tus años no se acabarán" . En Malaquías 3.6, la Biblia dice: "Porque yo Jehová no cambió". Aunque la Biblia refuta decididamente la falsa doctrina de la progresión divina, ni siquiera es necesario abrirla para encontrar un argumento incontrovertible contra tal dogma. El mismo Libro de Mormón lo refuta.
En Mormón 9.9,10,19, uno de los libros del Libro del Mormón, se citan dos pasajes del Nuevo Testamento que tratan sobre la condición inmutable de Dios, Hebreos 13.8 y Santiago 1.17. Dice el pasaje en cuestión: "¿Qué no leemos que Dios es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos, y que en él no hay mudanza, ni sombra de variación? Y ahora si les hemos hecho imaginarse un dios que cambia, y en el cual hay sombra de mutación, entonces se han imaginado un dios que no es un Dios de milagros... Les digo que no cambia; de otra manera dejaría de ser Dios".
Moroni 8.18 dice: "Porque yo sé que Dios no es un Dios parcial, tampoco un ser cambiante, sino que es inmutable de eternidad a eternidad". Igualmente, un pasaje en Doctrina y Pactos refuta firmemente el concepto de que Dios es evolutivo y que se ha desarrollado a partir de una condición humana. "Por estas cosas sabemos que hay un Dios en el cielo, el cual es infinito y eterno, de una eternidad a otra el mismo Dios inmutable, el creador del cielo y la tierra ... Les dio mandamientos de que deben amarle y servirle, el único y verdadero Dios vivo" (Joseph Smith, Jr., Doctrina y Pactos).
El mormonismo enseña que Dios procreó físicamente a Jesucristo. Por increíble que parezca, Brigham Young declaró: "Cuando la Virgen María concibió al niño Jesús, el Padre lo había procreado a semejanza suya. No fue procreado por el Espíritu Santo. ¿Y quién es el Padre? Es el primero de la familia humana" (Registro de Discursos).
De nuevo asegura: "Cuando se cumplió el tiempo de que su primogénito, el Salvador llegará al mundo y tomará un tabernáculo, el mismo Padre vino y favoreció al espíritu con un tabernáculo en vez de dejar que cualquier otro hombre lo hiciera" (Registro de Discursos).
También esto enseñaba Young: "El nacimiento del Salvador fue tan natural como el de nuestros hijos; fue el resultado de un acto natural. Tomó para sí carne y sangre - fue procreado por su Padre, como nosotros lo somos por nuestros padres" (Registro de Discursos).
Para cualquier cristiano, la idea de que el Mesías fue procreado a través del coito es algo repugnante. La Biblia enseña que Jesús fue concebido milagrosamente, no por un Dios de carne, sino por el Espíritu Santo, período durante el cual María siguió siendo virgen.
Mateo 1.18-23 dice: "El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. José, su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros".
El mormonismo ha llegado a enseñar que Adán es Dios. Esto sin duda es una de las doctrinas más estrafalarias y confusas de todo el sistema doctrinario de los Santos de los Ultimas Días. Así dijo Brigham Young: "Cuando nuestro padre Adán llegó al jardín del Edén, tenía un cuerpo celestial, y trajo consigo a Eva, una de sus esposas. El ayudó a formar y a organizar este mundo. El es Miguel, el Arcángel, el Antiguo de Días, acerca del cual hombres santos han escrito y hablado. El es nuestro padre y nuestro dios, y el único dios que necesitamos. Todo hombre sobre la tierra, los cristianos devotos y los que no lo son, deben oírlo, y lo sabrán tarde o temprano" (Registro de Discursos). El apóstol mormón Orson Pratt es una de las muchas voces del pasado de los mormones que reafirman esta doctrina. El escribió esto: "Toda rodilla se doblará, y toda lengua confesará que él es el Dios de toda la tierra. Entonces las palabras del profeta Brigham, al referirse a Adán, serán plenamente comprendidas - 'El es nuestro padre y nuestro dios, y el único dios que necesitamos' "(Orson Pratt, Estrella Milenaria).
Esa doctrina es hoy en día un bochorno para la iglesia mormona y algunos han llegado a afirmar, en contra de toda la evidencia, que nunca se enseño. El apóstol mormón McConkie ha reconocido que nada menos que Young enseño esa doctrina, y ha declarado falsas sus enseñanzas.
En una carta al Sr. Eugene England, fechada el 19 de febrero de 1981, McConkie escribe: "En ese mismo discurso devocional dije: 'Hay quienes creen o dicen creer que Adán es nuestro padre y nuestro dios, que es el padre de nuestro espíritu y nuestro cuerpo, y que es aquel a quien adoramos'. Yo, por supuesto, señalé lo totalmente absurdo de esa doctrina y dije que era totalmente falsa ... Cultistas ... han comentado los puntos de vista de Brigham Young y otros antiguos hermanos respecto a Adán. Tienen citas claras que dicen estas cosas de Adán, las cuales yo digo que son falsas. Las citas se hallan en nuestra literatura" (Transcripción en manos del Ministerio Utah Lighthouse, Salt Lake City).
McConkie y otros mormones que han delatado la doctrina como falsa, han despertado serias dudas. Supuestamente Brigham Young era un profeta. De hecho, él mismo se declaró como tal, lo cual fue reconocido y aceptado por los millones de seguidores en la iglesia de Utah que lo siguieron fielmente. Young dijo que sus declaraciones eran "tan bíblicas como las que se expresan en esta Biblia, y si desean leer revelaciones lean lo que dice el que conoce la mente de Dios" (Registro de Discursos).
Una de dos, o Brigham Young enseñó doctrina falsa o no lo hizo. O sus doctrinas eran la verdad revelada o no lo eran. Si Young se equivocó respecto a la doctrina de Adán-Dios, ¿cómo pueden saber los mormones si enseñó la verdad en todo lo demás? En pocas palabras, no pueden saberlo. Si Young puede presentar una doctrina como verdadera cuando en realidad es falsa, ¿cómo pueden saber los mormones si Joseph Smith y todos los demás profetas de los Santos de los Ultimos Días no hicieron lo mismo? El mormonismo no puede contestar esas preguntas.
McConkie estuvo en lo correcto al señalar la doctrina de Adán-Dios como falsa. La Biblia enseña explícitamente que no era un ser divino sino un mortal creado por Dios, el cual vivió y murió como todos los humanos. En Génesis 5.5 la Biblia dice: "Y fueron todos los días que vivió Adán novecientos treinta años; y murió".
Dios mismo elimina absolutamente la posibilidad de haber evolucionado de Adán en Malaquías 3.6: "Porque yo Jehová no cambio". En Números 23.19 la teoría Adán-Dios es completamente refutada: "Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta".
- Weldon Langfield
La Voz Eterna, Julio-Agosto 1993 (Vía Gospel Advocate, Agosto 1992)