La parábola de los dos deudores

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Introducción

Mateo 18:23–34 RVR60
23 Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos. 24 Y comenzando a hacer cuentas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos. 25 A éste, como no pudo pagar, ordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tenía, para que se le pagase la deuda. 26 Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor, ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. 27 El señor de aquel siervo, movido a misericordia, le soltó y le perdonó la deuda. 28 Pero saliendo aquel siervo, halló a uno de sus consiervos, que le debía cien denarios; y asiendo de él, le ahogaba, diciendo: Págame lo que me debes. 29 Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. 30 Mas él no quiso, sino fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase la deuda. 31 Viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y fueron y refirieron a su señor todo lo que había pasado. 32 Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste. 33 ¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti? 34 Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía.
El reconocido teólogo C. S. Lewis una vez escribió:
“Todo el mundo dice que el perdón es una idea hermosa, hasta que tienen algo que perdonar”
Estoy seguro que la mayoría de nosotros en algún momento de nuestra vida; hemos EXPERIMENTADO en Carne Propia
La Dificultad de Perdonar, La Verdad es que no siempre es Fácil Perdonar.
Y esto se debe a que la respuesta natural de nuestra Carne ante una Injusticia U Ofensa que se nos ha cometido es es
LA VENGANZA y NO EL PERDÓN.
Como pastor he tenido la oportunidad de aconsejar a muchas familias en momentos de Tensión; y con mucha frecuencia he escuchado la siguiente frase:
ES QUE NO PUEDO PERDONAR, Por mas que Quiero hacerlo, SE ME ES Imposible.
y es Verdad, Por nosotros mismos hay cosas que No somos capaces de Perdonar;
Y esto se Debe a que EL PERDÓN ES ALGO que NO ES natural para la naturaleza humana.
En el mundo hay un dicho muy popular que dice así:
Perdono Pero No Olvido
Es como decir: NUNCA SE ME VA OLVIDAR LO QUE ME HICISTE;
y a la primera oportunidad que tenga de desquitarme la voy a aprovechar.
¿A caso eso es Perdonar? Por su puesto que no
La falta de perdón es un mal muy peligroso;
Hace un años se hizo viral un vídeo que contenía escenas muy tristes,
En las que unas personas derramaban gasolina sobre una mujer joven y le prendían fuego;
Lamentablemente esta mujer murió; pero lo mas trágico de este acontecimiento fue que las INVESTIGACIONES POSTERIORES concluyeron que aquellos que habían perpetuado este crimen tan despiadado; eran familiares de esta mujer; los cuales guardaban resentimiento con ella a causa de la disputa de un terreno.
Es realmente lamentablemente lo que la falta de perdón puede ocasionar en las personas;
Y en este mundo caído y lleno de maldad e injusticia; Abunda el Resentimiento por todas partes:
Padres con rencor a los hijos, Hijos con rencor a los padres, Matrimonios donde HAY RENCOR; Familias Divididas por la Amargura;
y lamentablemente también en las iglesias hay hermanos que no se pueden dirigir la palabra debido a la falta de perdón.
No es extraño que en el mundo abunde el Resentimiento;
Un corazón no regenerado fácilmente albergará rencor y buscará la venganza; Sin embargo; para aquellos que somos creyentes;
Las Cosas Deberían de ser Diferentes;
Al menos así lo enseña la palabra de Dios, y es el punto principal de esta parábola que Jesús relata en Mateo 18.
Contexto:
Pero antes de adentrarnos en esta gloriosa parábola, es necesario que consideremos el contexto para que la podamos entender correctamente.
Por el verso 1, sabemos que Jesús dirige esta parábola a sus discipulos:
Mateo 18:1 (RVR60)
1 En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?
Notemos la inquietud de los discipulos,
Quieren saber quien sería el mas importante de ellos en el reino de los cielos,
Creo que esta pregunta tan inmadura de los discipulos da lugar a todo lo que Jesús les enseñó en este capitulo.
¿Como respondió Jesús a la pregunta tan absurda de sus discipulos?
Lo hace con dos parábolas
La primera es la parábola de la Oveja Perdida, la cual si Dios lo permite estudiaremos después, porque El evangelista Lucas también registra esta parábola junto con otras que comunican la misma verdad, así que las estudiaremos en conjunto,
Pero con esta parábola Jesús les enseña a sus discípulos a no menospreciar a ninguno de sus hermanos, en otras palabras; deben de ser humildes y no no deben de preocuparse por saber quien es el mayor entre ellos.
Pero la respuesta de Jesús no solamente Enfatiza la necesidad de la Humildad en el trato los unos con los otros, Sino que También Jesús les enseña a sus discípulos sobre el perdón.
Y la Humildad y el Perdón son dos Virtudes que no podemos Separar;
Para poder perdonar es necesario tener humildad;
El orgulloso se rehúsa a perdonar,
Como dice (Proverbios 13:10)
“El orgullo solo genera contiendas” NVI
Así que la falta de perdón en las personas pone en evidencia orgullo en su corazón.
en cambio, la humildad es el único camino que puede llevarnos al perdón verdadero.
Estos discipulos debían entender primero la necesidad de ser humildes,
Si lo que había entre ellos era solamente competencia por ver cual de ellos era el mas importante, entonces practicar el perdón entre ellos sería imposible.
Porque todo lo que les importa es sentirse superiores a los demás, y una persona con esa mentalidad arrogante, no ES capaz NI DE PEDIR PERDÓN CUANDO COMETE UNA FALTA NI es capaz DE OTORGAR el PERDÓN CUANDO se le ha ofendido.
es por esta razón que el Salmista declaró en
Salmo 138:6 (RVR60)
6 Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.
El orgullo es un estorbo que Imposibilita el Perdón;
Y es necesario que reconozcamos esto,
A veces no TOMAMOS este tema con la seriedad debida; Porque Sabemos que es un tema que puede ser Delicado,
En este mundo caído es posible que seamos lastimados de maneras muy profundas,
Y por experiencia, creo que todos sabemos que hay cosas que son muy difíciles de perdonar;
Sin embargo, DEBEMOS DE RECORDAR QUE EN CRISTO; hemos sido perdonados de una manera INCOMPARABLE, de acuerdo a la Escritura; Repito; De acuerdo al Evangelio de Cristo;
Los Cristianos somos los que mas debemos de estar dispuestos a Perdonar.
En otras palabras; No existe nada que Un Cristiano no pueda perdonar con la Ayuda de Cristo.
Como también C.S. Lewis famosamente dijo:
“Ser Cristiano significa perdonar lo inexcusable, porque Dios ha perdonado lo inexcusable en Ti”
Esa es la manera en que manifestamos el poder del Espíritu Santo en nuestras vidas;
Hay algunos que piensan que la manifestación del poder del Espíritu Santo es saltar, danzar sin control en el altar, hablar en IDIOMAS DESCONOCIDAS o caer al piso repentinamente entre muchas otras.
Cuando en realidad; Es el fruto del Espíritu lo que manifiesta en nuestras vidas
El verdadero y glorioso poder de Dios obrando en cada uno de nosotros.
Es cuando el cristiano perdona sinceramente que esta reflejando mas a Cristo en su vida;
Y es triste notar, que las virtudes cristianas con frecuencia, son menospreciadas; y esto se debe a varias razones,
Por un lado, a muchos les llama mas la atención lo extraordinario, las experiencias sensacionalistas, es lo que atrae a muchos.
Pero aun mas determinante es el hecho que
Saltar en el altar es mucho mas fácil que perdonar una ofensa.
Danzar es mas sencillo que Vivir con humildad;
En otras palabras, muchos cristianos prefieren remplazar las Verdaderas virtudes Cristianas por experiencias supuestamente espirituales en lugar de sinceramente Vivir manifestando el verdadero poder de Dios en sus vida al vivir vidas piadosas que producen fruto espiritual.
Que esos no seamos nosotros hermanos,
No pensemos que por venir a la iglesia, tener una biblia, conocer un poco de teología, entre otras tantas cosas, Somos espirituales mientras al mismo tiempo albergamos rencor y resentimiento en nuestros corazones, andamos en chismes y murmuraciones, somos orgullos y no hay ninguna señal de verdadero fruto espiritual en nuestras vidas.
Creo que uno de los pasajes mas Contundentes de esta verdad es:
Efesios 4:17–32 (RVR60)
17 Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente,
18 teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón;
19 los cuales, después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza.
20 Mas vosotros no habéis aprendido así a Cristo,
21 si en verdad le habéis oído, y habéis sido por él enseñados, conforme a la verdad que está en Jesús.
22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,
23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.
26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo,
27 ni deis lugar al diablo.
28 El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad.
29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.
30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.
31 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia.
32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Recuerdemos las palabras de Jesús:
“Por sus frutos los conoceréis”
Bueno, en esta ocasión nos referimos a un fruto muy especifico; Llamado la humildad que produce Perdón.
Esta es una verdad muy simple y claramente revelada en la Escritura, pero a veces podemos complicar aun las verdades mas sencillas;
Así lo hacían los eruditos judíos, los cuales sabían que el perdón era un practica que Dios les había estipulado:
Sin embargo, sus enseñanzas con respecto al perdón reflejaban lo poco que lo entendían;
El Talmud de Babilonia (que es la compilación de las tradiciones judías):
dice:
“Cuando un hombre peca contra otro, le perdonará una vez, le perdonará dos veces, le perdonará tres veces, pero la cuarta vez no le perdonará
Muy probablemente los discipulos estaban familiarizados con esta enseñanza;
Y cuando el apóstol Pedro escuchó a Jesús hablando no menospreciar a los hermanos y luego en los versos 15-20 Jesús les enseñó la manera correcta en la que debemos de confrontar a un hermano que nos ha ofendido;
En el verso 21 el apostol Pedro le hace la siguiente pregunta Jesús:
Mateo 18:21 (RVR60)
21 Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete?
Pedro parece ser un poco mas generoso que los eruditos de aquellos días;
y no sugirió que debemos perdonar hasta 3 veces de acuerdo a las creencias de aquellos días;
sino que fue un poco mas generoso, quizás pensó pues nosotros como somos seguidores de Cristo debemos de soportar un poco mas: Hasta 7 Veces puede ser un buen numero.
Ahora el contexto en el que surge esta pregunta es clave; y cito al comentarista David Burt para ayudarnos a no olvidar el contexto:
Mateo, Tomos I–V (La pregunta de Pedro (18:21))
La enseñanza de 18:15–20 acerca de la disciplina eclesial puede parecernos dura y difícil. Sin embargo, Pedro captó que Jesús no estaba fomentando actitudes justicieras de venganza, sino estableciendo medidas positivas de búsqueda y salvación. No estaba cortando cabezas, sino creando procedimientos de perdón y restauración. Esto despertó una duda en la mente del apóstol: “Bien, Señor, tú has indicado que, si veo a mi hermano en pecado, debo ir detrás de él con espíritu reconciliador y perdonador para hacerlo recapacitar. Pero supongamos que lo restauremos, pero que después vuelve a caer en pecado, una y otra vez. ¿Hasta cuándo tenemos que repetir este proceso de búsqueda y perdón? Y si yo mismo soy la parte ofendida, si el hermano ha pecado contra mí, ¿cuántas veces debo perdonarlo? ¿Cuántas veces debo buscar su restauración?”
Así que Pedro entendió que cuando Jesús les enseñó sobre la disciplina en la iglesia, el objetivo siempre es buscar el arrepentimiento del ofensor y el perdón de la parte ofendida;
Esto por su puesto Suena muy Lindo;
Pero la pregunta de Pedro es muy Necesaria; Y lo digo de esta manera porque me identifico mucho con la Intriga de Pedro;
¿Cual es limite de veces que debo de perdonar a un hermano? Porque seguramente debe de haber un Limite;
Pedro parece sugerir que 7 veces es ese limite, y si verdaderamente consideramos bien el tema; 7 veces suena bastante generoso.
Si ya perdonar una vez no es Fácil; ahora 7 veces,
Dile a alguien que ha sido lastimado injustamente que debe de estar dispuesto a perdonar 7 veces;
Hay heridas muy profundas y traiciones muy doloras que no son FÁCILES DE SOBRELLEVAR;
Sin embargo, Es necesario que como Cristianos comprendamos lo que la Escritura nos enseña sobre el Perdón; Y les anticipo que no va a ser fácil;
Para muchos estas ideas les van a parecer muy Radicales y Extremistas; Eso ya no me sorprende; La Verdad es que los principios que se encuentran en la Palabra de Dios son tan Elevados que no debe de asombrarnos que algunos se escandalizen al escucharlos.
Y aparte de esto; Creo que por mucho tiempo; el cristianismo a sido FUERTEMENTE influenciado por ideas que no surgen de la Escritura sino de la Psicología;
La iglesia le abrió la puerta aun enemigo muy sutil llamado Piscología y ¿Cuanto daño a causado esto?
Esto a traído como consecuencia que en la iglesia de Cristo abunde un sentir de Victimismo, donde todos se encierran en su Ofensa y Dolor;
Y lamentablemente es triste decir Pero como consecuencia esto a resultado en que:
El Cristiano ya no sabe perdonar; Nos cuesta mucho hacerlo por lo menos una vez;
y todo se debe a que Perdemos de Vista el Evangelio de Cristo; NO HAY OTRA EXPLICACIÓN
La Psicóloga te dice que no quites tu mirada de la OFENSA y que debes tomar tiempo para sanar y encontrar paz;
El evangelio de Cristo te dice que quites tu mirada de ti y la pongas en Cristo;
Asi que amados hermanos; la pregunta del millón es:
“¿cuántas veces deberé perdonar a mi hermano, si me hace algo malo?” LBLA
La respuesta de Jesús; es la parábola de los dos deudores;
Dios nos ayude a que la palabra de Dios de forma a la manera que debemos de entender y practicar el PERDÓN cada día.
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