Versiculos de corintios e inmoralidad sexual
Inmoralidad sexual a traves de la historia de la biblia
Contexto historico
LA PERSONA INCESTUOSA DE CORINTO EXPUESTA; LOS CORINTIOS SON REPROCHADOS POR SU CONNIVENCIA, Y AMONESTADOS PARA QUE LIMPIEN LA MALA LEVADURA. EXPLICACION DE LA ORDEN ANTERIOR EN CUANTO AL CONTACTO CON LOS PECADORES DEL MUNDO
Ella era acaso pagana, razón por la cual no se dirige el reproche contra ella (véase vv. 12, 13). Alford piensa que la expresión “tenga”, significa el tenerla en casamiento: pero a esta relación ilícita se le llama “fornicación,” y ni la ley cristiana ni la gentil hubiera consentido en tal matrimonio, aun cuando la corrupción de Corinto podía haber disimulado el concubinato
El rumor había llegado a Pablo de que alguno tenía la mujer de su padre. La palabra “fornicación” (v. 1a) indica cualquier clase de desviación en el campo sexual. Antes de explicar a qué se refiere, el apóstol señala que es algo extremadamente grave, porque “ni aun se nombra entre los gentiles”. Hay que tomar con limitaciones la idea de que tal aberración no era mencionada en los círculos mundanos, pues por cierto no era el caso. Inclusive en Dt. 22:30 aparece indicado como indiscutible pecado, así como se lo puede encontrar en los códigos civiles. Sin embargo, es cierto que ese tipo de relaciones no se admite prácticamente en ninguna sociedad civilizada. Pablo tenía conciencia de que la iglesia estaba siendo vista como el ámbito donde se toleraban prácticas que los paganos no aceptarían en su medio, y eso era inadmisible.
El apóstol levanta un poco el velo sobre el hecho, porque era público y porque los lectores sabían de qué estaba hablando. Lo que ocurría era que “alguno tiene la mujer de su padre”. La idea más común es que un hombre estaba haciendo vida conyugal con su madrastra. Asimismo, aunque no es lo más probable, debemos reconocer que la discreción al usar el término “tiene” da cabida a algunas otras posibilidades de abuso de la vida sexual.
Pablo no se detiene a explicar por qué está mal lo que hacía aquel hombre. Le preocupa la actitud de la iglesia. La permisividad es un problema típico de nuestro tiempo, así como lo era de las sociedades paganas—que no tenían códigos morales basados en su religión, ya que sus mismos dioses eran ejemplo de toda clase de aberraciones.
La falla de la iglesia en Corinto era múltiple. En sentido práctico, no habían tomado medida alguna y es de suponer que el ofensor seguía participando de la vida congregacional con toda libertad. Quizá se levantaba a orar o a testificar, y eso hacía que algunos se escandalizaran y otros se pavonearan orgullosos ante la impunidad de un miembro de su grupo. ¿Habrá sido una persona de “importancia” por su dinero o su prestigio social? Da la impresión de que algo estaba deteniendo una sanción inescapable.
Una segunda falta era que se envanecían. Tal vez no fuera la actitud de todos. Pero ¿acaso hay circunstancias en las que una iglesia se jacta de ser tolerante, misericordiosa, dispuesta a una segunda oportunidad? El problema aún sigue en pie.
Finalmente, parecía que los corintios no se lamentaban, como si fuera cosa ajena a la pureza y al testimonio de la iglesia. Pablo esperaba que, si había algo que les acobardaba como para actuar con la necesaria energía, por lo menos estuvieran dolidos y avergonzados. Pero ocurría lo contrario.
Otras citas biblicas acerca del pecado sexual.
Cualquier transgresión de los límites que Dios ha establecido para disfrutar del sexo. Estos pecados son a menudo muy dominantes en la vida, pero pueden ser quebrantados por el poder y la gracia de Jesucristo