Los sufrimientos de nuestro Señor
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Introducción
Introducción
Somos profundamente asombrados cuando leemos acerca de los sufrimientos de Cristo. Se nos pone la piel de gallina al contemplar la crueldad del castigo romano y del corazón endurecido de los judíos al entregar a Jesús a su muerte a manos de los romanos.
Es necesario que contemplemos los eventos históricos que rodearon el sufrimiento y la muerte de nuestro Señor Jesucristo. Es necesario que profundicemos en ellos y los entendamos mejor. Pero de nada sirve todo este cumulo de información si no se conecta de alguna manera con nuestras vidas diarias. Si no podemos responder a la pregunta: ¿Cómo se relaciona el sacrificio de nuestro Señor con mi vida diaria? ¿Como afectan los sufrimientos de Cristo mis decisiones, mis hábitos, mi carácter?¿Cómo mi relación con el pecado es afectada a medida que me sumerjo en una comprensión cada vez mas profunda de los sufrimientos de mi Señor y Salvador Jesucristo?
El evento cúspide, el clímax de la historia de redención es presentado por los sufrimientos de Cristo en su camino a ser crucificado. Es lo que mas tiende a llamar nuestra atención. De hecho se han hecho innumerables películas, dramas, representaciones, etc que muestran estas escenas desde diferentes perspectivas. Pero la pregunta más importante y de mayor impacto para nosotros debe ser:
¿Qué fue lo que llevó a Jesús, el Hijo de Dios, a estar dispuesto a padecer tan profundo sufrimiento voluntariamente?
¿Qué es lo que esta de fondo en la sangrienta escena del Hijo de Dios enfrentando la maldad de los hombre ejecutando un horrendo castigo a quien no lo merece?
Si miramos atentamente los hechos que rodearon el drama de la Redención de nuestro Señor, y contemplamos con atención y detenimiento la escena de dolor y sus padecimientos como Hombre, podríamos tener aunque sea un ápice de entendimiento de cuán profundo y horrendo es nuestro pecado contra un Dios que es tres veces Santo.
Y este conocimiento no se quedaría en un entendimiento teológico mental, sino que afectaría profundamente nuestra perspectiva de nuestra vida en la tierra.
Nuestro Señor Jesucristo se entregó de manera VOLUNTARIA - debemos entender cuánto significó para Cristo dejar su trono y venir a este mundo como Hombre si queremos valorar su obra como merece ser valorada. A medida que conocemos la grandeza de Su Carácter, se hace más real y somos más conscientes de la profundidad de nuestro pecado, y esto nos permite asimilar el gran precio que pagó nuestro Señor Jesucristo para lograr unir el infinito abismo entre El Dios Santo y la humanidad pecadora.
El punto y la idea central que el apóstol Pablo nos quiere hacer entender en este pasaje de Filipenses es que la comprensión de lo que Cristo ha realizado debe afectar de manera directa y permanente toda nuestra manera de vivir, entiéndase, nuestros pensamientos, hábitos, acciones, decisiones y carácter.
Flp. 2.5-11 - Cristo se humilló a sí mismo y se hizo obediente a la voluntad del Padre hasta las ultimas consecuencias, la muerte.
Supremacía del Señor Jesucristo - Siendo en forma de o igual a Dios - de la misma naturaleza de Dios, del mismo valor que Dios
Decidió no aferrarse a su condición de ser Dios.
Jn. 1.1 nos dice que El Verbo era Dios, a pesar de ser Dios mismo, El decide hacer entrada en el mundo caído.
El Santo entra en la corrupción,
El Justo se acerca a lo injusto.
El Perfecto interacciona con lo imperfecto
El Eterno irrumpe en el tiempo y espacio
El Infinito adquiere una naturaleza finita
Se despojó - se vació de sí mismo tomando forma (naturaleza) de siervo (esclavo) - la condición de esclavo es una de sujeción voluntaria donde su sustento y propósito están enteramente sometidos a la voluntad de su amo.
se hizo semejante a los hombres
se humilló
se hizo obediente
Jn. 10.18 - su entrega fue enteramente voluntaria en obediencia al mandamiento del Padre
Heb. 10.5-10
La frase “Me preparaste cuerpo” es tomada del Salmo 40.6 , donde en nuestra traducción dice “Me has abierto los oídos”, pero en el hebreo debe ser traducido como “horadaste mis orejas”. Esto hace referencia a las instrucciones y leyes sobre la esclavitud en Exodo 21.5-6 donde el siervo luego de 6 años de servicio a su señor decidía servir a su amo voluntariamente por amor, el amo debía horadar sus orejas con un objeto punzante, y con este acto doloroso el esclavo serviría a su amo para siempre.