Edificando el Tabernaculo del Señor

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Introducción

Esta mañana vamos a considerar el capitulo 31 de Exodo.
Estas son las últimas instrucciones que Moises recibió de Jehová en su monte santo. Ya hemos visto como Dios luego del primer servicio de adoración le entrega a Moises la aplicaciones su ley al pueblo para que ellos aprendan a vivir para su gloria ahora que son el pueblo redimido de Dios, luego le instruye para construir un tabernáculo según el modelo del tabernáculo celestial, este tabernáculo seré el lugar de encuentro de Dios con su pueblo, será la morada de Dios en medio de Israel, por esta razón Dios se ocupa de cada detalle de su casa.
Cada detalle como hemos visto señala a Israel el camino que Dios ha trazado para hacer de ellos un pueblo santo que viva en comunión con él, cada detalle es sobra y figura de Cristo quien será el tabernáculo de Dios con los hombres y cada detalle es además una sombra de la relación de amor eterna que tendrá en gloria Cristo y su Iglesia.
De manera que cada detalle del tabernáculo tiene que ver con el pacto de amor de Dios con su pueblo. Por esta razón cada detalle del tabernáculo es revelado por Dios. Pero además veremos hoy, que Dios no solo se ocupa de dar instrucciones, Él será también el artífice de la obra en la persona del Espíritu Santo.
Dios tiene control completo de la obra del tabernáculo, para que no quede si sombra de duda a Israel que Dios es el, el diseñador, el arquitecto, el director y constructor de esta obra.
Dios les había redimido, les trajo al monte para tener comunión con ellos, les extendió su misericordia al recibirles en una alianza de amor incondicional y les trazo un camino para acercarse a él hasta el cumplimiento de los tiempos en Cristo, de manera que ellos fueran su pueblo y el fuera su Dios. Todo hasta aquí es obra de Dios.
Veremos esta mañana en nuestro texto, como Dios es quien edificó el tabernáculo del A.T. y es quien levanto y esta edificando el segundo y mas glorioso tabernáculo el día de hoy.
Éxodo 31:1–11 NBLA
El Señor habló además a Moisés diciendo: «Mira, he llamado por nombre a Bezalel, hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá. »Y lo he llenado del Espíritu de Dios en sabiduría, en inteligencia, en conocimiento y en toda clase de arte, para elaborar diseños, para trabajar en oro, en plata y en bronce, y en el labrado de piedras para engaste, y en el tallado de madera, a fin de que trabaje en toda clase de labor. »Mira, Yo mismo he nombrado con él a Aholiab, hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan. En el corazón de todos los que son hábiles he puesto habilidad a fin de que hagan todo lo que te he mandado: la tienda de reunión, el arca del testimonio, el propiciatorio sobre ella y todo el mobiliario del tabernáculo; también la mesa y sus utensilios, el candelabro de oro puro con todos sus utensilios y el altar del incienso; el altar del holocausto también con todos sus utensilios y la pila con su base; asimismo las vestiduras tejidas, las vestiduras sagradas para el sacerdote Aarón y las vestiduras de sus hijos, para ministrar como sacerdotes; también el aceite de la unción, y el incienso aromático para el lugar santo. Los harán conforme a todo lo que te he mandado»
Nuestro pasaje comienza con el Señor diciéndole a Moisés que ha llamado a Bezalel (a la sombra de Dios) para servir en la construcción de su tabernáculo, él deberá trabajar junto a Aholiab (Dios es mi tienda) y a otros hombres para este trabajo. Todos ellos eran hábiles para las artes.
Hermanos, Dios es la fuente de las habilidades artísticas naturales de todos los hombres. De hecho nuestra creatividad es una de las formas en que reflejamos la imagen De Dios. Creyentes e incrédulos pueden hacer buen arte:
Recordemos a los hijos de Caín:
Génesis 4:21–22 NBLA
Su hermano se llamaba Jubal, el cual fue padre de todos los que tocan la lira y la flauta. Zila a su vez dio a luz a Tubal Caín, forjador de todo utensilio de bronce y de hierro. Y la hermana de Tubal Caín era Naama.
Aunque Dios le ha dado talentos naturales al los hombres para hacer bien arte. Todo lo que producimos después de Adan se ha visto afectado por la caída del hombre en pecado, pero aun así los seres humanos pueden producir cosas buenas y hermosas. Dios es la fuente de toda habilidad artística.
Pero las habilidades artísticas de las personas llamadas por Dios para esta tarea no eran suficiente. Estos hábiles artífices tenían que ser llenos del Espíritu Santo para que sus habilidades pudieran ser perfeccionadas para este proyecto especial. Sus habilidades serían guiadas para hacer solo lo que Dios le había ordenado a Moisés. Dios los doto:
Sabiduría, que es el don de comprender lo que se necesita para cumplir las instrucciones del Señor
Inteligencia, el talento para resolver problemas inevitables que implicaba la creación de una serie objetos y materiales complejos;
Conocimiento en toda clase de arte, es la destreza, la mano experimentada que se necesita para hacer el trabajo.
Dios se asegura de guiar a estos hombres para que el producto final sea de su agrado.
No se si usted se ha imaginado un diseño y lo ha mandado a hacer, pasa mucho que el resultado final casi que no siempre cumple con las expectativas que teníamos en mente, dependemos mucho de los que elaboran el diseño y siempre quedamos inconformes por algo. El tabernáculo será del completo agrado de Dios, porque los hombres que él emplea serán guiados, inspirados, sostenidos por él, serán instrumentos en menos del arquitecto.
Algo importante de resaltar aquí es que no solo los levitas servirían en el tabernáculo, todo Israel participaría de esta obra, todo Israel fue movido por el Espíritu de Dios para dar voluntariamente para la obra y para poner sus dones al servicio del tabernáculo. Todos pudieron expresar su deseo de que la casa de Dios fuera levantada parea tener comunión con el Dios que les había redimido. Todos trabajaron.
Hay algunos detalle importantes en la elección de los hombres que Dios escogió llenar con con su Santo Espíritu como artesanos para edificar, en su orden tenemos que:
El jefe de los constructores era de la tribu de Judá (Honra)
El segundo al mando era de la pequeña tribu de Dan (Viles)
y el resto de los trabajadores procedían de todas las tribus.
Judá es un patriarca importante en la historia, Jacob profetizó esto de su hijo:
Génesis 49:10 NBLA
»El cetro no se apartará de Judá, Ni la vara de gobernante de entre sus pies, Hasta que venga Siloh, Y a él sea dada la obediencia de los pueblos.
Dios preservó esta tribu providencialmente, de esta tribu salió el rey David a quien Dios prometio que le haría una casa para afirmar su reino para siempre. La promesa de Dios a David se cumplió en Jesucristo, quien era descendiente de David, Jesus es quien vino a edificar casa a David. Este texto esta dándonos una pista de la familia de quien vendría el verdadero constructor del tabernáculo de Dios “la iglesia”.
Efesios 2:10 NBLA
Porque somos hechura Suya, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas.
Amados, somos un poema, una obra de arte del Señor, una obra de arte preparada de antemano por el Padre y guiada todo el tiempo por el E.S.- El Dios trino esta completamente involucrado en nuetra salvación. Así como lo estuvo en su obre de creación:
Es el Padre quien diseño todo para su gloria, todo lo que el Padre hizo lo hizo por el poder su palabra, el verbo de vida es el gran constructor, el que lleva a cavo las obras de Dios y lo hace por el el E.S.
Génesis 1:2 NBLA
La tierra estaba sin orden y vacía, y las tinieblas cubrían la superficie del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas.
De manera que Dios realizó su obra creadora por su Palabra y a través de su Santo Espíritu, Dios en la creación entro en pacto con Adan y lo puso en un monte “El jardín de Edén” que sería una sombra, Adán estaba siendo invitado a una comunión gloriosa en la presencia de Dios que anticipo el huerto.
De ma misma forma que Dios creo y puso un Jardín para tener comunión con el hombre. Dios estaba aquí en Exodo haciendo nuevas todas las cosas, estaba llevando a cavo una obra de recreación, él mismo estaba edificando un lugar donde Israel tendría la esperanza que perdió a Adan por su pecado. Ahora nosotros de este lado de la historia, tenemos la perfecta realización de los propósitos de Dios en Cristo. Somos la morada de Dios en Cristo, estamos siendo edificados por el Señor.
Efesios 2:19–22 NBLA
Así pues, ustedes ya no son extraños ni extranjeros, sino que son conciudadanos de los santos y son de la familia de Dios. Están edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular, en quien todo el edificio, bien ajustado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor. En Cristo también ustedes son juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.
Bezalel era una sombra de aquel que desde su nacimiento fue lleno del E.S. para hacer la gran obra de Dios, salvar un pueblo para si, un pueblo celoso de buenas obras. Fue el E.S. quien engendró al hijo de David en el vientre de María, fue por el Espíritu que Jesus hizo su ministerio publico, como dice:
Hebreos 9:14 NBLA
¿cuánto más la sangre de Cristo, quien por el Espíritu eterno Él mismo se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de obras muertas para servir al Dios vivo?
Romanos 8:11 NBLA
Pero si el Espíritu de Aquel que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en ustedes, el mismo que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de Su Espíritu que habita en ustedes.
Ahora nuestro Señor por el Espíritu sigue edificando su casa, de la cual El mismo es piedra angular.
Juan 14:26 NBLA
»Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en Mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he dicho.
Como Aholiab, los Apóstoles fueron capacitados, llenos del Espíritu de Dios para no olvidar la enseñanza de Cristo, por la palabra de ellos que son el fundamento de la iglesia, nosotros hoy estamos siendo edificados - la palabra de los apóstoles es palabra de Dios - la Biblia que tenemos es una obra de arte, escrita por hombres inspirados, guiados por el Espíritu - el resultado final es que ella toda es “Palabra de Dios” .
Y como los demás colaboradores de Bezalel y Aholiab, toda la iglesia ha sido llena del Espíritu de Dios para la obra del ministerio, para edificación del cuerpo de Cristo, para la obra del nuevo tabernáculo edificado sobre piedras vivas, que dio paso al primero que Dios edifico como sombra de las cosas celestiales.
La aplicación principal de nuestro texto, no tiene nada que ver con el lugar de los artistas en el ministerio de la iglesia del A.T. y N.T. Amados, el tabernáculo es una sombra de las cosas celestiales, es un lugar de comunión entre Dios y su pueblo, representaba esta la relación pactual de Cristo y su pueblo, una relación que es posible por su vida de perfecta obediencia, su muerte, su resurrección y ascensión. Todo esto representado en las cosas que se harían en el tabernáculo.
De manera que este texto fue escrito para nosotros, para recordarnos que Dios fue quien diseño nuestra redención, y también es quien la lleva a cavo, él es el autor.... pero también este pasaje esta escrito para recordarnos el papel del E.S. en nuestra redención. El por su poder que obre en Cristo que hoy podemos tener redención y es por su obra en nosotros que la redención que Cristo logró nos ha sido aplicada y que ademas es por su obra en la iglesia que podemos ser edificados por el Señor.
Gracias al Espiritu hoy ustedes pueden recibir la palabra de Dios de sus pastores
Efesios 4:11–12 NBLA
Y Él dio a algunos el ser apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a otros pastores y maestros, a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo;
Gracias al E.S. tenemos ancianos y diáconos que nos gobiernan y nos sirven para crecer en semejanza a Cristo. Pero además gracias a la obra del E.S. todos ustedes han sido llenos para usar sus dones para el avance del reino y la edificación del cuerpo de Cristo- Heramnos, El cuerpo de Cristo no tiene partes innecesarias.
Nuestros cuerpos físicos pueden funcionar perfectamente sin apéndice, amígdalas o vesícula biliar, pero el cuerpo de Cristo necesita todas sus partes.
1 Corintios 12:7 NBLA
Pero a cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien común.
El E.S. ha dado a cada uno un don necesario para la edificación de esta iglesia, la lista de dondes de Pablo no es exaustiva, es solo un ejemplo para su tiempo de como Dios equipo un par de iglesias:
Romanos 12:3–12 NBLA
Porque en virtud de la gracia que me ha sido dada, digo a cada uno de ustedes que no piense de sí mismo más de lo que debe pensar, sino que piense con buen juicio, según la medida de fe que Dios ha distribuido a cada uno. Pues así como en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros. Pero teniendo diferentes dones, según la gracia que nos ha sido dada, usémoslos: si el de profecía, úsese en proporción a la fe; si el de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que da, con liberalidad; el que dirige, con diligencia; el que muestra misericordia, con alegría. El amor sea sin hipocresía; aborreciendo lo malo, aplicándose a lo bueno. Sean afectuosos unos con otros con amor fraternal; con honra, dándose preferencia unos a otros. No sean perezosos en lo que requiere diligencia. Sean fervientes en espíritu, sirviendo al Señor, gozándose en la esperanza, perseverando en el sufrimiento, dedicados a la oración,
1 Corintios 12:4–11 NBLA
Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos. Pero a cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien común. Pues a uno le es dada palabra de sabiduría por el Espíritu; a otro, palabra de conocimiento según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; a otro, dones de sanidad por el único Espíritu; a otro, poder de milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversas clases de lenguas, y a otro, interpretación de lenguas. Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, distribuyendo individualmente a cada uno según Su voluntad.
Algunos de los dones mencionados en estas listas eran exclusivos de la era apostólica porque consistían en dar o autenticar la nueva revelación de Dios. Esto incluiría los dones de profecía, sanidad, milagros y lenguas.
Los otros dones en estas listas continúan estando en operación en la iglesia hoy, e incluyen cosas tales como
Palabra de sabiduría (v. 8a) - probablemente la capacidad de resolver problemas espirituales difíciles;
Palabra de conocimiento (v. 8b) - la comprensión de asuntos doctrinales;
Fe (v. 9a): una que puede mover montañas;
Discernimiento (v. 10c) - la capacidad de discernir el bien espiritual del mal
Servicio
Enseñanza (v. 7b): enseñar a otros la Palabra de Dios, ya sea mujeres enseñando a niños, padres enseñando a sus familias o ancianos enseñando a la iglesia;
Exhortación (v. 8a) - es un regalo donde uno anima a otros a obedecer la voluntad revelada de Dios;
Dar (v. 8b) - dando financieramente a la iglesia;
Liderazgo (v. 8c): que se refiere específicamente a la capacidad de liderar a otros, que se puede dar tanto a hombres como a mujeres, aunque solo los hombres ejercen este don sobre la iglesia;
Actos de misericordia (v. 8d): mostrar misericordia a los demás puede adoptar varias formas.
Estos dones no fueron dispensados universalmente, sino que fueron dados soberanamente por el Espíritu Santo a los individuos que él eligió.
Estos dones no sirven para la auto-promoción sino para el servicio de os demás:
1 Corintios 12:7 NBLA
Pero a cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien común.
Eso significa que cuando venimos a la iglesia, no venimos simplemente para ser espectadores o para ser servidos.
Debemos usar los dones del Espíritu para la edificación mutua del cuerpo de Cristo, pero debemos hacerlo con amor. Sin amor, el uso de nuestros dones espirituales es una pérdida de tiempo y energía: 1 Cor. 12:28 - 13: 8.
Nuestros dones están destinados a ser usados para edificar el cuerpo de Cristo.
¿Cómo los estás usando para ese fin? Busque formas de usar sus dones, sus habilidades, su tiempo y su recursos, para ayudar al cuerpo de Cristo a crecer.
¿De qué maneras puedes ayudar y animar a tus hermanos en la fe?
¿De qué maneras puedes tratar de traer a otros al cuerpo de Cristo?
¿De qué maneras puedes apoyar el trabajo de la iglesia?
El Señor te ha puesto en esta congregación no solo por tu propio bien, sino también por el bien de tus hermanos en la fe. No te guardes tus dones para ti. Utilizarlos para buscar el bienestar del cuerpo.

CONCLUSION

El tabernáculo de Israel fue una edificación gloriosa, y más la construcción del templo con Salomón. Pero la gloria de la iglesia que Cristo esta edificando palidece al lado de estas construcciones.
Hageo 2:5–9 NBLA
Conforme a la promesa que les hice cuando salieron de Egipto, Mi Espíritu permanece en medio de ustedes; no teman” »Porque así dice el Señor de los ejércitos: “Una vez más, dentro de poco, Yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra firme. ‘Y haré temblar a todas las naciones; vendrán entonces los tesoros de todas las naciones, y Yo llenaré de gloria esta casa,’ dice el Señor de los ejércitos. “Mía es la plata y Mío es el oro”, declara el Señor de los ejércitos. “La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera”, dice el Señor de los ejércitos, “y en este lugar daré paz”, declara el Señor de los ejércitos».
La iglesia es la casa de se está hablando en esa profecía. La gloria de la iglesia es mayor, por la gloria de aquel que la habita “El S.E. de Dios”
Al leer la narrativa de la investidura de Oholiab y Bezalel, nuestras mentes deberían pensar en la morada final de Dios, la iglesia, fundada sobre los apóstoles y profetas, con Cristo como piedra angular.
Debemos alegrarnos de que Dios nos haya dado los dones del Espíritu Santo para llevar a cabo la construcción de la iglesia. Por lo tanto, debemos venir a la iglesia con el deseo de servir y edificar el cuerpo de Cristo. Debemos recordar usar nuestros dones con humildad, ya que todos nos necesitamos unos a otros. Y, debemos ejercer nuestros dones en amor para la gloria de nuestro Señor trino.
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