Pueblo obstinado, DIos clemente

Pueblo obstinado, Dios clemente. Oseas 11:1-12 Introducción: En Oseas vemos un ejemplo del amor que Dios tiene para con su pueblo. Y ese ejemplo sigue vigente hasta el día de hoy. Dios le hace una extraña petición a Oseas; le pide a Oseas que se case con una mujer fornicaria, "Me dijo otra vez Jehová: Ve, ama a una mujer amada de su compañero, aunque adúltera, como el amor de Jehová para con los hijos de Israel, los cuales miran a dioses ajenos, y aman tortas de pasas." (Oseas 3:1, RVR60) Esta petición de Dios para Oseas es para demostrarle al pueblo lo que Él ha hecho por ellos, y como ellos han respondido para con Dios. La historia de Oseas es muy interesante. Dios le quiere dar un ejemplo a su pueblo, un ejemplo de su amor para con Israel, pero quiere que Israel se dé cuenta de cómo ha correspondido a ese amor que Dios les da. Entonces le dice a Oseas que se case con una mujer "amada por su compañero, aunque adultera" Que extraño que Dios le pida eso a uno de sus profetas; por muchos considerado como el primero de los profetas menores; Dios le explica el propósito del porque le hace esa petición. Entonces Oseas va y se casa con Gomer, hija de Diblaim...La toma, la protege, le da un techo, la purifica, la viste, le da que comer, la provee, y no le hace falta nada, está segura. Pero Gomer, a pesar del cuidado que Oseas tenía con ella, sigue yéndose, dejando de lado todo lo que Oseas le daba, y regresando a su antigua profesión. Sin embargo, Oseas va por ella, la vuelve a purificar, la perdona por su infidelidad, y la vuelve a cuidar; pero Gomer sigue dejando a Oseas, y sigue regresando a la porquería de la que Oseas la sacó. Y no importa cuantas veces Oseas va por ella y la limpia y perdona, Gomer sigue adulterando, y siendo infiel para con Oseas. Este ciclo se repite una y otra vez, mientras Oseas, profetiza al pueblo y les dice que así ha sido Israel para con Dios. Pero Dios es un Dios clemente, que ama a su pueblo, que no quiere destruir a Israel, sino que quiere que se convierta de su mal camino, y que haga conforme al derecho y la justicia. Dios sigue esperando a que su pueblo corresponda al amor que les ha mostrado, y que hagan lo que les toca, mientras él sigue haciendo su parte para con su pueblo. Este mismo ejemplo se aplica para con su iglesia: "Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron (...)." (Romanos 15:4, RVR60) Hermanos, sinceramente le estuve preguntando a Dios que era lo que él quería que su iglesia escuchara el día de hoy, como cada predicador tiene que hacer. Y el Señor me dio esta cita: Oseas 11:1-12 (RVR60) "1Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo. 2Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios. 3Yo con todo eso enseñaba a andar al mismo Efraín, tomándole de los brazos; y no conoció que yo le cuidaba. 4Con cuerdas humanas los atraje, con cuerdas de amor; y fui para ellos como los que alzan el yugo de sobre su cerviz, y puse delante de ellos la comida. 5No volverá a tierra de Egipto, sino que el asirio mismo será su rey, porque no se quisieron convertir. 6Caerá espada sobre sus ciudades, y consumirá sus aldeas; las consumirá a causa de sus propios consejos. 7Entre tanto, mi pueblo está adherido a la rebelión contra mí; aunque me llaman el Altísimo, ninguno absolutamente me quiere enaltecer. 8¿Cómo podré abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión. 9No ejecutaré el ardor de mi ira, ni volveré para destruir a Efraín; porque Dios soy, y no hombre, el Santo en medio de ti; y no entraré en la ciudad. 10En pos de Jehová caminarán; él rugirá como león; rugirá, y los hijos vendrán temblando desde el occidente. 11Como ave acudirán velozmente de Egipto, y de la tierra de Asiria como paloma; y los haré habitar en sus casas, dice Jehová. 12Me rodeó Efraín de mentira, y la casa de Israel de engaño. Judá aún gobierna con Dios, y es fiel con los santos." #1 La paciencia de Dios. Salmo 86:15, RVR60 "Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad," El ejemplo perfecto que puedo ver de la paciencia de Dios es el reflejo de los padres piadosos con sus hijos. Le adviertes al niño que tenga cuidado al jugar porque se puede hacer daño. Y hay una típica frase de madres latinas, "bájate de ahí o te vas a lastimar, y cuando empieces a llorar yo te voy a dar una razón para que llores de verdad" ¿Porque es esta palabra? Bueno, porque desde el principio le estas advirtiendo que lo que esta haciendo puede causarle algún daño. Pero que pasa, cuando el niño se termina cayendo, y empieza a llorar, yo he visto que suceden una de dos cosas; la mamá cumple su palabra, le pega al niño, pero después, procura revisar que este bien, y que no haya tenido lesiones grabes; o la segunda cosa que pude pasar; la madre no le pega al niño, aplica la paciencia para con el niño, y procura curar sus heridas; y ambas cosas, mis hermanos, son por amor. Tu amas a tu hijo, y por eso lo corriges. Es lo mismo que Dios hace para con sus hijos. Él primero les advierte que el camino que están tomando es un camino peligroso; estoy hablando del pecado hermanos; si aun así el pueblo es obstinado y se reúsa a escuchar a Dios, se reúsa a obedecer a Dios, en la naturaleza de Dios, como no solamente un padre, sino que también creador de la paternidad, Dios muchas veces tiene paciencia. Oseas 11:8, RVR60 "¿Cómo podré abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión." Y Él muchas veces no desata su ira instantáneamente sobre sus hijos que le desobedecen, porque él es Dios clemente y no hombre. Oseas 11:9, RVR60 "No ejecutaré el ardor de mi ira, ni volveré para destruir a Efraín; porque Dios soy, y no hombre, el Santo en medio de ti; y no entraré en la ciudad." Entonces que pasa; nuestro Dios no es alguien, que de repente andas por la calle y te cae la ira de Dios sin aviso. Y de repente, sin que te des cuentas, ya estas bajo el castigo de Dios. No hermanos esa no es la naturaleza de Dios. Nuestro Dios es un Dios paciente, lento para la ira y grande en misericordia, es un Dios misericordioso y clemente, es un Dios que detiene su ira; porque Dios no es hombre, que de repente por cualquier cosa ya estamos enojándonos por todo; esto es algo en lo que ciertamente todos fallamos, todos de repente tenemos nuestros 5 minutos de huele pedo y explotamos por todo. Pero nuestro Dios no es así. El Señor primero te avisa, te advierte, te dice: ¡Hey! ¡Pon atención hacia donde estas yendo, te estas alejando de mí! ¡Regresa! Proverbios 22:3, RVR60 "El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y reciben el daño." En la versión KJV, que es como la Reina Valera 60 de los gringos, lo dice de una forma particularmente interesante: Proverbs 22:3, KJV 1900 "A prudent man foreseeth the evil, and hideth himself: But the simple pass on, and are punished." En este versiculo, al mal del cual se está refiriendo, podría definirse como el pecado, el avisado como aquel al que Dios le muestra sabiduría, y el simple a aquel que es necio. Entonces, ciertamente Dios nos muestra el camino por el que estamos yendo, Jesús dijo que el Consolador nos guiaría a toda la verdad, entonces Dios nos comunica el camino en el que estamos yendo y si estamos yendo en camino de perversidad. El salmista escribe: "Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno." (Salmo 139:23-24, RVR60) Y entonces regresamos al ejemplo que les decía al principio. La mamá le dice al niño: "bájate de ahí que te vas a lastimar, y después yo te voy a pegar para que tengas una razón por qué llorar" y con justa razón, porque la madre esta cuidando de que su hijo se lastime, y si el niño no hace caso, tiene que venir un castigo como consecuencia, y aún esto es amor, pero si el niño hace caso, se habrá librado de dos cosas, el golpe que se dio cuando se cayó, y el golpe de su mamá. Y podemos ver a Dios advirtiendo muchas veces a su pueblo, y haciéndoles ver que el camino por el cual se estaban desviando es un camino de muerte, y que si no vuelven a Él, traerá juicio sobre ellos. Mandó Dios a muchos profetas a su pueblo, para hacerlos ver, y pacientemente les advierte muchas veces. Uno de los personajes bíblicos que demuestran mucho este punto es Ezequiel. Ezequiel es uno de los sacerdotes y profetas que fue llevado cautivo junto con Judá a Caldea, o conocido también como Babilonia. Y Ezequiel se encarga de profetizar contra aquel pueblo que aun se reusaba a regresar a Dios. Dios les dice estas cosas a Ezequiel: Ezequiel 2:8, RVR60 "Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy." Ezequiel 3:5-7, RVR60 "Porque no eres enviado a pueblo de habla profunda ni de lengua difícil, sino a la casa de Israel. No a muchos pueblos de habla profunda ni de lengua difícil, cuyas palabras no entiendas; y si a ellos te enviara, ellos te oyeran. Mas la casa de Israel no te querrá oír, porque no me quiere oír a mí; porque toda la casa de Israel es dura de frente y obstinada de corazón." Ezequiel 3:9, RVR60 "Como diamante, más fuerte que pedernal he hecho tu frente; no los temas, ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa rebelde." Ezequiel 3:27, RVR60 "Mas cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son." Ezequiel 12:2, RVR60 "Hijo de hombre, tú habitas en medio de casa rebelde, los cuales tienen ojos para ver y no ven, tienen oídos para oír y no oyen, porque son casa rebelde." Ezequiel 12:25, RVR60 "Porque yo Jehová hablaré, y se cumplirá la palabra que yo hable; no se tardará más, sino que en vuestros días, oh casa rebelde, hablaré palabra y la cumpliré, dice Jehová el Señor." Ezequiel 17:12, RVR60 "Di ahora a la casa rebelde: ¿No habéis entendido qué significan estas cosas? Diles: He aquí que el rey de Babilonia vino a Jerusalén, y tomó a tu rey y a sus príncipes, y los llevó consigo a Babilonia." Ezequiel 44:6, RVR60 "Y dirás a los rebeldes, a la casa de Israel: Así ha dicho Jehová el Señor: Basta ya de todas vuestras abominaciones, oh casa de Israel;" Dios, que retiene su ira, y es paciente, advierte, por medio de su palabra, el camino que estamos llevando, por amor. El capítulo 11 de Oseas; que es la cita con la que comenzamos este mensaje; podemos ver a un Dios enojado ciertamente, pero también podemos ver a un Dios grande en misericordia, grande paciencia. Podemos ver a Dios como un padre amoroso, que lleva a su hijo de la mano y le enseña el camino por el que debe andar. Además podemos ver que como Padre, le provee a su hijo de todo lo que necesita, y no le hace falta nada. Pero a medida que el hijo crece, se va volviendo rebelde, y se va, aprovechándose de las misericordias de su Padre. Entonces podemos ver al Padre enojado contra su hijo, y vemos que este Padre, como también es justo, empieza a proferir juicio contra su hijo, pero su gran amor por su hijo lo detiene, y le dice: 8¿Cómo podré abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión. 9No ejecutaré el ardor de mi ira, ni volveré para destruir a Efraín; porque Dios soy, y no hombre, el Santo en medio de ti; y no entraré en la ciudad. Ese es mi Dios hermanos, aquel que tiene un amor inalterable. Pero Dios, sigue llamando a su pueblo. Y Hermanos, porque esto Dios lo haya hablado en aquel tiempo a su pueblo Israel, no significa que Dios no pueda usarlo hoy en día para con nosotros. Así que hermanos, Dios llamó a su pueblo, en diferentes tiempos, pero por boca de Oseas y por boca de Ezequiel, pero entre mas los llamaba, más se alejaban de él. Dios los llamaba, y el pueblo ignoraba. Esto también se puede aplicar a ti hermano así que ¿en dónde estas tú? De los que oyen a Dios y le obedecen, o de los que lo ignoran. Y eso me deja entrar a mi segundo punto. #2 Dios llama. Apocalipsis 3:14-21, RVR60 "Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas. Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono." Hermanos, ¿Por qué puse apocalipsis 3:14-21 como referencia para el punto número tres? Hermanos, pude haber puesto apocalipsis 2 el mensaje a Éfeso, pero no iba a coincidir con todo lo que he estado hablando antes. Así que, al momento de estar escribiendo este sermón, el Espíritu me guio para poner apocalipsis tres, el mensaje a laodisea. El problema hermanos, no es que Dios no este hablando, Dios sigue llamando, sigue guiando a su iglesia. El problema radica en que ignoramos cuando Dios nos esta hablando, cuando nos advierte por el camino que estamos llevando. Y la realidad es esta: Oseas 11:7, RVR60 "Entre tanto, mi pueblo está adherido a la rebelión contra mí; aunque me llaman el Altísimo, ninguno absolutamente me quiere enaltecer." Hermanos, el problema es que venimos a la iglesia, nos autonombramos cristianos, y hablamos en frente de los demás muy "santos" y cuando estamos en la iglesia entre todos nos llamamos "hermanos" pero en realidad tu vida no refleja la verdad de la palabra de Dios. ¿Cuánto tiempo invertimos en aprender mas acerca de este libro? ¿Cuánto tiempo pasamos orando? ¿Cuánto tiempo pasamos haciendo lo que Dios nos pide? Ni yo mismo estoy exento de esto, y yo mismo me he visto reprobado ante estas cosas. Hermanas, aún hay división entre algunas de ustedes. Jóvenes, ayer ni siquiera se presentaron la mayoría para salir a compartir el evangelio, pero no se diga "convivencia" porque ahí si llegan todos. Varones, ¿Están guiando a su casa como la palabra manda? Ministerios ¿Aún siguen habiendo roces entre ustedes sin resolver, creando un ambiente pesado en el ministerio? Yo se que estas cosas no son para todos, pero yo pongo el tendedero, ustedes pónganse lo que les quede. "aunque me llaman el Altísimo, ninguno absolutamente me quiere enaltecer." ¿Cuál es la manera de enaltecer a Dios? Hermanos, no es con las canciones que cantamos los domingos, no es que diciéndole al otro: "hermanito, hermanito" tampoco es solamente que vengas los domingos a la iglesia por un par de horas. La manera real y viva de enaltecer en nombre de Dios, es obedeciendo su palabra, viviendo en la palabra, conociendo a Dios, cortar nuestra relación con el mundo. Eso es lo que Dios te va a juzgar el día que tengas tu encuentro con él; si creíste en su hijo, si guardaste sus mandamientos, y si tienes una relación con él. Pero nos negamos a oír, oír que somos tibios, y que nuestra vida en realidad no esta centrada en Cristo, sino en nuestros propios deseos banales "¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo." Muchos quieren conocer la voluntad de Dios para su vida y esperan una señal sobrenatural; hermanos, este libro es esa señal sobrenatural, aquí encuentras la voluntad de Dios para todo. El problema es que como no somos ni fríos ni calientes, de repente medio la leemos, medio la estudiamos, medio la memorizamos, medio la obedecemos, y así somos, medios. Bueno no te sorprendas si el Señor medio te contesta, medio te ayuda, porque no puedes cumplir con la voluntad escrita de Dios. Somos un pueblo rebelde, eso es lo que somos, somos un pueblo obstinado, que deja a Dios de lado, somos un pueblo tibio, y doblemente inútil, porque ni lo que tiene que hacer, hace. Hermanos, el trabajo no te va a dar vida eterna, las cosas que posees no te van a dar vida eterna, tu familia no te va a dar vida eterna, nada fuera de Cristo te va a dar vida eterna. Y no me mal entiendas hermano, no te estoy diciendo que estes aquí 24/7 solo te estoy diciendo que sacrifiques tus placeres por conocer mas Cristo, por obedecer más a Cristo, por dejar de ser tibio, y ahora tu vida refleje verdaderamente la palabra de Dios morando en ti, antes de que sea tarde. Llamado, conclusión y aplicación: Hermanos, desde hace ya varias de mis predicaciones han tratado que prácticamente lo mismo; de crecer, de despertar, de buscar a Dios, de echarle acción. Hermanos, el Señor cumple su palabra, y en la historia de Israel vemos como Dios les advierte muchas veces a su pueblo, que despierten, que vuelvan a ÉL, que él los perdonaría, que estaría con ellos, y que hagan lo que les toca hacer. Pero el pueblo de Dios no hizo caso a sus palabras, fue un pueblo obstinado, y a pesar de tener un Dios clemente, grande en misericordia, paciente, cumplió su palabra y los castigo, y los castigo duramente. Así que, Dios cumple su palabra, y si él dice que hará algo es porque lo hará. Pero antes de castigarnos, Dios nos da un tiempo de gracia y nos llama, con cuerdas humanas, con cuerdas de amor. Isaías 55:6-9, RVR60 "Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos." Hermano, llegará un día en que será muy tarde para que puedas ponerte a cuentas con Dios. Si no has entregado tu vida a Cristo, o si aún no puedes dejar ese pecado con el que tanto batallas, o quizá ya hasta te gusta, o quizá sabes que necitas ayuda en algún área de tu vida, si sabes que necesitas ayuda para poner en practica las ordenanzas de Dios, si quieres entregar tu vida a Cristo, hoy es el momento hermano. La paciencia, la clemencia, la gracia de Dios te ha permitido estar aquí, escuchando su palabra. El Señor ha lanzado su llamado, y tu has escuchado como esta hablándole a su pueblo ya no tienes excusa hermano. El Señor será amplio en perdonar. 2º Crónicas 7:14-16, RVR60 "si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar; porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que esté en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre." Salmo 62:8, NTV "Oh pueblo mío, confía en Dios en todo momento; dile lo que hay en tu corazón, porque él es nuestro refugio." Hermano, te invito a que pases aquí adelante, y vengas a orar. Yo se que oramos siempre en nuestros lugares, pero hoy quisiera hacer algo diferente. Me gustaría que sin pena, pases delante, y ores aquí, oremos todos juntos. Si está tu familia aquí contigo, jálatela, trae a tu esposa, si tus hijos son jóvenes y están aquí jálalos, reúne a tu familia, y vengan aquí a orar, aunque no quepamos todos pero no importa, jálate a tus amigos o a tus amigas, si vienes solito o solita, no le hace, vente aquí, y oremos todos juntos como un cuerpo unido al Señor, pidamos perdón si hay que pedir perdón, y pidamos ayuda a nuestro Señor. (oración final)