Barro en manos del Alfarero
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Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo: Levántate y vete a casa del alfarero, y allí te haré oír mis palabras. Y descendí a casa del alfarero, y he aquí que él trabajaba sobre la rueda. Y la vasija de barro que él hacía se echó a perder en su mano; y volvió y la hizo otra vasija, según le pareció mejor hacerla.
Introducción:
La alfarería es un antiguo arte de elaborar vasijas de barro o de cerámica (proceso similar) procesos:
1. El Alfarero: toma el barro en sus manos y lo amasa.
2. El barro: ya amasado (revuelto y blando) se coloca en la rueda.
3. La rueda: instrumento donde se coloca el barro y girándolo se da forma al barro en una vasija.
4. El horno: ya elaborada y seca la vasija se coloca en el horno para coserla y hacerla muy dura.
I. DIOS ES EL ALFARERO: (artesano que elabora vasijas, ollas de barro)
A. Nuestras vidas están en las manos de Dios.
Ahora pues, Jehová, tú eres nuestro padre; nosotros barro, y tú el que nos formaste; así que obra de tus manos somos todos nosotros.
B. Dios el alfarero tiene un plan para con nosotros:
He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho.
C. El alfarero tiene un plan perfecto para el barro; el ve en su mente el producto terminado. Dios tiene un plan perfecto para nuestras vidas. Como un artesano o arquitecto.
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;
D. Nosotros no podemos ver el producto terminado, pero El nos promete que es maravilloso. UN FUTURO HERMOSO (hay un
propósito a nuestra vida)
Antes bien, como está escrito:
Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,
Ni han subido en corazón de hombre,
Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
E. El alfarero trabaja usando las manos de otros para ayudar a formarnos: padres, maestros, otros creyentes, incluso los que nos persiguen.
II. NOSOTROS SOMOS EL BARRO. (Tierra utilizada para elaborar vasijas) —
Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? ¿Y qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo de los judíos, sino también de los gentiles?
A. Por supuesto, en el mensaje de Jeremías el barro representa nuestras vidas Los creyentes son los vasos de Dios, moldeados por Él para contener el tesoro del evangelio.
Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
Pero en una casa grande, no solamente hay utensilios de oro y de plata, sino también de madera y de barro; y unos son para usos honrosos, y otros para usos viles. Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra.
B. Los seres humanos están hechos de barro; el barro es polvo mezclado con agua. Somos polvo, “Porqué el conoce nuestra condición, se acuerda de que somos polvo.
Porque él conoce nuestra condición;
Se acuerda de que somos polvo.
C. La cualidad más importante del barro es que se somete a las manos del alfarero, se arruinará. El barro no se puede auto moldear por si solo, tiene que tener al alfarero. El quiere que
cooperemos en la oración, la meditación, la obediencia a su voluntad y que nos rindamos a su toque DIVINO.
D. Transformación: Si no somos trasformados por Dios seguimos siendo polvo barro lodoso del camino.
Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
III. LA VIDA ES UNA RUEDA.
A. la rueda girar con rapidez, velocidad la controla el alfarero. Nuestras vidas no las controla la suerte o la casualidad. Dios
arregla las circunstancias de la vida que nos moldean.
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
B. El joven José: esclavo en Egipto llego a ser gobernador de Egipto.
C. Elías fue un hombre que huyó por el desierto y deseo morirse en cierta ocasión, y luego Dios lo sacó de esa depresión espiritual y lo llevó a un ministerio mas prosperó. (El profeta de Fuego)
D. Jesús “por lo que padeció aprendió la obediencia” se le dio un hombre que es sobre todo nombre.
sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;
E. Oposición al cambio del alfarero.
F. Aceptar el pecado como algo normal.
G. Encuentran aburrida la vida de oración.
H. Tener los pies en la iglesia y los ojos en el mundo.
I. La pasividad espiritual.
V. LAS PRUEBAS SON EL HORNO.
La vida debe tener sus hornos.
A. (SE PRUEBA)
1. NUESTRA FIDELIDAD. Seguirle a pesar de las circunstancias adversas.
2. FE. Creerle a Dios en lo imposible.
3. PACENCIA. Aprender a esperar en El.
4. AMOR. Aprender a amar y perdonar.
5. CARÁCTER. Permitirle que moldee y corrija nuestro carácter.
6. MANSEDUMBRE. Soportar a los que nos rodean.
B. El calor le da al barro fuerza y belleza, e incrementa su utilidad y valor.
1. Job atravesó el horno del dolor.
Mas él conoce mi camino;
Me probará, y saldré como oro.
2. Los tres jóvenes hebreos fueron arrojados en el horno y en el descubrieron que el Alfarero estaba allí en el fuego con ellos.
Entonces Nabucodonosor se llenó de ira, y se demudó el aspecto de su rostro contra Sadrac, Mesac y Abed-nego, y ordenó que el horno se calentase siete veces más de lo acostumbrado. Y mandó a hombres muy vigorosos que tenía en su ejército, que atasen a Sadrac, Mesac y Abed-nego, para echarlos en el horno de fuego ardiendo. Entonces estos varones fueron atados con sus mantos, sus calzas, sus turbantes y sus vestidos, y fueron echados dentro del horno de fuego ardiendo. Y como la orden del rey era apremiante, y lo habían calentado mucho, la llama del fuego mató a aquellos que habían alzado a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Y estos tres varones, Sadrac, Mesac y Abed-nego, cayeron atados dentro del horno de fuego ardiendo.
Entonces el rey Nabucodonosor se espantó, y se levantó apresuradamente y dijo a los de su consejo: ¿No echaron a tres varones atados dentro del fuego? Ellos respondieron al rey: Es verdad, oh rey. Y él dijo: He aquí yo veo cuatro varones sueltos, que se pasean en medio del fuego sin sufrir ningún daño; y el aspecto del cuarto es semejante a hijo de los dioses.
a. Dios sabe cuánto calentar el horno y cuánto podemos soportar.
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
EL VALOR DE LAS VASIJAS DEPENDE DE LO QUE EN ELLAS SE CONTENGA:
Agua.
Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse.
Aceite.
Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.
Sal.
Entonces él dijo: Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal. Y se la trajeron.
Miel.
Y toma en tu mano diez panes, y tortas, y una vasija de miel, y ve a él, para que te declare lo que ha de ser de este niño.
Vino.
Después que lo hubo destetado, lo llevó consigo, con tres becerros, un efa de harina, y una vasija de vino, y lo trajo a la casa de Jehová en Silo; y el niño era pequeño.
Oro, .
plata, piedras preciosas
Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros,