¿Por qué Predicamos la Biblia?

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la Bibliología es la doctrina fundamental, es sobre esta verdad que descansan el resto de las enseñanzas Bíblicas. La Biblia nos da argumentos con mucha categoría que nos ayudan a eliminar suposiciones e intentos humanos de desacreditar este precioso Libro, siendo lo más atacado en todas las épocas su inspiración.

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Éxodo 32:15–16 RVR60
15 Y volvió Moisés y descendió del monte, trayendo en su mano las dos tablas del testimonio, las tablas escritas por ambos lados; de uno y otro lado estaban escritas. 16 Y las tablas eran obra de Dios, y la escritura era escritura de Dios grabada sobre las tablas.

INTRODUCCIÓN

Aunque la Cristología es la doctrina central de la Biblia, la Bibliología es la doctrina fundamental, es sobre esta verdad que descansan el resto de las enseñanzas Bíblicas.
Es superlativamente esencial para quienes leemos la Biblia que conozcamos lo que la Biblia dice acerca de si misma y sobre su inspiración, antes de conocer incluso lo que la Escritura dice acerca de otras enseñanzas doctrinales.
La Biblia nos da argumentos con mucha categoría que nos ayudan a eliminar suposiciones e intentos humanos de desacreditar este precioso Libro, siendo lo más atacado en todas las épocas su inspiración.
Uno de los errores que la mayoría de la gente cometemos con la Biblia es dar por hecho que se trata de un libro que podemos leer como cualquier otro libro; Comenzando por la primera página para terminar con la última.
Si bien es cierto que en su forma parece un libro, la realidad es que no se trata de un libro, sino de una colección de libros; 66 libros para ser exactos.
Estos libros en conjunto son los que llamamos la Biblia, las Sagradas Escrituras o simplemente la Palabra de Dios.
Decimos que es la Palabra de Dios porque el Creador de todo lo que existe, en un punto definitivo de la historia, decidió comunicarse con su creación por diversos medios que no dejarán lugar a dudas que Dios mismo se estaba comunicando con los hombres.
Este proceso que duró aproximadamente unos 1500 años quedó registrado en varios volúmenes que unidos conforman lo que hoy conocemos como la Biblia.
Pero para poder comprender cómo es que llegamos a la conclusión de que esta colección de libros son las Palabras de Dios y por qué tienen la autoridad para hablarnos acerca de todo lo que se refiere a la vida y a la espiritualidad, debemos primero entender algunas cosas básicas y elementales de la Biblia.
En primer lugar:

LOS LIBROS DE LA BIBLIA NO ESTÁN ORDENADOS CRONOLÓGICAMENTE

De manera que el hecho de que un libro anteceda a otro no quiere decir que haya sido escrito antes o que los acontecimientos que relata hayan sucedido previamente a los que narra el libro siguiente.
Los libros de la Biblia están ordenados de manera temática.
Los primeros cinco libros hablan de la Ley, luego tenemos los libros históricos (12) que tratan sobre Israel y sus reyes, luego tenemos cinco libros poéticos, a los cuales le siguen los libros proféticos divididos en profetas mayores (5) y profetas menores (12).
En total 39 libros clasificados en 4 tipos de libros que conforman lo que llamamos el Antiguo Testamento.
A los cuales le siguen cuatro evangelios, un libro histórico un conjunto de 13 cartas escritas por el apóstol Pablo, 8 por varios autores y finalmente un libro profético, para un total de 27 libros clasificados en cinco tipos de libros al cual llamamos el Nuevo Testamento.
Ahora, en segundo lugar.

LOS LIBROS DE NUESTRA BIBLIA NO FUERON ESCRITOS COMO NOSOTROS LO LEEMOS EN LA ACTUALIDAD

De hecho los escritos originales no tenían las divisiones que usamos hoy en día como capítulos, versículos, encabezados y demás comodidades que hacen que nuestra lectura y comprensión sea más “fácil”.
Sino que todas estas cosas fueron agregadas a la Biblia tras la aparición de la imprenta.
Lo que es aún más importante es que la Biblia no fue escrita originalmente en español. Lo que nosotros tenemos en nuestras manos es la traducción al español de las Escrituras que originalmente se hicieron en tres idiomas diferentes:
El Antiguo Testamento fue escrito en hebreo con algunas porciones en arameo y el Nuevo Testamento fue escrito en griego.
Lo más fascinante de todo esto es que los 66 libros de que hablamos no fueron escritos por una sola persona sino por más de 40 autores diferentes a lo largo de 40 generaciones, en distintos lugares del mundo y en condiciones extremadamente diversas.
Por nombrarle algunos ejemplos, hubo quienes escribieron parte de la Biblia en África, otros en Asia y algunos más en Europa.
Entre los escritores que Dios usó había granjeros, reyes, pescadores, estadistas, esclavos, militares, recaudadores de impuestos, rabinos y la mayoría de ellos ni siquiera se conocieron.
Ahora yo no se a usted pero a mi esto me parece lo más impresionante. Porque al analizar el conjunto de escritos, todos concuerdan a la perfección con el tema central y el mensaje principal de la Biblia.
Cada nueva revelación complementa a la anterior o corrobora las primeras.
Si usamos el sentido común, la conclusión más lógica y más inteligente es que este libro proviene de Dios mismo.
Porque es imposible que 40 autores diferentes en un período de 1500 años, en tres continentes diferentes, con distintas clases sociales y distintas épocas escribieran un libro con una uniformidad y una unidad tan impresionante como la Biblia, sin la intervención de un ser superior y divino como el Espíritu Santo de Dios.
Entonces, repasamos:
Para poder comprender cómo es que llegamos a la conclusión de que esta colección de libros son las palabras de Dios y por qué tienen la autoridad para hablarnos acerca de todo lo referente a la vida y la espiritualidad, es decir ¿por qué predicamos este libro?
Hemos dicho que debemos primero entender algunas cosas elementales de la Biblia.
Los libros de la Biblia no están ordenados cronológicamente.
Los libros de nuestra Biblia no fueron escritos como nosotros los leemos en la actualidad.
Y final pero no menos importante sino lo más importante es:

LOS LIBROS DE LA BIBLIA FUERON INSPIRADOS POR EL ESPÍRITU SANTO DE DIOS

La respuesta que los mismos autores nos dan es que en realidad todos los que participaron en la elaboración de las Escrituras a lo largo de los siglos, lo hicieron bajo la dirección e inspiración del Espíritu Santo.
Es decir, Dios mismo usó a hombres con sus personalidades, sus experiencias y sus capacidades para escribir cada uno los libros de la Biblia.
2 Timoteo 3:16 RVR60
16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
2 Pedro 1:19–21 RVR60
19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; 20 entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, 21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
¿Cómo puede ser esto?, ¿le dictó Dios lo que habrían de Escribir?
¿Les puso pensamientos para que ellos los plasmaran con sus propias palabras?
¿Inspiró los conceptos o las palabras que escribieron?
¿Es todo idea de Dios o solo algunas partes? ¿cómo puede Dios inspirar y qué significa inspirar?
Como veras mi querido hermano mientras más busquemos la verdad más preguntas habrá.
La buena noticia es que hay respuestas convincentes a cada una de ellas, pero antes que entrar de lleno en el asunto de la inspiración y el por qué este libro es la Palabra de Dios y por qué lo predicamos categóricamente en esta Iglesia, me gustaría hacerle pensar en esto:
¿Cuántos libros conoces que hayan sido escritos hace tantos años, por tantos autores distintos, con una misma línea de pensamiento, un mismo tema y un sólo propósito?
Este libro que hoy predicamos ha sido motivo de guerras, de persecuciones, de martirios, de grandes injusticias y grandes calamidades y sin embargo, a pesar de tener tantos detractores y antagonistas a lo largo de la historia nunca nadie ha podido deshacerse de él.
¿Será que hay algo de cierto en lo que la Biblia dice ser?
¿Y qué dice ser la Biblia pastor?
Bueno mi querido hermano y amigo que nos visita, la Biblia reclama el titulo de ser la Palabra de Dios.
Éxodo 32:15–16 RVR60
15 Y volvió Moisés y descendió del monte, trayendo en su mano las dos tablas del testimonio, las tablas escritas por ambos lados; de uno y otro lado estaban escritas. 16 Y las tablas eran obra de Dios, y la escritura era escritura de Dios grabada sobre las tablas.
Las tablas que trajo Moisés estaban escritas por ambos lados y el texto que leemos nos dice que eran obra de Dios, cuya escritura era escritura de Dios grabada sobre aquellas tablas.
La Biblia nos revela que Moisés escribió todas las palabras de Jehová.
Éxodo 24:4 RVR60
4 Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel.
También nos dice que Moisés habló al pueblo todas las palabras de Jehová.
Éxodo 24:3 RVR60
3 Y Moisés vino y contó al pueblo todas las palabras de Jehová, y todas las leyes; y todo el pueblo respondió a una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehová ha dicho.
Éxodo 24:7 RVR60
7 Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos.
De manera que predicamos este libro porque es obra de Dios, porque Moisés, los profetas, Cristo y los apóstoles lo predicaron.
Lo predicamos porque literalmente este libro fue inspirado por el Espíritu Santo.
La Palabra inspiración viene de una traducción de la palabra THEOPNEUSTOS que se encuentra en 2 Timoteo 3:16
2 Timoteo 3:16 RVR60
16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
Esta palabra literalmente se traduce como inspirado por Dios tiene el sentido de respirado por Dios.
En otras Palabras la Biblia ha sido producida por el Espíritu de Dios, es el producto final de la acción creadora de Dios.
Esta palabra se le define como la obra del Espíritu Santo de Dios, al hacer que los autores de la Biblia escribiesen la Palabra de Dios sin error y con tanta precisión y exactitud histórica y temática.

CONCLUSIÓN

Entonces para concluir este mensaje:
Si la Biblia es la Palabra de Dios la pregunta no es ¿por qué predicamos la Biblia, la pregunta sería por qué no predicar y seguir predicando la Biblia a los hombres en el día de hoy?
La predicación de su palabra es un oficio,un llamado y una orden que tenemos aquellos a los cuales Dios nos ha tenido por dignos de esta labor.
Si la Biblia es la obra inspirada y provista por Dios entonces su mensaje y su evangelio debe ser predicado, anunciado, enseñado, proclamado y pregonado por la Iglesia y obedecido por los hombres.
Pablo bajo la inspiración de Dios predicando a los atenienses dijo lo siguiente:
Hechos de los Apóstoles 17:30–31 RVR60
30 Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; 31 por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.
Dios te manda a que te arrepientas de tus pecados y te vuelvas a Él por medio de Cristo, porque un día te juzgará con justicia y cómo escaparás de la justicia de Dios.
¿Dónde te esconderás de la justicia de Dios?
Arrepiéntete hoy antes que sea demasiado tarde para ti.
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