Consejo y Oración para hoy

1 de mayo

Proverbios 16:20 RVR60

El entendido en la palabra hallará el bien, Y el que confía en Jehová es bienaventurado.

Hay dos cualidades importantes del carácter en las cuales los seres humanos invertimos un buen esfuerzo en alcanzar:

La primera, el desarrollo de habilidades que nos hagan expertos, diestros y hábiles en el manejo del conocimiento humano.

La segunda, el desarrollo de auto confianza, seguridad en nosotros mismos, a partir del desarrollo intelectual y mental que hemos alcanzado.

Una persona segura de si misma y con las habilidades adecuadas para enfrentar la vida es nuestro anhelo.

Pero La Palabra de Dios, a través de Salomón, nos da un enfoque diferente acerca de como lograr alcanzar estas cualidades tan deseadas.

El proverbista añade a la cualidad de entendido, sabio, experto, hábil, una expresión que enfoca su atención no en la persona misma, sino mas bien el desarrollo de la habilidad para interpretar y aplicar el mensaje de Dios en su vida.

Este es el medio a través del cual la persona alcanza los bienes anhelados.

El desarrollo de la confianza y seguridad, para el proverbista, ya no está en la persona misma sino más bien en Dios. El es la fuente en la cual se alimenta la confianza en alcanzar las metas trazadas. Es en Dios que se genera la seguridad de una vida dichosa.

Desde la perspectiva divina, la disposición que yo tengo para comprender y obedecer la Palabra de Dios, y la fe puesta en el cumplimiento de las promesas en ella escritas es lo que determina encontrar el bien, convertirme en una persona feliz.

Instrucción y confianza, dos palabras que debo grabar en mi mente, las dos funcionan conectadas en Dios para mi bendición.

La bienaventuranza y el bien son el resultado de una vida instruida en la Palabra y un corazón aferrado a Dios.

Quiero buscar cada día capacidad de entendimiento de la Palabra y el desarrollo de una vida confiada en lo que Dios promete.

Oremos,

Padre mi mente necesita desarrollar la habilidad para discernir tu voluntad, mi corazón necesita estar confiado en ti, ese es mi deseo.

Quiero darte gracias porque has dispuesto revelarme todos los tesoros del conocimiento para una vida dichosa, y esperas de mi siempre que me disponga a depositar mi confianza en ti.

Te pido Señor todo el entendimiento que necesito para superar todos los desafíos que enfrento en este mundo que rechaza tu voluntad. Dame un corazón confiado en ti, que solo espera en tus promesas.

Oro por los que en estos momentos necesitan entender lo que están viviendo, que reciban la dirección que necesitan de tu Palabra.

En el nombre de Jesús, amén.

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