Las dimensiones del amor de Dios

Efesios 3:17–19 NVI

para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios.

INTRO:

Seguramente deben conocer la frase; “todo tiene un límite”.

¿El amor de Dios tiene un límite?

Vamos a ver qué dice la biblia.

EL CIMIENTO DEL AMOR

Efesios 3:17 NVI

para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor,

1 Juan 4:16 NVI

Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.

Mateo 7:25 NVI

Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó porque estaba cimentada sobre la roca.

Apocalipsis 2:3–4 NVI

Has perseverado y sufrido por mi nombre, sin desanimarte. Sin embargo, tengo en tu contra que has abandonado tu primer amor.

El amor de Dios está siempre ahí, expresado y manifestado en Su hijo Jesucristo que se entregó por amor a nosotros.

Nosotros tenemos la decisión y la libertad de permanecer o abandonar.

LAS LONGITUDES DEL AMOR

Efesios 3:18 NVI

puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo;

1 Juan 4:10–11 NVI

En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que fuera ofrecido como sacrificio por el perdón de nuestros pecados. Queridos hermanos, ya que Dios nos ha amado así, también nosotros debemos amarnos los unos a los otros.

Ancho y largo (horizontal)

Amar al prójimo

Juan 15:12 NVI

Y éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.

Alto y profundo (Vertical)

amamos a Dios, porque él nos amó primero.

1 Juan 4:19 RVR60

Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.

Envío a su Hijo.

Romanos 5:8 NVI

Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.

El amor de Dios no tiene limites, ni se termina en ningún momento.

LLENOS DE DIOS

Efesios 3:19 NVI

en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios.

Colosenses 2:9 NVI

Toda la plenitud de la divinidad habita en forma corporal en Cristo;

Efesios 5:18 NVI

No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean llenos del Espíritu.

Cuando estamos llenos de la plenitud de Dios a través de Su Espíritu, el amor de Dios fluye en nosotros y hacía los demás, expresado en nuestro servicio.

2 Corintios 5:14–15 NVI

El amor de Cristo nos obliga, porque estamos convencidos de que uno murió por todos, y por consiguiente todos murieron. Y él murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para el que murió por ellos y fue resucitado.

CONCLUSIÓN

Romanos 8:38–39 NTV

Y estoy convencido de que nada podrá jamás separarnos del amor de Dios. Ni la muerte ni la vida, ni ángeles ni demonios, ni nuestros temores de hoy ni nuestras preocupaciones de mañana. Ni siquiera los poderes del infierno pueden separarnos del amor de Dios. Ningún poder en las alturas ni en las profundidades, de hecho, nada en toda la creación podrá jamás separarnos del amor de Dios, que está revelado en Cristo Jesús nuestro Señor.