24. Todo el consejo de Dios: El contenido de la revelación profética (2da parte)

Isaías 1:4 RVR60

4 ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.

Introducción

Por la gracia y misericordia del Señor hoy vamos a continuar con nuestra serie “Todo el consejo de Dios”

Hemos venido hablando sobre el desarrollo de la revelación especial del Señor que es la Biblia en su carácter Orgánico, Histórico y Progresivo.

Este estudio de las escrituras como “un todo” es conocido como Teología Bíblica o también como el Estudio de la historia de la redención.

Comenzamos a exponer esta serie:

Describiendo el ser de Dios y su precioso pacto de redención.

Periodo mosiaco de revelación.

Periodo previo al profetismo (Jueces a Rut)

Periodo del Profetismo

El profetismo y el oficio de profeta en el AT

El modo de recepción y comunicación de la revelación profética

El contenido de la revelación profética (1ra parte) La naturaleza y atributos del Señor y el Pacto entre El Señor e Israel.

El contenido de la revelación profética (2da parte) La ruptura del Pacto: El Pecado de Israel

Hoy veremos el terrible aspecto del pecado, haremos como una radiografía al pecado, mostrándolo como la Palabra del Señor lo presenta por medio de sus profetas y sus terribles consecuencias. Aprenderemos que el quebrantamiento del Pacto entre el Señor e Israel fue su terrible pecado.

Bosquejo

Exposición bíblica

Contexto general

Contexto inmediato

Explicación del pasaje

Exposición doctrinal

El pecado

Aplicaciones

Exposición bíblica

Isaías 1:4 RVR60

4 ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.

Contexto general

Resumen. Isaías es una colección diversificada de mensajes proféticos escritos 700 años a.C. Los primeros dos tercios enfatizan los pecados de Judá, llamándolos a arrepentirse y advirtiéndoles del juicio venidero de Dios sobre Judá y las naciones, pero a lo largo de todo ello hay indicios del plan de Dios para redimir y restaurar a su pueblo revelando los hechos del mesías venidero (nacimiento: Isa7:14, su deidad: Isa9:6-7, su sacrificio vicario . El último tercio hace hincapié en los temas de la salvación y la restauración después del juicio.

Propósito. Llamar al pueblo de Dios al arrepentimiento y asegurarles el plan soberano de salvación de Dios.

Mensaje. El pecado debe ser castigado, pero Dios tiene un plan para salvar y restaurar.

Contexto inmediato

Vs.1 Al comienzo del libro el autor de identifica como Isaías, hijo de Amoz. Su nombre significa “La Salvación del Señor”

Señala que el mensaje el cual comunicará, el Señor le había revelado por una visión (modo de recepción y comunicación profética.

También encontramos que su minisetrio se desarrolló a lo largo de 4 generaciones de reyes del reino del sur, aproximadamente unos 80 años.

Inmediatamente después de su identificación, el contenido de la visión es revelado al pueblo, pero veremos que inicialmente no son buenas noticias, ya que el Señor:

Vs.2 Demanda que aquellos que habían sido criados, es decir, cuidados desde el nacimiento como nación hasta ese momento se habían revelado. (Cuán terrible es para un padre ver que el pequeño que tuvo en brazos cuidando sus necesidades, al crecer este se rebele)

Vs3. Exhorta terriblemente al pueblo utilizando un ejemplo del reino animal para ilustrar su necedad, el Señor resalta el instinto de un buey el cual sabe para quién trabaja y de un asno el cual sabe dónde tiene comida por encima de Israel, que no entiende a quién debería servir y no tiene conocimiento de quién es el que les brindaba las bendiciones como pueblo. (La revelación general del Señor nos es útil para aprender de nuestro creador y sus impresiones morales que ha dejado en ella)

Explicación del pasaje

Es en ese contexto de exhortación profunda que llegamos a nuestro pasaje, el cual dice:

Isaías 1:4 RVR60

4 ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.

Nuestro pasaje enseña principalmente:

Una serie de veredictos de parte del Señor hacia Israel, declarando que son:

Gente pecadora: Es decir, que los que traicionaron al Señor no fueron 1 o 2 sino una muchedumbre, prácticamente el pueblo en su totalidad.

Pueblo cargado de maldad: Es decir, que los pecados no eran pocos, sino muchos, porque estaban “cargados” de maldad. Por años habián llenado su prontuario de pecados.

Generación de malignos: Estos descendientes del pueblo del pacto, aquel pueblo que había sido sacado de Egipto y cuidado por el Señor hasta entrar a la tierra prometida, ahora son unos “buenos para nada” para con el Señor.

Hijos depravados: Es decir, descendientes de Abraham corruptos, que por generaciones se habían ido degradando más y más.

El motivo de los terrible veredictos de parte del Señor hacia Israel.

Dejaron al Señor y se volvieron atrás, es decir:

Dejaron de adorar al Señor como Él había establecido (Isa1.11-15)

Dejaron de considerar seriamente los términos del Pacto hecho por sus padres en el Sinaí (Dt5.27), en Moab (Dt29.9-13) y en Canaán (Josue24.14-22). Moisés mismo profetizó de este grave pecado: Dt31.29.

Para el profeta Isaías el pecado es “UNA VIOLACIÓN DEL HONOR DEL SEÑOR”, por esta razón:

Las prácticas idolátricas del pueblo son denunciadas Isa2.8-9. La verdadera grandeza del hombre consiste en el servicio honroso al señor, al ser abandonado este servicio por la idolatría se produce una degradación universal.

Se habla del orgullo como un prominente pecado en Israel. Denuncia las miradas altivas del hombre y la soberbia de los hombres y las mujeres Isa2:11-12. El orgullo es un pecado satánico ya que en su esencia es una forma de auto deificación, en isaías encontramos un tipo de satanás en el rey de babel Isa14.12

También reprende el pecado de la avaricia y la opresión ya que el pueblo de Israel pasó de ser una sociedad agrícola a codiciar propiedades territoriales de sus hermanos, esto también es reprendido por el señor. Isa 3.13-15

Provocaron a Ira, es decir, desafiaron deliberadamente los estatutos del Señor, sabían lo que estaban haciendo y aún así prosiguieron con su maldad. El Señor nuestro Dios no tiene comunión ni lugar para el pecado en Él, el Señor está airado con el pecador todos los días de su vida, la ira del Señor es Santa, es decir, aborrece lo malo, al pecado.

Exposición doctrinal

El pecado

Al haber expuesto y meditado en nuestro pasaje, es menester profundizar en lo que la palabra pecado implica desde las escrituras, para lo cual veamos:

Significado

Tanto en el hebreo como en el griego de la Biblia, pecado significa “errar en el blanco” - Jatta y Hamartia correspondientemente. Aplicando este significado al contexto bíblico, se puede decir que el pecado es “errar en lo que el Señor nos pone por obejtivo como criaturas suyas”

Confesionalmente podeos también definir al pecado.

Los estándares de Westminster y la forma de gobierno de Westminster EL CATECISMO MENOR

P. 14. ¿Qué es el pecado?

R. El pecado es cualquier falta de conformidad con la ley de Dios, o transgresión de ella.

Ahora bien ¿qué tiene que ver el pecado con nosotros? ¿es tan grave como la Biblia nos presenta?

Origen

El origen del pecado no es en Dios Stg1.13 “13 Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie;”

El Origen del pecado proviene del corazón mismo de satanás Isa14.13 “13 Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte;”

Satanás es el que peca desde el principio 1Jn3.8 “8 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.”

Adán siendo comisionado a guardar el huerto del Señor, el templo del Señor, el lugar concetrado de adoración, erra en lograr ese cometido, cediendo ante la tentación de la serpiente que es satanás al comer del árbol probatorio y quebrantando el pacto de obras, cayendo así del estado de: Conocimiento, justicia y santidad en el cual había sido creado.

Implicancias

Al Adán caer en el huerto, sumió a toda su posteridad en el pecado por lo que bíblicamente podemos decir que “no nos hacemos pecadores, sino que nacemos pecadores” Rom5.12 “12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.”

Ese es nuestro estado natural, el pecado es parte de nosotros Gn6.5 “5 Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.”

Hay expresiones muy fuertes sobre nuestro estado de pecado comparándolo con una enfermedad terrible Isa1.6 “6 Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.”

Consecuencias

La consecuencia del pecado es la muerte, esa es la explicación del porqué morimos. No morimos porque simplemente sea un hecho natural y que completamos el ciclo de la vida, esa es una visión naturalista del ser humano, no bíblica. Amados, morimos porque somos pecadores.

La palabra muerte en la palabra del Señor hace referencia a 3 estados

Muerte espiritual Ef2.1 “1 Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,”

Muerte física Gn 25.8 “8 Y exhaló el espíritu, y murió Abraham en buena vejez, anciano y lleno de años, y fue unido a su pueblo.”

Muerte eterna Ap21.8 “8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.”

Determinación divina en contra del pecado

El Señor juzgará el pecado Ap20.12 “12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.”

Aplicaciones

A modo de Exhortación ¿Cómo consideras el pecado en tu vida diaria?

¿Estás consciente de su significado?

¿Estás consciente de su origen?

¿Estás consciente de sus implicancias?

¿Estás consciente de sus consecuencias?

A modo de corrección doctrinal: El pecado no es una palabra inventada para asustar ni para controlar a los pueblos, sino que es una palabra que nos describe exactamente con perfección.

A modo de instrucción: Sigamos leyendo a los profetas como aquellos voceros autorizados del Señor que anuncian el pecado del pueblo

Evangelio: Israel solo podía salvarse por medio del favor inmerecido de Dios, por medio de la gracia, por medio del mesías del cual hablaba el profeta. Hoy de la misma manera, hago eco a las palabras del profeta Isa1.4 “4 ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás.” y aquí me dirijo a dos grupos:

Los hipócritas dentro del pueblo

Los inconversos

Rom5.17-19 “17 Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia. 18 Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida. 19 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos.”

Conclusiones

Los profetas continúan revelando más del plan eterno del Señor, ya que si bien vemos los terribles actos de Israel, es el Señor mismo quien brinda más revelación sobre su mesías.

Isarel es un ejemplo de cómo el pecado aún pude influenciar en la vida del pueblo del pacto con consecuencias terribles.

El juicio viene por el pecado del pueblo, esto es, la ruptura del pacto.