Sermón sin título (2)
Pues de Su plenitud todos hemos recibido, y gracia sobre gracia.
Y Él me ha dicho: «Te basta Mi gracia, pues Mi poder se perfecciona en la debilidad». Por tanto, con muchísimo gusto me gloriaré más bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en mí.
por cuanto todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios.
24 Todos son justificados gratuitamente por Su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús
Nosotros somos judíos de nacimiento y no pecadores de entre los gentiles.
16 »Sin embargo, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino mediante la fe en Cristo Jesús, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús, para que seamos justificados por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley. Puesto que por las obras de la ley nadie será justificado.
17 »Pero si buscando ser justificados en Cristo, también nosotros hemos sido hallados pecadores, ¿es Cristo, entonces, ministro de pecado? ¡De ningún modo!
18 »Porque si yo reedifico lo que en otro tiempo destruí, yo mismo resulto transgresor.
19 »Pues mediante la ley yo morí a la ley, a fin de vivir para Dios.
20 »Con Cristo he sido crucificado, y ya no soy yo el que vive, sino que Cristo vive en mí; y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo por la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
21 »No hago nula la gracia de Dios, porque si la justicia viene por medio de la ley, entonces Cristo murió en vano
Pero Dios, que es rico en misericordia, por causa del gran amor con que nos amó,
5 aun cuando estábamos muertos en nuestros delitos, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia ustedes han sido salvados),
6 y con Él nos resucitó y con Él nos sentó en los lugares celestiales en Cristo Jesús,
7 a fin de poder mostrar en los siglos venideros las sobreabundantes riquezas de Su gracia por Su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.
8 Porque por gracia ustedes han sido salvados por medio de la fe, y esto no procede de ustedes, sino que es don de Dios;
9 no por obras, para que nadie se gloríe
impidiéndonos hablar a los gentiles para que se salven, con el resultado de que siempre llenan la medida de sus pecados. Pero la ira de Dios ha venido sobre ellos hasta el extremo.
17 Pero nosotros, hermanos, separados de ustedes por breve tiempo, en persona pero no en espíritu, estábamos muy ansiosos, con profundo deseo de ir a verlos
Pero la gracia de nuestro Señor fue más que abundante, con la fe y el amor que se hallan en Cristo Jesús
Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y Su amor hacia la humanidad,
5 Él nos salvó, no por las obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a Su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo,
6 que Él derramó sobre nosotros abundantemente por medio de Jesucristo nuestro Salvador,
7 para que justificados por Su gracia fuéramos hechos herederos según la esperanza de la vida eterna.
Cuídense de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz de amargura, brotando, cause dificultades y por ella muchos sean contaminados.