Hechando Fundamentos en nuestra vida Espiritual
HECHAANDO FUNDAMENTOS SOLIDOS EN NUESTRA VIDA ESPIRITUAL
Lucas 6.46-49 ¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo? 47Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante. 48Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca. 49Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; contra la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó, y fue grande la ruina de aquella casa.
El que un producto no nos funcione no quiere decir que no sea bueno, porque hay productos que son muy buenos pero no dan los resultados esperados debido al mal uso.
Todos sabemos de productos muy buenos que con toda confianza los podemos recomendar y después de que un producto ya se dio a conocer no tenemos que ofrecerlo mas por que el solo se recomienda debido a sus buenos resultados.
Necesitamos que se nos digan o hagan las cosas a menudo para que no se nos olviden.
Actuamos indebidamente cuando estamos bajo la presión del la envidia y el egoísmo: Saúl contra David.
Cuando aprendemos a actuar como realmente tenemos que actuar no solo pensamos en nosotros mismos sino que pensamos también en nuestro prójimo. LA REYNA ESTER
Juan 13:34 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. 35En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
si los seguidores de Cristo no se demuestran amor unos a otros, dan causa para sospechar de su sinceridad.
2 Corintios 5.17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Santiago 1.22-27 22Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. 23Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. 24Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. 25Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
26Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. 27La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.