El Propósito de la Elección Soberana
En última instancia, ¿Cuál es el propósito de la Elección del Padre? ¿Con qué fin ha escogido Dios a algunos de entre la humanidad caída para ser salvos y otorgarlos como propiedad para Cristo?
Esta elección es un propósito inmutable de Dios por el cual El, antes de la fundación del mundo, (a) de entre todo el género humano caído por su propia culpa, de su primitivo estado de rectitud, en el pecado y la perdición, predestinó en Cristo para salvación, por pura gracia y según el beneplácito de Su voluntad, (b) a cierto número de personas, no siendo mejores o más dignas que las demás, sino hallándose en igual miseria que las otras, y puso a Cristo, también desde la eternidad, por Mediador y Cabeza de todos los predestinados, y por fundamento de la salvación. Y, a fin de que fueran hechos salvos por Cristo, Dios decidió también dárselos a él (c) , llamarlos (d) y atraerlos (e) poderosamente a Su comunión por medio de Su Palabra y Espíritu Santo, o lo que es lo mismo, dotarles de la verdadera fe en Cristo, justificarlos, santificarlos y, finalmente, guardándolos poderosamente en la comunión de Su Hijo, (f) glorificarlos (g) en prueba de Su misericordia y para alabanza de las riquezas de Su gracia soberana.
1.-Para hacernos santos y sin mancha delante de Él.
2.-Para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo.
3.-Para alabanza de la gloria de su gracia.
La sana doctrina es para la adoración lo que la madera es para un fuego. Si quieres una hoguera ardiente que dure toda la noche, apilas leños secos y compactos. Así también, la sana doctrina enciende nuestra adoración.