Israel estaba a punto de entrar en la Tierra prometida. Había sido librados de las potencias más grandes de su época para enfrentarse a las siguientes grandes potencias de la próxima época.
Un pueblo lleno de simples pastores y constructores tenía cero posibilidad de enfrentarse a estas naciones tan avanzadas militarmente.
La única base que tenían los hebreos era la base espiritual, la seguridad en la acción liberadora de Dios.
Las opciones
Naturalmente, más allá de un choque de espadas, habría un choque de culturas. Desde lo social, ético, moral y religioso, los hebreos se encontrarían ante una población mucho más pagana y sanguinaria que la egipcia.