El Dios no conocido

Hechos 17:29–32

“29Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres. 30Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; 31por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.

32Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Ya te oiremos acerca de esto otra vez.”

Introducción

Grecia y su capital Atenas, eran conocidas como el centro del intelecto, la cultura y la cuna de grandes filósofos como Sócrates, Platón y Aristóteles.

Pablo en su 2do. viaje misionero se vio forzado a viajar a Atenas, separado de sus compañeros Silas y Timoteo, debido a la persecución de los judío de Tesalónica y Berea.

El espíritu de Pablo se enardecía (sentía dolor, indignación) al ver la idolatría de la ciudad, estaban cegados por su intelecto.

Por tal razón Pablo no desaprovechó la oportunidad de compartirles el evangelio, lo hacía todos los días.

Pablo también era un intelectual, pero no le interesaba debatir estos temas sino compartir el evangelio.

Entre los dioses ellos tenían un altar vacío dedicado al Dios no conocido, y aprovecha esta puerta para presentarles el evangelio.

Su excesiva idolatría es evidencia de su insatisfacción.

Los filósofos

Estos intelectuales se hacían llamar filósofos, lo que significa: amor a la sabiduría. [fileîn] amar y [sofía] sabiduría. entre ellos estaban los epicúreos y los estoicos.

Epicúreos

Su fin supremo según ellos, era alcanzar la felicidad por cualquier medio, procuraban disfrutar el presente y no preocuparse del futuro.

Hoy en día muchas personas tienen esta filosofía, disfrutar el tiempo presente sin preocuparse de su alma.

Lucas 12:16–20 “16También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. 17Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? 18Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; 19y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. 20Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?”

Estoicos

adoraban muchos dioses, con tendencia panteísta. Los adoraban según su sentir y conveniencia.

Muchos dicen agradar a Dios y dicen vivir haciendo lo bueno, pero son guiados por los sentimientos, usan la Palabra de Dios según su les convenga, se conducen a sus gustos como los estoicos. No obedecen la Palabra de Dios.

Jeremías 17:9 “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”

Salmo 119:105 “Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino.”

A este tipo de personas les predicó Pablo, las cuales todavía existen en medio de nosotros.

El Dios no conocido

Ante los muchos dioses, Pablo presenta al Dios como:

Creador del cielo y de la tierra, por lo tanto Señor sobre todo. Superior a cualquier otro dios. Hechos 17:24 “El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay...”

No puede morar en templos, no necesita que le den mantenimiento. Hechos 17:24 “...siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas”

Creó a todos los hombres, no hay raza superior. Hechos 17:26 “Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación”

Dios no está alejado de su creación, está cerca. Hechos 17:27 “para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.”

Si somos linaje suyo, el ser humano es hecho a imagen y semejanza de Dios. Hechos 17:28 “Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.”

El ser humano debe buscar recuperar la imagen de Dios, y no pretender rebajar a Dios haciéndolo a imagen del hombre.

El mensaje

Dios MANDA a todos los hombres al arrepentimiento (v.30)

Hechos 17:30 “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan”

Dios ha sido paciente con la humanidad, porque no quiere que nadie se pierda.

2 Pedro 3:9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”

Porque vendrá un día de juicio. Hechos 17:31 “por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.” El mensaje del evangelio es de advertencia pero también de esperanza.

Cristo pagó el precio de nuestra salvación para que seamos libres del castigo eterno.

La garantía de esta verdad es que Cristo resucitó de entre los muertos.

Conclusión

Los atenienses que escucharon el mensaje y tomaron sus decisiones.

Hechos 17:32-34 “Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, (1)unos se burlaban, y (2)otros decían: Ya te oiremos acerca de esto otra vez. Y así Pablo salió de en medio de ellos. (3)Mas algunos creyeron, juntándose con él; entre los cuales estaba Dionisio el areopagita, una mujer llamada Dámaris, y otros con ellos.”

Unos, como Dionisio y Damaris, entregaron su vida a Cristo. (v.34)

Otros, indecisos, preferían oír a Pablo en otra ocasión, algunos ya no la tuvieron.

Pero otros, se burlaron y despreciaron la Palabra de Dios, el rechazo los convierte en transgresores.

Pablo presentó a los atenienses al Dios no conocido, que ahora lo conocían, por tanto ya no tenían excusa.

Hoy se predica la Palabra de Dios en todos los medios, ¿Qué harás? Aprovechará la oportunidad que tiene, la despreciará.

Es mejor prestar atención a la Palabra de Dios hoy, reconocer al Dios grande que hizo los cielos y la tierra, y vivas conforme a su voluntad escrito en la Palabra.