Consejo y oración para hoy

25 de julio

Génesis 9:16 RVR60

Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con toda carne que hay sobre la tierra.

Cuando hay problemas en una relación de carácter matrimonial o laboral es bueno contar con un contrato que garantice los beneficios que se han pactado en la relación se cumplan. El arco en las nubes sería la muestra visible del compromiso de Dios de asegurar la permanencia de la raza humana.

Para Dios fue importante marcar el inicio de su relación con Noé con un pacto, para dar seguridad al cumplimiento de ese pacto de parte de él, Dios puso una señal el arco iris en el cielo que garantizaría a Noé que nunca más vivirían una experiencia tan terrible.

Para nosotros deberían ser de igual importancia los pactos. Un pacto delante de Dios debe marcar una relación tan importante como lo es el matrimonio, lo cual debe ser testificado en el altar y los anillos que presentan los contrayentes son las señales de ese pacto.

Mucho más importante aun, es el pacto que mediante la sangre de Jesucristo fue sellado para nuestra redención, señal de ese pacto es la copa de la cual tomamos durante la cena del Señor.

El pacto con Dios aseguraba para Noé y su familia, su protección, provisión y permanencia en la tierra. El pacto de Dios con nosotros por medio de Jesucristo nos asegura sobre todo la vida eterna. Pero también por medio de su compañía permanente por su Espíritu Santo nos provee guía, consolación, gozo, y su provisión y cuidado amoroso.

Dios quiere que yo tenga la seguridad que el pacto que he establecido con él tiene garantía de cumplimiento eterno y puedo disfrutar, por medio de él, los privilegios que me ofrece si vivo bajo en sujeción a su pacto.

Si mi relación con Dios esta establecida sobre parámetros tan firmes, mi llamado a cumplir mi responsabilidades del pacto deben ocupar una alta prioridad.

Yo he aceptado vivir de acuerdo al pacto de gracia por el cual he sido salvado de la condenación eterna, Cristo es el medio que Dios ha provisto para el perdón de mis pecados, He sido puesto en una nueva posición como hijo de Dios y ese debe ser la razón principal para adorarle con gratitud.

Oremos,

Padre, por tu deseo de que yo tuviera una relación especial contigo me has colocado en una posición desde la cual puedo estar seguro que tengo un pacto contigo.

Gracias por que aunque no soy merecedor de tal posición y privilegio tu me has pagado en Cristo el derecho de ser llamado tu hijo, heredero de ese pacto.

Hoy te pido que puedo yo cumplir con la parte que me corresponde de ese pacto: Vivir en fe y obediencia a tu Palabra Santa.

También oro por aquello que necesitan tener seguridad que lo que tu has prometido lo cumplirás, los que necesitan acercarse a tu altar con plena certidumbre de fe, en humildad.

En el nombre de Jesús, amén.

Para consejo y oración escribe a: [e-mail]