Consejo y oración para hoy

11 de agosto

Éxodo 20:14 RVR60

No cometerás adulterio.

El adulterio es una de las practicas pecaminosa mas comunes entre los seres humanos.

Transgredir este límite que Dios estableció, es una gran tragedia, por sus severas consecuencias. Las personas ponen en riesgo todo lo que han construido a lo largo de la vida : matrimonio, familia, ministerio, respeto, honor cuando cometen adulterio.

Evitar caer en esta tentación que puede volverse casi imposible de vencer, debe ser la preocupación permanente en la pareja. Alimentar el compromiso mutuo, la intimidad sexual, atracción el uno al otro, amistad y compañerismo complementará un matrimonio formado en el temor de Dios.

Dios diseño el matrimonio para la fidelidad, cuando nuestros corazones son vencidos por el adulterio él nos invita a buscar la sanidad de un corazón que ha sido envenenado por una decisión egoísta y el de otro corazón que ha sido herido y traicionado.

Mantener mi manantial limpio, y disfrutar de beber las agua solo de las fuentes de mi pozo es el consejo que Dios me da para un matrimonio feliz.

El adulterio solo se alimenta cuando hay un corazón egoísta, hostil, ansioso de satisfacer sus pasiones pecaminosas que se encuentra con otro corazón lleno de celos y contiendas, sin deseos de comunicarse y ofrecer abrigo y consuelo amoroso.

Oremos,

Padre aunque mi corazón es engañoso e infiel tu lo has transformado para que sea fiel a ti y a mi cónyuge, santificame cada día en tu verdad, para ser fuerte frente a la tentación.

Gracias porque me permites tener una relación matrimonial en la cual tu has estado interesado desde el momento que hicimos un pacto en el altar y no nos dejas de amar a pesar de tener que soportar la tentación y sufrir las caídas que han producido dolor en nuestras vidas pero que tu Espíritu ha sanado por tu gracia.

Cada día enfrento el desafío de disfrutar un matrimonio lleno de amor, comprensión, compromiso y fidelidad, los recursos que poseo son limitados por lo que te pido llenes cada día la fuente que alimenta nuestro matrimonio.

El adulterio es el asesino silencioso por quien muchos están sufriendo; esposos y esposas en desgracia, sufriendo por culpabilidad, traición y separación, oro por esas vidas que solo han encontrado consuelo en sus lagrimas y soledad para que puedan reconstruir sus vidas, matrimonios y familias con la gracia que solo se encuentra en Jesús mediante el perdón y la restauración.

Te lo pido en el nombre de Jesús, amén.

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