Expectativa vs Realidad

Juan 12:12–19 NBLA

12 Al día siguiente, cuando la gran multitud que había venido a la fiesta, oyó que Jesús venía a Jerusalén, 13 tomaron hojas de las palmas y salieron a recibir a Jesús, y gritaban: «¡Hosanna! Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel». 14 Jesús, hallando un asnillo, se montó en él; como está escrito: 15 “No temas, mira, Sión; he aquí, tu Rey viene, montado en un pollino de asna». 16 Sus discípulos no entendieron esto al principio, pero después, cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que esto se había escrito de Él, y de que le habían hecho estas cosas. 17 Y así, la multitud que estaba con Jesús cuando llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos, daba testimonio de Él. 18 Por eso la multitud fue también a recibir a Jesús, porque habían oído que Él había hecho esta señal. 19 Entonces los fariseos se decían unos a otros: «¿Ven que ustedes no consiguen nada? Miren, todo el mundo se ha ido tras Él»

I. Introducción al evento de la entrada triunfal

Juan 12:12 NBLA

12 Al día siguiente, cuando la gran multitud que había venido a la fiesta, oyó que Jesús venía a Jerusalén,

A. Contexto histórico y geográfico

Mostrar el mapa y explicar el recorrido.

B. Mención de la multitud que se congrega

Multitudes que lo siguen desde betania

Multitudes que ya estaban en Jerusalen debido a la pascua.

II. La recepción del pueblo

Juan 12:13 NBLA

13 tomaron hojas de las palmas y salieron a recibir a Jesús, y gritaban: «¡Hosanna! Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel».

III. Cumplimiento profético y reconocimiento mesiánico

Juan 12:14-15

Juan 12:14–15 NBLA

14 Jesús, hallando un asnillo, se montó en él; como está escrito: 15 “No temas, mira, Sión; he aquí, tu Rey viene, montado en un pollino de asna».

A. Citación de la profecía de Zacarías 9:9-10

Zacarías 9:9–10 NBLA

9 ¡Regocíjate sobremanera, hija de Sión! ¡Da voces de júbilo, hija de Jerusalén! Tu Rey viene a ti, Justo y dotado de salvación, Humilde, montado en un asno, En un pollino, hijo de asna. 10 Destruiré el carro de Efraín Y el caballo de Jerusalén, Y el arco de guerra será destruido. Él hablará paz a las naciones, Y Su dominio será de mar a mar, Y desde el Río hasta los confines de la tierra.

B. Reflexión sobre cómo Jesús cumple las Escrituras

C. Aclamación de Jesús como Rey y Mesías

Contraste de expectativas y realidades

Para los discípulos

Juan 12:16 NBLA

16 Sus discípulos no entendieron esto al principio, pero después, cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que esto se había escrito de Él, y de que le habían hecho estas cosas.

A. Destaque de cómo los discípulos no comprendieron inicialmente

B. Importancia de la posterior comprensión después de la resurrección

Para las multitudes

Juan 12:17-18

Juan 12:17–18 NBLA

17 Y así, la multitud que estaba con Jesús cuando llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos, daba testimonio de Él. 18 Por eso la multitud fue también a recibir a Jesús, porque habían oído que Él había hecho esta señal.

A. Exploración de la reacción de la multitud y su motivo

B. Consideración de cómo algunos esperaban un reino político

Para los Fariseos

Juan 12:19 NBLA

19 Entonces los fariseos se decían unos a otros: «¿Ven que ustedes no consiguen nada? Miren, todo el mundo se ha ido tras Él»

El lamento de Jesús por la mala comprensión que hubo de él.

Lucas 19:41–42 NBLA

41 Cuando Jesús se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella, 42 diciendo: «¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos.

V. El propósito de la llegad de Jesús

El propósito de la llegada de Jesús no es que sea proclamado como REY. Porque él no vino como Rey de Israel.

El vino como siervo humilde de paz para sacrificarse y para ser puesto en lo más alto como REY ABSOLUTO DE LA ETERNIDAD Y EL REY DE TODO EL PUEBLO DE DIOS DE TODA LENGUA Y DE TODA NACIÓN.

El Señor dijo, soy Rey, pero mi reinado no es de este mundo. El propósito del Señor era cumplir la profecía, además era exponerse de tal manera para que esto diera pie a los eventos futuros.

Los eventos de su captura, su condenación, su sufrimiento, su muerte y su RESURRECCIÓN.

Era necesario provocar esto en el pueblo en este momento, a esta hora en este lugar, con esta cantidad de gente siendo testigos.

VI. Aplicación personal y espiritual

(Aplicación durante la predicación)

A. Reflexión sobre cómo vemos a Jesús en nuestras vidas

¿Lo vemos como un Rey Terrenal?

¿Lo vemos como un personaje histórico sin poder alguno en la actualidad?

¿Lo vemos como alguien al servicio de nosotros?

¿Lo vemos como el apaga incendios?

De acuerdo a la forma en que veamos a Jesús, así serán nuestras expectativas de nuestra relación con él, así serán las expectativas de nuestra oraciones

B. Consideración de nuestras expectativas y comprensión de su realeza

Ejemplos

Ellos esperaban un rey que los liberar de roma

Nosotros esperamos que Jesús nos libere de una condición terrenal, de la enfermedad, de un trabajo, de una condición económica, de una situación familiar.

Esas cosas pueden pasar y el Señor también las hace y las puede hacer. Pero son SEÑALES NADA MÁS. NO ES EL REINO.

SON SEÑALES DEL REINO VENIDERO, EL VINO PARA SALVARTE DE TU CONDICIÓN Y SANTIFICARTE PARA ESTAR EN EL REINO VENIDERO.

C. Relación entre la entrada triunfal y el propósito redentor de Jesús

La entrada triunfal de Jesús tiene un propósito más grande que la celebración y que lo terrenal.

La exaltación terrenal solo era un paso para el cumplimiento de algo más grande.

El propósito redentor de Jesús iba más allá de Israel.

Jesús no solo quiere salvar a Israel, no solo quiere liberar a los judíos, su obra trasciende las fronteras, trasciende los tiempos, trasciende las culturas, trasciende los idiomas, su obra trasciende lo terrenal.

SU OBRA ES DE SALVACIÓN DE LOS PODERES ESPIRITUALES Y ETERNOS.

Veamos a Jesús como el Salvador de mi condición de pecado, el Salvador de mi muerte espiritual y física. El Redentor que restaura mi relación con Dios, que pagó un precio, una vez y para siempre para vivir en su casa para siempre.

SI Jesús hubiera sido un Rey Terrenal, tendría que seguir realizando conquistas y ganando cosas terrenales como lo hicieron los reyes anteriores y esa forma no fue suficiente para una salvación completa e integral.

La conquista de Jesús se hizo una vez y para siempre. Y fue tan poderosa que no resuelve los problemas de esta tierra sino que ahora ha preparado una nueva tierra y un nuevo cielo donde se ubica su reinado donde gobierna eternamente y donde estaremos un día cuando él nos llame para ir a su reinado.

Así como las multitudes adoraron al Rey, nosotros debemos adorarlo pero entendiendo el plan de Jesús, entendiendo su reinado y entendiendo su propósito, con la mirada puesta en lo eterno y no en lo terrenal. PORQUE CRISTO REINA EN LO ETERNO.

BENDITO SEA EL REY DE LO ETERNO, EL REY DE LA SALVACIÓN, EL REY DE TODA GLORIA.