Una iglesia saludable, entiende bíblicamente el evangelismo.

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Si somos una iglesia saludable, la cultura de evangelización estará en nosotros.

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INTRODUCCIÓN:

¿Cómo podemos saber que somos una iglesia saludable?
Hay varias marcas o distintivos que identifican una iglesia saludable, entre ellas:
Una predicación expositiva de la palabra de Dios.
Una teología bíblica.
Un entendimiento Bíblico de la conversión,
Un entendimiento bíblico del evangelio.
Es importante considerar que cuando una iglesia no enseña, ni practica la Biblia, y la sana doctrina se vuelve una iglesia enferma.
Siempre tenemos que preguntarnos:
¿Cómo se ve una iglesia enferma?
1. Es una iglesia donde las predicas suelen girar alrededor de frases repetidas y sin fuerza o novedad.
2. Es una iglesia centrada en sí misma, llega a ser moralista.
3. Ven el evangelio, como una “auto-ayuda espiritual”
4. Consideran la conversión como un acto de voluntad humana.
5. Su cultura es indistinguible de la cultura secular que les rodea.
Una iglesia que ha sido vulneralizada con estos virus que hacen daño a su salud, lamentablemente se vuelve una congregación que no anuncia las tremendas noticias del evangelio.
Una buena pregunta que debemos respondernos hoy es:
¿Cómo es que una iglesia llega a tener como marca el entendimiento bíblico del evangelismo?
Vamos a ver TRES aspectos relacionados al evangelismo que al estar presentes en la iglesia, muestran el grado de salud que esta tiene.
El primero aspecto es que..

I. TODO COMIENZA CON LA COMPRESIÓN DE LA NUESTRA CONVERSIÓN.

Si entendemos que cuando venimos a Cristo, y le recibimos como nuestro Señor y Salvador, es solamente obra de Dios, en nuestras vidas y que lo único que nosotros hemos hecho es ser sensibles al mensaje de Dios, y nos hemos arrepentido de nuestra vieja manera de vivir, y hemos nacido de nuevo en Cristo, entonces, nuestras mentes han sido moldeadas por lo que la Biblia enseña acerca de Dios y como Él trabaja.
De igual manera entendemos lo que la Biblia enseña sobre el evangelio y sobre lo que todos los pecadores necesitamos urgentemente.
Cuando esto ocurre tendremos como resultado una adecuada comprensión del evangelismo, y no solo eso, sino que vamos a comprometernos a impulsar el evangelismo, y no va a ser a través de métodos y formas de cómo evangelizar, sino que será por el aprender y meditar en el evangelio mismo.
Si entendemos el evangelio, y entendemos nuestra conversión podremos ser conscientes de lo esencial que ha sido para nosotros recibir la salvación por gracia.
Seremos consientes de la enseñanza de Pablo a la iglesia en Éfeso:
Efesios 2:8–9 RVR60
8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe.
Y tomaremos la actitud de la mujer samaritana, cuando conoció a Jesús y él le habló de su vida:
Juan 4:28–29 RVR60
28 Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a los hombres: 29 Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ¿No será éste el Cristo?
Cuando comprendemos correctamente nuestra conversión, entendemos que nos hemos encontrado con el Salvador Jesucristo, quien conociendo nuestra manera pecaminosa de vivir, aun así nos llama, nos habla y nos ofrece salvación, entonces, vamos a salir por donde quiera que vayamos hablando de Él.
Pero la conversión entonces va más allá del esfuerzo humano por generar una confesión verbal, sino que por un encuentro genuino que implica el corazón del hombre y la transformación de la mente, que produce resultados observables y concretos en su vida, hasta el punto de querer que otros experimenten lo mismo que ha ocurrido en su vida.
Ahora si la iglesia no tiene una comprensión bíblica de la conversión y del evangelismo, en la iglesia vamos a tener de forma notable un número mayor de membresía que de asistencia.
El hermano Mark Denver, en su libro nueve marcas de una iglesia saludable, escribe:
La iglesia debe detenerse y preguntarse, ¿por qué su evangelismo produce un número tan grande de miembros que nunca asisten, pero que se sienten seguros de su salvación. ¿Qué hemos dicho acerca de ser discípulos de Cristo?, ¿Qué les hemos enseñado sobre Dios, el pecado y el mundo? Mark Denver.
Hermanos para ser una iglesia saludable, tenemos la responsabilidad de enseñar y propiciar un entendimiento bíblico del evangelismo y la conversión y viceversa.
También tenemos la responsabilidad de aprenderlo, en otro caso, no habrá cambios.
El segundo aspecto que tenemos que revisar es:

II. ENTENDER, ¿QUÉ ES EL EVANGELISTERO?

El apóstol Pablo enseña a la iglesia en Corintios, en 2 Corintios 5:11
2 Corintios 5:11 RVR60
11 Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres; pero a Dios le es manifiesto lo que somos; y espero que también lo sea a vuestras conciencias.
Pablo dice, que debemos persuadir a los hombres, a los incrédulos y esto hermano da la idea de rogar a los incrédulos, por amor a para que vengan a conocer a Jesucristo.
Eso será mediante la manifestación de la verdad. 2 Corintios 4:2 así lo enseña:
2 Corintios 4:2 RVR60
2 Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios.
Debemos enseñar la verdad, debemos vivir en esa verdad, eso significa dice Pablo que hemos renunciado a lo oculto y lo vergonzoso, para vivir en la verdad de Cristo, y anunciarla.
Nosotros anunciamos el evangelio, y por ende al anunciarlo lo que hacemos es llevar el mensaje, el evangelismo entonces no pretende forzar a alguien a un nuevo nacimiento espiritual, eso no va a incidir como el nuevo nacimiento de Nicodemo en Juan 3, o como los Huesos secos que en Ezequiel 37 se trataban de unir para hacer una persona.
Se hace necesario que la persona oiga y entienda el mensaje del evangelio, que Pablo dice es poder de Dios para salvación en Romanos 1:16.
Romanos 1:16 RVR60
16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Hermanos, es importante entender lo que no es el Evangelismo:
Evangelismo, no es simplemente compartir un testimonio.
Evangelismo no es presentar una defensa racional de la fe.
Evangelismo no es hacer obras de caridad.
Evangelismo tampoco debe ser confundido con los resultados de la evangelización, como diciendo, hemos logrado hacer evangelismo,cuando este tiene como resultado la conversión.
Amados hermanos, Evangelismo: “Es hablar la palabra de Dios a otras personas, es que la gente conozca el mensaje de salvación que trajo Cristo a esta tierra”
Jesús dijo en Marcos 1:15
“ arrepentíos y convertíos que el reino de Dios se ha acercado”
Es anunciar las buenas nuevas de salvación de Jesús, e repetir una y otra vez, el mensaje de Romanos 10:9-10
Romanos 10:9–10 RVR60
9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Es entonces evangelismo es anunciar, que un Dios Santo ha enviado a su hijo, también santo para que muriera y resucitara en la cruz, para que personas pecadoras como nosotros, viniéramos al arrepentimiento y tuviéramos una conversión genuina en nuestras vidas.
Y si vamos a dar un testimonio, debemos dar este testimonio de 1 Juan 5:9-12
1 Juan 5:9–12 RVR60
9 Si recibimos el testimonio de los hombres, mayor es el testimonio de Dios; porque este es el testimonio con que Dios ha testificado acerca de su Hijo.10 El que cree en el Hijo de Dios, tiene el testimonio en sí mismo; el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo.11 Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo.12 El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.
Amados, necesitamos tener una idea clara de lo que es el evangelismo y la evangelización Bíblica para que nuestra iglesia sea una iglesia saludable.
El tercer aspecto que debemos considerar relacionado al evangelismo es:

II. NECESITAMOS ENTENDER NUESTRA RESPONSABILIDAD EN EL EVANGELISMO.

Pablo dice en Romanos 10:14-15
Romanos 10:14–15 RVR60
14 ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? 15 ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!
Nuestra responsabilidad como cristianos, es anunciar el evangelio de Cristo, es que la gente conozca el evangelio, nuestra responsabilidad, es predicarles, no tenemos excusas, porque ya hemos sido enviados y comisionados por el Señor.
Mateo 28:19–20 RVR60
19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Jesús nos dio su espíritu para que fuéramos testigos de Él.
Hechos de los Apóstoles 1:8 RVR60
8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.
Es importante que consideremos que,
¡Una iglesia saludable, tiene una cultura de evangelismo!
Una vez más cito al hermano Mark Denver, que en su libro “La evangelización”, enseña 11, características principales de una iglesia que tiene una cultura de evangelismo:
1. Una iglesia motivada por el amor a Jesús y su evangelio. (2 Co. 5:14-15).
2. Una iglesia que confía en el evangelio. (Ro. 1:16).
3. Una iglesia que entiende los peligros del entretenimiento. (Ez. 33:30-32).
4. Una iglesia que ve a la gente claramente. (2 Co. 5:16a).
5. Una iglesia que trabaja unida en la misma dirección. (Fil. 1:3-5).
6. Una iglesia en la que las personas se enseñan unas a otras. (2 Ti. 1:13).
7. Una iglesia en la que se da ejemplo en la evangelización. (2 Ti. 2:2).
8. Una iglesia en la cual se celebra a quienes comparten su fe. (Fil. 2:19-22).
9. Una iglesia que sabe como afirmar y celebrar la nueva vida. (Col. 1:3-4, 7).
10.Una iglesia que tiene un ministerio que se siente arriesgado y peligroso. (Fil. 1:12-13).
11.Una iglesia que entiende que la “iglesia” es el método elegido y el mejor para evangelizar. (Hch. 2:46-47).
Ahora, evaluemonos nosotros como iglesia.
¿Cómo estamos con estas características?
¿Está en nosotros la cultura del evangelio? o debemos comenzar a practicarla.

CONCLUSIÓN:

Tenemos que preguntarnos:
¿Somos una iglesia saludable?, ¿Cuán portadores somos del evangelio?
Esta vida de evangelismo, debe ser una marca en nuestra iglesia para ser una iglesia saludable.
Si esta marca no está en cada uno de nosotros, nuestra iglesia no es saludable, tenemos que revisarnos y hacer los cambios que necesitamos para comenzar a serlo.
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