Venciendo lo Invisible

A finales del los 1800’s se creía que algunos organismos surgían de la nada, se le llamó la teoría de la generación espontánea. Así explicaban la aparición repentina de algunas enfermedades que mataban a la población. Se creían actos aleatorios y fue la única forma de explicar el surgimiento repentino de enfermedades, es lo que creían científicos de la época.

Llega Luis Pasteur quien dice que no es así, sino que hay organismos invisibles al ojo humano que llevan enfermedades, viajan por el aire, en los alimentos y desmintió eso de la generación espontánea y da inicio la teoría de las enfermedades por gérmenes, micro organismos invisibles al ojo humano que impactan el mundo que sí podemos ver.

En esencia dijo que hay un mundo invisible que impacta el mundo visible, organismos que están por todos lados y pueden destruir la vida, crear las pestes, epidemias, matar millones de personas. La teoría se difunde y da inicio a las medidas de higiene como lavarse las manos antes de operar, separar a los enfermos de los sanos y ponerlos en cuarentena.

Un grupo pensó que eso era una locura ¡algo invisible que impacta nuestro mundo, imposible! además que viaja en el aire en la piel ¡eso no puede ser! Pasteur dice ¡claro que sí!

Actualmente ¡nadie duda de esto! creemos en los germenes, creemos en ese mundo invisible y hace poco lo vivió todo el mundo. Creemos que hay cosas que aunque no vemos impactan nuestro mundo y puede poner en riesgo la vida misma. Esos micro organismos pueden destruir pueblos enteros, comunidades enteras sin verlos venir. Esto que antes era impensable ahora es evidente.

Creemos que ese mundo invisible porque no siempre quedan invisible, hacen su aparición en forma de enfermedades, al mezclarse las condiciones adecuadas ponen en riesgo la vida.

La Biblia dice que hay otro mundo invisible que no sólo impacta físicamente, sino en las relaciones, cómo pensamos, cómo vemos el mundo, nuestra actitud ante las circunstancias, la moral, finanzas, matrimonio ¡todas las áreas de la vida! y la pueden poner en riesgo.

Quizá alguien no lo crea, pero diría que es como estar en el siglo XIX en que no lo creemos ¡por que no lo podemos ver! pero afecta nuestra vida. Puede ser difícil de creer, pero es cierto y se necesita valor para enfrentar este mundo invisible.

Si te cuesta creer este tema, incluso como cristiano, te diré que el argumento viene en el mismo libro histórico que dice otras cosas que ¡sí creemos! cosas como: ámense los unos a los otros, conocerás la verdad y te hará libre, el que tiene fe puede mover montañas; eso sí lo creemos y en tiempos de campaña hasta los políticos usan estas frases; pues este mismo libro dice que hay un mundo invisible que impacta tu mundo visible todos los días.

No necesitas un microscopio para verlo, pero si pones atención ¡lo puedes ver! es más, quizá en tu propia vida en algunos eventos del pasado que ahora dices: ¿cómo pude ser tan tonto para hacer eso? ¿por qué lo creí? ¿por qué cometí ese error? ¿estaba ciego que no veía esa mentira? algunas etapas de tu vida confirmarán que ¡algo tuvo que influirte! porque no hay otra manera de explicar el por qué lo hiciste.

Eso del pasado, ahora puedes ver claramente que estaba mal. ¿Por qué no viste que eso que empezó como diversión se convertiría en adicción? ¿que esa persona -que todos te decían que abrieras los ojos- efectivamente, no era la correcta? En ese momento, cuando tuviste la oportunidad, lo viste como bien, sin peligros ni riesgos y ahora te das cuenta que ¡no era así! ¿cómo te engañaste?

Quizá no tienes que ir al pasado, porque ahora estás mentido en algo que sabes que no está bien, hace unas semanas, meses, parecía atractivo, pero ahora puedes ver que no es así.

Quienes te quiere te dicen que estás en un error, pero ¡lo haces de todos modos! Y te confunde que te digan eso porque tú ¡no lo puedes ver! quizá es algo de lo que te arrepentirás el resto de tu vida, pero ahora parece lógico, atractivo; eso pasa porque hay una trampa, un engaño, una estrategia, una mentira, algo que está oculto y te quiere dañar.

La Biblia da la respuesta. Hay una distorsión de la verdad que confunde lo suficiente. La distorsión no es tan obvia que veas la trampa, sólo lo suficiente para que pienses que estás haciendo lo correcto. Lo que está detrás de la distorsión es invisible y para cuando lo puedes ver, muchas veces ¡ya es demasiado tarde!

Lo interesante es que no todos caen en esas trampas, no todos compran esas mentiras ¿por qué unos sí y otros no? ¿por qué algunos pueden ver ese mundo invisible? Si es posible detectarlo ¡queremos ser de ese grupo! tener esa seguridad, esa libertad. Porque ese mundo se puede ver, pero sólo por los valientes.

Alguno dirá: los cristianos me caen bien, pero cuando empiezan hablar de esas cosas ¡me pierden! no lo creo, creo eso de amar a los demás, pero ¡no esto! La respuesta es, si crees lo fácil de creer de la Biblia, cuando menos detente a considerar lo que no es tan fácil, pero ¡no lo descartes!

Jesús habla de ese mundo invisible ¡nos advierte! pero la forma cómo lo dice puede que te inquiete y te haga dudar, pero no puedes negar que es verdad. En el libro de Juan Jesús habla de ese mundo invisible. Está hablando con muchos líderes religiosos; para este momento ha hecho muchos milagros, ha dado evidencia que es EL Mesías. Algunos creen en ÉL, pero los religiosos dudan y son ellos quienes debieron reconocerlo desde que empezó Su Ministerio.

Jesús les dice: después de todos los milagros ¿no me reconocen? y ellos dicen: tenemos a Abraham y a Moisés como profetas y ¡tú no eres un verdadero profeta! Jesús les responder: si fueran seguidores de Moisés y de Abraham ¡me reconocerían! porque ellos saben que YO SOY, pero ustedes no me reconocen porque no son hijos de Dios.

Jesús ha hecho muchos milagros, ha demostrado que viene de Dios que es El Mesías, pero ellos ¡no lo reconocen! Y para dejar el tema claro, Jesús les dice: esto no les va a gustar, pero les diré por qué no me reconocen.

“¿Por qué no pueden entender lo que les digo? ¡Es porque ni siquiera toleran oírme!” (Juan 8:43, NTV)

¿Acaso no entienden por que son sordos? ¡no es así! les diré la razón por la que ni me toleran:

“Pues ustedes son hijos de su padre, el diablo, y les encanta hacer las cosas malvadas que él hace...” (Juan 8:44, NTV)

Hay un malvado que los ha engañado, a pesar de toda la evidencia que han visto ¡siguen confundidos! han sido engañados. Y claro que esto es ofensivo. Ellos se creen hijos de Moisés y de Abraham y Jesús les dice ¡no es así! en realidad son hijos del diablo.

Algunos pueden decir: Jesús habla en sentido figurado, no que crea en la existencia real del diablo ¿o sí?

“...Él ha sido asesino desde el principio...” (Juan 8:44, NTV)

Por principio se refiere al Edén. Les habla de quién es su padre, en otras palabras les dice ¿sabes qué me harán ustedes? me van a detener, a llevar a un juicio injusto y me van a matar, lo harán porque ¡son de su padre el diablo y a él le gusta matar!

“...Él ha sido asesino desde el principio y siempre ha odiado la verdad, porque en él no hay verdad. Cuando miente, actúa de acuerdo con su naturaleza porque es mentiroso y el padre de la mentira.” (Juan 8:44, NTV)

Es el padre, la fuente, origen de la mentira. Jesús dice que hay una entidad que él llama diablo. Quizá tú no lo creas, pero Jesús dice que sí existe. Y que su plan es matar, ese ha sido su plan desde el principio. La destrucción de la vida humana en todas sus formas y etapas. Lo hace por medio del engaño, haciendo que eso invisible, lo descartes, no le des importancia.

Una forma como el diablo opera es distorsionando la verdad. Tiene libertad y poder para usar la mentira que lleva a la muerte. La destrucción del ser humano y lo que es valioso para él: la familia, las relaciones, la niñez, juventud, la amistad, la relación padres-hijos. Está en contra de todo lo que importa al ser humano, quiere destruir todo esto y lo hace por medio de la mentira, el engaño, confundiendo el corazón, la mente de modo que hagas algo que no está bien creyendo que ¡sí lo es! Es cuando a lo malo le llaman bueno y a lo amargo dulce.

“»No me queda mucho tiempo para hablar con ustedes, porque se acerca el que gobierna este mundo. Él no tiene ningún poder sobre mí,” (Juan 14:30, NTV)

Jesús reconoce que por un periodo de tiempo el diablo es quien gobierna este mundo. En Lucas en la narración de la tentación de Jesús vemos lo que les estoy diciendo:

“Entonces el diablo lo llevó a una parte alta y desplegó ante él todos los reinos del mundo en un solo instante. —Te daré la gloria de estos reinos y autoridad sobre ellos —le dijo el diablo—, porque son míos para dárselos a quien yo quiera.” (Lucas 4:5–6, NTV)

Él le dará a Jesús la gloria de estos reinos y autoridad ¡eso dice la Biblia! Vivimos en un mundo que ha sido puesto bajo la autoridad de quien Jesús llama: diablo, y su propósito es terminar la vida humana. No tiene control sobre todas las cosas, pero puede engañar, disfrazar la verdad, hacer que creas la mentira. Es más haciéndote creer que la verdad ¡no existe! Cada quién define la verdad como le pegue la gana.

Ahora, si bien esto puede preocupar, la verdad es que también ¡nos ayuda! porque explica muchas cosas; podemos aprender a detectar la tentación, las luchas. Nos ayuda a entender la forma cómo te relacionas con tus padres, hermanos, pareja, etc. Esto explica, por qué a veces tienes momentos de claridad pero otras tienes arrebato llenos de oscuridad.

A veces eres valiente y enfrentas la mentira y otras eres débil y ¡vives la mentira! a veces tomas buenas decisiones y otras no y te preguntas ¿por qué hice eso? ¿qué está mal conmigo? Quizá, es verdad que hay un mundo invisible que impacta, que influye tu mundo visible, quizá hay algo que no puedes ver pero impacta todo lo que vez y lo que haces.

30 años después de esta conversación, después que quienes dijeron que eran hijos de Moisés y de Abraham asesinaron a Jesús. Un hombre llamado Pablo, escribe a cristianos y les dice la mejor manera de vivir, cómo tener una buena relación con la familia, amigos, pareja, cómo hacer lo que te conviene, él lo dice así:

“Pónganse toda la armadura de Dios para poder mantenerse firmes contra todas las estrategias del diablo.” (Efesios 6:11, NTV)

Estrategias, artimañas. Pablo dice: esa entidad, tiene un plan, una estrategia ¡distorsionar la verdad! lo suficiente para destruirte, pero no tanto como para espantarte. A lo afectivo lo convierte en celos, al cariño en lujuria, la amistad en deseos de control, las emociones en adicciones, el deseo en codicia, a una opinión en la verdad.

Distorsiona la forma como la gente ve a Dios, de modo que se enojan con Dios por las decisiones que ellos han tomado y lo culpen a ÉL por sus malas decisiones: estrategia, artimaña, plan.

Descubrir esto te ayuda a ver algunas cosas del pasado en tu vida. Esos problemas con tus padres, el conflicto con el amigo, lo que pasó en el trabajo, quizá puedas descubrir lo que ha pasado en tu vida y descubras de dónde vino. Eso te permite saber en qué áreas debes pelear como valiente en lugar de correr.

“Pues no luchamos contra enemigos de carne y hueso...” (Efesios 6:12, NTV)

El problema no son tus padres, hermano, cónyuge, jefe, Pablo recuerda que no es sólo lo que vemos, sino el mundo invisible lo que afecta tu vida, un mundo invisible que impacta lo visible.

“...sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales.” (Efesios 6:12, NVI)

Pablo te creo cuando hablas del amor, de la salvación por gracia, pero ¿en el diablo? Eres inteligente, educado, pero ¡creer en el diablo es anticuado! No digas eso, escribe sobre otra cosa o vas a perder a la gente; Pablo diría: ¡claro que lo creo porque es verdad! es un asesino, mentiroso y distorsiona la verdad.

Si estás por 1a o 2a vez quizá digas ¿a esto me invitaste? por eso no me gustan estos lugares, antes que te pierda déjame decirte que entiendo tu escepticismo, porque esto ¡es invisible! además tienes tus propias explicaciones de porque la gente se vuelve adicta y ¡no necesitas al diablo para explicar tus peleas!

Hagamos un ejercicio, no es verdad que a veces ves o lees algo, te enteras de algo y dices ¡esto no puede ser! violaciones, asesinatos, pedofilia, abortos hasta el 9o mes, sexualizar la niñez; y por más que quieres explicarlo ¡no se puede! es demasiado malvado que alguien planee matar ¡sólo por matar! no tiene sentido. Personas que matan a otros y ¡se las comen! Eso es super torcido ¡mal! pornografía infantil ¡mal! desaparecer toda una raza por su raza, esclavizar por su color de piel, robar niños para satisfacer a ciertas personas ¡es una vergüenza! ¡esto no puede ser real! ¡no se puede explicar!

¿Cómo puede pasar algo así? No es un ataque de rabia, sino algo planeado, sistemático, organizado ¿cómo explicarlo? No lo podemos entender es horrible y lo es porque es una estrategia.

Ahora intenta explicar esto sin el diablo, sin una estrategia. Es cierto, puede ser perturbador y no tengo todas las respuestas, pero es algo que vemos en nuestra sociedad ¡está destruyendo a la humanidad!

Exactamente ¡eso dijo Jesús!Es un asesino, lo hace por medio del engaño ¡y va a seguir! porque quiere terminar su plan. Hay un mundo invisible que impacta tu mundo visible y necesitas ser muy valiente para pelear, pero esa pelea no es con tus armas, sino con otra arma que es invisible al ojo humano, pero que es más poderosa que cualquier estrategia: La Oración.

Por eso los cristianos nos aferramos a las enseñanzas de Jesús, por eso oramos que la mentira, el engaño esté lejos de nosotros, por eso oramos que Dios nos permita ver el peligro, la necesidad.

Por eso oramos que seamos ese bastión que pelea por las familias, por los niños, las amistades, las relaciones, por eso oramos que Dios nos ayude a ver las cosas de manera diferente y responder de manera diferente, porque Dios nos ha hecho valientes y en SU Misericordia nos ha dado las herramientas para pelear en Sus Fuerzas.

Palabra de Dios

Oremos