LOS CINCO MANDAMIENTOS (UNO)

“Amen al Señor y vivan por y para Él todo el tiempo, toda la vida”

El primero y más grande mandamiento de todos es el descrito por el mismo Dios hecho carne, Jesucristo en Marcos 12:30 “30 Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.” palabras tomadas de la Ley en Deuteronomio 6:5 “5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.”

En los 5 mandamientos para el Matrimonio no podemos empezar dando otro que no sea el que Dios estableció para todo hombre en todo lugar, agregando en el amarás un plural, como un trabajo, esfuerzo y decisión que en conjunto como matrimonio realizarán para agradar al Dios que les salvó y les sustenta.

Entendamos la gramatica del texto para enteder bien qué demanda Dios de nosotros.

Deuteronomio 6:5 “Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.”

“Amarás a Jehová tu Dios” Empezamos entendiendo que no hay otro Dios fuera de Jehová, Dios en tres personas para nosotros. Él es nuestro Dios y nada ni nadie más merece tal amor que Él demanda. La palabra amor expresa tener un gran afecto, cuidado y lealtad. Se puede entender como ESCOGER a Dios para tener una relación íntima y obedecerlo en todo.

“De todo tu corazón, de toda tu alma, y con todas tus fuerzas” Cada una de estas palabras corazón, alma y fuerzas expresa el todo del hombre. Es una cooperación mutua de todo nuestro ser amando a Dios. Podríamos darle sentido a cada una al decir que el corazón expresa es asiento de los pensamientos, palabras y hechos; la mente el asiento de las emociones y actitudes, las fuerzas el poder del hombre, la capacidad.

Al juntar estas tres partes del hombres con la palabra TODO entonces nos da calaramente a enteder que el mandamiento requiere del TOTAL AMOR DEL HOMBRE HACIA DIOS un amor sincero, ardiente y enérgico.

Este amor a Dios se expresa como real no con las palabras que fácilemente podríamos pronunciar a través de un canto, una oración o una lectura; sino con los actos y como expresamos ESCOGIENDO a Dios para tener una REALCIÓN INTIMA Y OBEDIENCIA EN TODO.

Así que entendiendo esto, debemos añadir que el matrimonio al no ser una relación de uno, sino de dos, requiere de colaboración y apoyo mutuo para lograrlo.

Para efectos prácticos vamos a dividir el efectivo cumplimiento de este mandamiento en pasos para seguir en nuestro matrimonio:

Conocer a Dios. Nadie puede tener una relación intima con Dios y obedecerle si no le conoce primero. Juan 8:19 “Ellos le dijeron: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: Ni a mí me conocéis, ni a mi Padre; si a mí me conocieseis, también a mi Padre conoceríais.” Juan 14:6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Creemos por la Palabra de Dios que Jesús da a concer al Padre y que todo aquel que ha entregado su vida a Cristo conoce al Padre, y que eso involucra un llamado a la comunión con Dios 1 Corintios 1:9 “Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor.” Si usted y su cónyuge ya tuvieron un encuentro personal con Jesús entonces están listos para dar los siguientes pasos.

Relacionarse con Dios. Jamás nadie amará a Dios si no se relaciona con él. A esto le llamamos comunión con Dios. Cada día el matrimonio debe tener un tiempo con Dios, un tiempo para orar y estudiar juntos la Palabra de Dios. Muchos matrimonios toman tiempo para pasear, comprar, ver películas, hacer el amor, trabajar y otras muchas cosas más pero para lo más importante no.

Cada día deben tomar tiempo para orar juntos: Orar por las cargas, por las debilidades, por las metas y proyectos que tienen juntos, por su iglesia, por las almas perdidas, por sus hermanos en Cristo, por su líderes, por sus hijos y por todo cuanto tienen en esta vida. 1 Tesalonicenses 5:17 “Orad sin cesar.” Filipenses 4:6 “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” La oración en el matrimonio no solo fortalece la relación con Dios sino también la relación entre los cónyuges. La oración desnuda el orgullo cual es el enemigo #1 del matrimonio y presenta la humildad, ya que la oración expresa nuestra dependencia de Dios y evidencia nuestras limitaciones, cuando somos humildes delante de Dios en pareja, aprendemos a ser humildes el uno con el otro también. Orar es estar con Dios, vivir con Dios, amar a Dios.

Cada dia deben tomar tiempo para ir a la Biblia juntos: La Palabra de Dios es clave en la vida de cualquier creyente que quiera honrar a Dios pero lo es también en cualquier matrimonio que quiera amar a Dios. No podemos separar la Escritura de la oración Proverbios 28:9 “El que aparta su oído para no oír la ley, Su oración también es abominable.” La meditación en las Escrituras es algo que Dios ha demandado siempre Josue 1:8 “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” Entendemos que amar a Dios requiere guardar sus mandamientos y que involucra satisfacer a Dios en todas sus exigencias, por lo cual la Biblia en nuestro matrimonio es crucial.

Nos guarda del pecado. Salmos 119:9-11.

Traé vida en tiempos de abatimiento. Salmos 119:25.

Calma la ansiedad. Salmos 119:28.

Consuela en tiempos dificiles. Salmos 119:50.

Da sabiduría y entendimiento. Salmos 119:98-100.

Ordena nuestra vida. Salmos 119:133.

Esto y más, lo importante en todo esto es, que al mismo tiempo que fortalecemos nuestra comunión con Dios y fotalecemos nuestra unión de pareja, además traemos bendición a nuestras vida y nos volvemos más agradables a él, y mejores el uno para el otro. EL AMOR NUESTRO PARA DIOS CRECE día a día al estar en Su Palabra.

Servir a Dios. Todo matrimonio que ama a Dios naturalemente deseará servir a Dios, deseará hacer algo por Dios para expresarle el amor que le tienen. Es el camino de lo que Dios quiere que hagamos y demanda de nosostros por lo tanto es lo que el Espíritu Santo formará en nosotros de manera natural si le dejamos trabajar en nuestra vida. Deuteronomio 10:12 “Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma;” En la Biblia encontramos un particular ejemplo de una pareja de siervos de Dios muy entregados Aquila y Priscila, siempre mencionados juntos, note esta pareja sobresaliente en el minsiterio y vida del Apóstol Pablo. Romanos 16:3 “Saludad a Priscila y a Aquila, mis colaboradores en Cristo Jesús,” Todo matrimonio cristiano debe incolucrarse en el servicio formal de la iglesia como una muestra de su amor y devoción a Dios, por supuesto esto requiere de disposición, disponibilidad y buen testimonio. Aprender a servir a Dios mientras servimos a otros es caminar por las pisadas del Mestro. Galatas 5:13 “Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.” Servir juntos no solo les ayudará a amar más a Dios sino tambien a amarse más el uno al otros, a batallar juntos por los porpósitos divinos y contar con más metas en común, mientras se impulsan el uno al otro en sus diferentes ministerios.

Existen muchas excusas por las cuales no se ama a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con todas las fuerzas, pero existe una sola razón USTED MISMO. Cada uno por su egoísmo, o egocentrismo ya sea porque no toma el tiempo para Dios, o porque no quiere comprometerse con Dios, o porque no quiere entregar ciertos pecados no logra vivir para Dios, como Dios está esperando AMÁNDOLE. Es hora de dejar todo eso atrás y entregarse de lleno para AMAR A DIOS Y VIVIR PARA ÉL TODO EL TIEMPO, TODA LA VIDA. 2 Corintios 5:15 “y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.”

Llamado a la Acción: Revisen en que área están fallando para cumplir este mandamiento, y decidan cómo corregir esto. Elaboren un plan escrito para relacionarse con Dios y cuando estén listos busquen a su pastor para encontrar una oportunidad de servir a Dios. Si usted aun no ha conocido a Dios hable ya con el pastor y empiece un camino de amor a Dios.