Dones Espirituales - Semana 1

Lección 1 - Introducción a los Dones Espirituales

1 Corintios 12:1–7

1 Y en cuanto a los dones espirituales, no quiero hermanos, que ignoréis.

2 Sabéis que vosotros erais gentiles, llevados, como se os llevaba, a los ídolos mudos.

3 Por tanto, os hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios, llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo.

4 Ahora bien, hay diversidad de dones; pero el mismo Espíritu es.

5 Y hay diversidad de ministerios; pero el mismo Señor es.

6 Y hay diversidad de operaciones; pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos.

7 Pero a cada uno le es dada manifestación del Espíritu para provecho.

El tema de los dones espirituales es denigrado por algunos, malentendido por otros e ignorado por la mayoría de cristianos (y es causa de mucha confusión en las iglesias de hoy).

Los dones espirituales se relacionan a la capacidad de servir a Dios en alguna área del ministerio espiritual de forma efectiva.

Los dones espirituales no son otorgados para exaltar a los “santos superiores.”

Ellos nos han sido dados para equiparnos y así nosotros beneficiar a aquellos a quienes ministramos, también nos han sido dados para la gloria de Dios.

Cuando mencionas los dones espirituales en una iglesia bautista, muchas personas piensan que te has desviado al movimiento carismático de los días modernos. La realidad es que Dios le dio los dones espirituales a ciertas personas en la iglesia hace 1900 años antes que alguien escuchase de un “carismático.”

Cada cristiano recibe por lo menos un don espiritual cuando llega a ser salvo.

Ese don nos da un lugar para el servicio en la iglesia.

Definiciones de términos o frases importantes:

1. Don – “járisma”­ – una dádiva de gracia.

2. Diversidad– Una separación entre las partes que están diseñadas a estar unidas.

3. Manifestaciones– Las credenciales de la autenticidad, para mantener el testimonio de cada miembro de la iglesia de Corinto.

4. “Para provecho” – Significa “para el provecho de todos; para el bien común.”

I. LOS DONES ESPIRITUALES SON REALES – 1 Corintios 12:1.

A. Un don espiritual es llamado járisma en el texto griego de la Biblia.

El término aparece diecisiete veces en el Nuevo Testamento (16 veces en las epístolas de Pablo y 1 vez en la primera epístola de Pedro).

Mayormente es traducida como “don”. Puesto que járis significa “gracia,” járismasignifica “un don de gracia.”

Járisma no es un talento natural, aunque podría coincidir.

Un talento natural viene en el nacimiento, mientras un don espiritual viene en el nacimiento espiritual.

Un don espiritual no es una emoción o experiencia, aunque las emociones de gozo comúnmente le siguen al uso del don espiritual para servir a las personas en el nombre de Jesucristo.

Un don espiritual es la capacidad de servir a Dios en alguna área del servicio espiritual de forma efectiva.

No estar informado acerca de los dones espirituales es fallar en el servicio en el área que Dios te ha otorgado.

Estar informado y comprometido en el área que te ha sido regalada es estar liberado de la carnalidad y es experimentar el gozo de un servicio efectivo hacia Dios.

Esta es la razón por la que Pablo escribió, “Y en cuanto a los dones espirituales, no quiero, hermanos, que ignoréis.” – 1 Corintios 12:1.

B. Es importante distinguir los dones espirituales de las gracias y los oficios espirituales.

Las gracias espirituales son características del carácter cristiano.

Cada creyente es el responsable del desarrollo de todas ellas (cf. Gá. 5:22-23). Son el fruto del Espíritu Santo.

Los oficios espirituales son las posiciones en la iglesia, utilizados para la administración de sus asuntos, sea del cuidado espiritual del rebaño (ancianos) o cuidado espiritual temporal (diáconos; cf. 1 Timoteo 3:1-13).

Solamente ciertos creyentes tienen el oficio espiritual.

II. LOS DONES ESPIRITUALES SON SAGRADOS – 1 Corintios 12:2-3.

1 Corintios 12:1 Y en cuanto a los dones espirituales, no quiero hermanos, que ignoréis.

A. Ellos son solamente para los redimidos (v. 2).

1 Corintios 12:2 Sabéis que vosotros erais gentiles, llevados, como se os llevaba, a los ídolos mudos.

Los no redimidos son arrastrados por la fuerza del diablo. Los redimidos son liberados por el Espíritu Santo.

Aquellos que son controlados por el diablo no pueden recibir o entender el tema de los dones espirituales.

Sólo aquellos que son nacidos del Espíritu tienen dones espirituales.

Pablo les recuerda cómo ellos estaban “llevados…a los ídolos del mundo” desviados, esto es, engañados por sus pasiones, engañados por sus sacerdotes, engañados por los ritos de adoración vanos y espléndidos.

B. Ellos están relacionados al Señorío de Jesucristo (v. 3).

1 Corintios 12:3 Por tanto, os hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios, llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo.

El espíritu que niega el Señorío de Jesucristo no es de Dios. Es el espíritu del anticristo

1 Juan 4:3 y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y éste es el espíritu del anticristo, del cual vosotros habéis oído que ha de venir, y que ahora ya está en el mundo.

El Espíritu que confirma Su Señorío es de Dios (1 Juan 4:2).

Entonces, la pregunta que debe hacerse ante el ejercicio de los así llamados dones espirituales es: “¿El ejercicio de este don habla de sí mismo, de una experiencia o del Señor Jesucristo?”

Saber que Jesucristo es el “Señor” (Soberano, Jehová del Antiguo Testamento) es una visión que viene mediante la revelación divina (Mateo 16:15-17).

Mateo 16:15–17

15 Él les dice: ¿Y vosotros quién decís que soy yo?

16 Y respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.

17 Y respondiendo Jesús, le dijo: Bienaventurado eres Simón hijo de Jonás; porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en el cielo.

Es el resultado del Espíritu Santo tomando las cosas de Cristo y mostrándolas a nosotros

Juan 16:12–15

12 Aún tengo muchas cosas que deciros, mas ahora no las podéis llevar.

13 Pero cuando el Espíritu de verdad venga, Él os guiará a toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oiga, y os hará saber las cosas que han de venir.

14 Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.

15 Todo lo que tiene el Padre, es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.

Cada don espiritual verdadero da testimonio de Él.

Ejemplo: Como el enfoque en una iglesia Pentecostal está en la experiencia y en un espíritu y no en levantar a Jesús. no hablará de sí mismo… Él me glorificará

No puede ocurrir ni suceder que alguien reconozca a Jesús como el Mesías sin ser influenciado por el Espíritu Santo.

El significado no es que nadie tiene la capacidad física de decir que Jesucristo es el Señor a menos que sea ayudado por el Espíritu Santo, puesto que todos lo pueden decir, sino que nadie estará sinceramente dispuesto a decirlo; nadie lo reconocerá como su Señor; nunca podría pasar que alguien lo confiese como el verdadero Mesías sin antes no haber sido llevado a este estado por la ayuda del Espíritu Santo.

C. Ellos son distintos del Dador.

1 Corintios 12:4 Ahora bien, hay diversidad de dones; pero el mismo Espíritu es.

Hechos de los Apóstoles 2:38 Entonces Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.

Nótense las referencias del “don” del Espíritu Santo y los “dones” del Espíritu Santo. El primero se refiere al Espíritu, mientras que el segundo se refiere a la capacidad para el servicio que el Espíritu confiere.

La promesa de Hechos 2:38, “recibiréis el don del Espíritu Santo,” fue la promesa del Espíritu que mora y no una promesa del don de lenguas. Busca “don” y “dones” en los pasajes bíblicos que hablan del tema.

D. Ellos son distintos del fruto espiritual.

Gálatas 5:22–23

22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,

23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.

El fruto del Espíritu tiene que ver con el carácter, lo que uno es en Cristo. Los dones tienen que ver con el servicio, lo que uno hace para Cristo.

Cada cristiano podría tener cada aspecto del fruto espiritual; pero ningún cristiano tiene todos los dones del Espíritu (1 Corintios 12:28-30).

1 Corintios 12:28–30

28 Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, lo segundo profetas, lo tercero maestros; luego milagros; después dones de sanidades, ayudas, gobernaciones, diversidad de lenguas.

29 ¿Son todos apóstoles? ¿Son todos profetas? ¿Todos maestros? ¿Hacen todos milagros?

30 ¿Tienen todos dones de sanidad? ¿Todos hablan lenguas? ¿Interpretan todos?

Cultiva todos los frutos y desarrolla el don que te ha dado el Espíritu Santo.

III. LOS DONES ESPIRITUALES SON DIVERSOS – 1 Corintios 12:4.

1 Corintios 12:4 Ahora bien, hay diversidad de dones; pero el mismo Espíritu es.

A. Diversidad significa una separación entre las partes que están diseñadas a estar unidas.

Cada una de las cosas diversas son distintas, pero se unen para funcionar.

Ellos difieren en su relación con Dios. El Espíritu Santo confiere los dones, el Señor Jesucristo dirige el uso de los dones y el Padre fortalece la función de los dones (1 Corintios 12:4-6).

1 Corintios 12:5–6

5 Y hay diversidad de ministerios; pero el mismo Señor es.

6 Y hay diversidad de operaciones; pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos.

Ellos difieren en duración. Hay unos dones que pasaron con la terminación de la Santa Escritura.

1 Corintios 13:8 La caridad nunca deja de ser; mas las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.

B. Es nuestro deber reconocer la diversidad en los dones espirituales.

Entonces nosotros no demandaremos que tenemos nuestro don para ser “espiritual.”

Ni nos sentiremos superiores por el don que hemos recibido.

Tenemos que usar nuestro don particular en cooperación con otros dones para que las personas sean servidas y Dios sea glorificado.

IV. LOS DONES ESPIRITUALES SON SANTOS – 1 Corintios 12:4-6

A. Ellos son dados por el Espíritu Santo (v. 4).

Sin considerar que don has recibido, el mismo Espíritu Santo que te confirió el don, también me lo confirió el mío. Démonos cuenta de la repetición de la frase “el mismo Espíritu” en 1 Corintios 12:8-11. Cada don es dado por el Espíritu Santo según como lo elija. Su dotación hace que cada don sea santo.

B. Ellos son gobernados por Dios el Hijo (v. 5).

Hay muchas formas en las cuales el servicio es entregado, pero el Señor Jesucristo está a cargo de todos ellos.

Jesucristo es llamado la cabeza de la iglesia (Efesios 5:23).

Como la cabeza (cerebro), es el control central del cuerpo físico, de esta forma el Señor Jesucristo es el control central de las iglesias.

Él gobierna todo lo que ellas son y hacen.

Colosenses 2:19 y no asiéndose de la cabeza, de la cual todo el cuerpo, nutrido y enlazado por las coyunturas y los ligamentos, crece con el crecimiento de Dios.

Colosenses 2:19 enseña que el cuerpo entero es nutrido y fortalecido desde la cabeza (Jesucristo) y crece con el crecimiento que Dios produce.

Este es el resultado de todos los dones espirituales que están siendo dirigidos por el Hijo

C. Ellos son fortalecidos por Dios el Padre (v. 6).

Hay muchas actividades que hacen la obra de Dios.

Pero en cada obra el único Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo está realizando Sus propósitos.

Él produce los resultados deseados en todas nuestras obras, fortaleciendo lo que hacemos en Su nombre (Efesios 1:19).

El poder del Dios todopoderoso está obrando en los hijos de Dios en los momentos actuales (Efesios 3:20).

V. LOS DONES ESPIRITUALES SON UNIVERSALES – 1 Corintios 12:7.

1 Corintios 12:7 Pero a cada uno le es dada manifestación del Espíritu para provecho.

A. La manifestación

¿Qué quiere decir Dios cuando dice, “a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu” (v. 7)? Esto significa que a cada creyente le es dado un don espiritual por el cual el Espíritu Santo se manifiesta en su vida.

La distribución de los dones espirituales fueron manifestaciones visibles, credenciales de autenticidad, para mantener el testimonio de cada miembro en la iglesia de Corinto.

La palabra “a cada” significa “tomar a uno a la vez de todo un grupo entero.”

Tú tienes un don espiritual si has confiado en el Señor Jesucristo como tu Salvador personal.

B. La distribución

Nadie es dejado de lado. El Espíritu Santo hizo una soberana elección de que el creyente recibiría tal don. Pero tomó una elección positiva para que cada creyente reciba algún don.

1 Pedro 4:10 Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.

Reconoce el don que Dios te ha dado y no te preocupes por el don que Dios le ha dado a otro, usa tu don y ocúpate de la obra para la gloria de Dios.

VI. LOS DONES ESPIRITUALES SON PRÁCTICOS – 1 Corintios 12:7.

A. Dios dijo que los dones son dados a cada uno de nosotros “para provecho.”

La expresión para provecho significa “para el provecho de todos; para el bien común.”

“…a cada uno le es dada manifestación… para provecho” – pros a sumféro – Para o hacia el provecho (de otros).

Pablo afirmó que las manifestaciones visibles de los dones sobrenaturales que eran de los miembros de Corinto, no eran para el provecho y la gloria personal o individual, sino para ayuda de toda la iglesia e incluso para aquellos que no tenían ninguno.

Los milagros y los dones espirituales parecen haber sido dados principalmente para convencer a los incrédulos acerca de la deidad de Jesucristo y para fortalecer a los creyentes débiles. Marcos 2:10,11; Juan 11:41-44; 1 Juan 2:11

B. Cada don tiene que ser ministrado para el bien de las personas.

Nunca debe ser utilizado para el mero beneficio de aquel que lo ejerce.

Es en nombre de aquellos que reciben su ministerio.

Alguien podría decir, “¡el uso de mi don espiritual me hace sentir bien!”

Eso puede ser verdad, (lo mío me hace sentir bien la mayor parte de mi tiempo), pero ese no es el propósito para el cual debe ser usado el don.

El maestro no enseña porque eso lo hace sentir bien, sino para instruir a los estudiantes en su conocimiento y servicio a Dios.

Utilizar un don espiritual para el gozo personal contrista al Espíritu Santo de Dios.

Hacer esto es pecado. Cada don espiritual debe ser usado en una forma que nos permita conocer las necesidades de las personas para que nosotros hagamos algo por ellos.