BUSCANDO LA BENDICION.

Título: “La oración que busca la bendición para la vida”

Propósito: Animar al alumno a buscar la bendic ión de Dios en las cosas que emprende .

Pasajes bíblicos principales: I Crónicas 4 :9,10;

5 :20.

Versículo de tarea: I Crónicas 4:10.

Repaso de la lección anterior:

La vida tiene muchos desafíos , y el cristiano tiene que aprender a enfrentarlos con las armas

espirituales , y una de ellas , la más poderosa, es la oración.

Oración: Que el Señor despierte en el alumno hambre por buscarlo a Él en las cosas que emprenda.

Introducción:

Nuestro curso nos lleva al libro de Crónicas; su nombre se debe a que sus dos volúmenes contienen.

las crónicas de los acontecimientos de la vida del pueblo de Israel. Comienza con las genealogías

desde Adán y nos lleva hasta el decreto de Ciro de retornar del exilio.

La escritura de estos libros se atribuye a Esdras. Su contenido ilumina las descripciones hechas en los

libros de Samuel y Reyes, y nos lleva a detalles omitidos en éstos.

El escritor Esdras es el encargado de restaurar la vida espiritual del pueblo, y por ello no menciona muchas cosas políticas ni se mete en la historia del reino del norte, puesto que nada tenía que ver con el templo ni con el sacerdocio. Las oraciones citadas en estos libros son verdaderas joyas en este tema, y sin duda traerán riqueza espiritual a nuestra vida.

Las oraciones que estudiaremos hoy son oraciones personales, de Jabes y el resto de los hombres de las tribus de Rubén, Gad y Manasés, quienes supieron buscar a Dios cuando se hallaban en total desventaja y necesidad.

La oración que busca la bendición para la vida. I Cr. 4:9, 10

1. La persona que hace la oración. I Cr. 4:9.

1.1 Su nombre es Jabes , y significa : “dolor”.

1 .2 Su madre le puso ese nombre porque debió sufrir mucho más de lo habitual cuando

lo dio a luz .

1 .3 Su madre debió contarle a su hijo los sufrimientos del pasado, pues tal vez Jabes tenía

alguna marca en su cuerpo como resultado de eso .

2. La forma en la que hace la oración. I Cr. 4:10

2 .1 La dirige al Dios de Israel, es decir, conocía la historia de su pueblo y creía en el Dios de sus padres .

2 .2 Con un ferviente de seo de la bendición Divina al iniciar la empresa de su vida

(estudios, trabajo, negocio, etc.).

3. El contenido que tenía la oración. I Cr. 4:10

3.1 Que Dios lo bendijera en lo que iba a emprender.

3.2 Que Dios le ensanchara su territorio. El espacio de su vida debió ser muy pequeño, y quería hacer algo grande.

3.3 Que Dios pusiera Su mano sobre él, dándole sabiduría, medios y fuerzas para su empresa.

3.4 Que Dios lo librara del mal; recordaba el dolor de su madre y las marcas que le había dejado por lo menos en su mente.

4. La respuesta que recibió la oración. I Cr. 4:10

4.1 Una respuesta contundente, completa y sin condiciones.

4.2 Jabes llegó a ser el más ilustre entre sus hermanos.

4.3 Los judíos refieren que Jabes llegó a ser un eminente doctor de la ley, que atrajo una gran cantidad de discípulos.

4.4 Jabes llegó a ser tan famoso, que la ciudad donde vivía fue llamada por su nombre.

I Cr. 2:55.

4.5 Los habitantes de esa ciudad fueron gente muy fina y consagrada a Jehová. Ej. Jer. 35:1-6, 14, 16, 18, 19

La oración que busca a Dios en la guerra. I Cr. 5:20.

1. Un poco de historia acerca de los que oraron. I Cr. 5:18

1.1 Los hijos de Rubén, Gad, y la media tribu de Manasés.

1.2 Estas dos tribus y media fueron los que prefirieron quedarse del otro lado del río Jordán y no entrar a la tierra prometida. Nm. 32:1,5; Dt. 3:12-17

1.3 La tribu de Rubén era la tribu descendiente de Rubén, el que perdió el derecho de primogenitura y fue dado a Judá. Gn. 49:4

1.4 Estas tribus vivieron entre los agarenos, como se llamaban al principio los descendientes de Ismael. I Cr. 5:19

1.5 Formaron un gran ejército de 44,760 hombres, todos valientes y diestros en las armas.

2. El concepto que tenían en su mente cuando oraron.

2.1 Recordaron al Dios de sus padres (los agarenos eran hijos de la esclava).

2.2 No pusieron su confianza en su ejército ni en sus armas.

2.3 Decidieron que la guerra era de Dios, y siendo así, de seguro tendrían la victoria. I Cr. 5:22

2.4 Esperaron en Dios. I Cr. 5:20.

3. El resultado que obtuvieron de su oración.

3.1 Dios les fue favorable. I Cr. 5:20

■ En nuestras luchas espirituales debemos buscar fuerza desde “arriba”.

3.2 Poseyeron las tierras de sus enemigos. I Cr. 5:22

3.3 Se multiplicaron en gran manera. I Cr. 5:23

Conclusión:

Nuestra oración siempre es atendida, nuestro Dios es Real y Fuerte, pero no debemos olvidarnos de Él.

La ingratitud y traición a Dios siempre trae malas consecuencias. La gente que vimos en esta lección se alejó de Dios, no obstante lo Bueno que Él había sido con ellos (I Cr. 5:25), y como consecuencia acabaron cautivos y dispersos por el resto de sus días (1 Cr. 5:26): que no nos suceda esto a nosotros.