Llamado de Timoteo.

Introducción:

Timoteo llegó a ser un hombre muy importante en la Iglesia del primer siglo, fue uno de los colaboradores más cercanos del apóstol Pablo, el mismo se refiere a él como “su hijo amado y fiel colaborador”, llegó a ser conocido, por la tradición, como el obispo de Efeso, ciudad donde muchos piensan que fue martirizado.

¿Cómo fue que Dios llamó a este hombre a servirle?

La manera en cómo fue llamado al servicio nos enseñará mucho acerca de cómo obra Dios y lo que él quiere para su amada Iglesia.

Hechos de los Apóstoles 16:1–5 “1 Después llegó a Derbe y a Listra; y he aquí, había allí cierto discípulo llamado Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego; 2 y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio. 3 Quiso Pablo que éste fuese con él; y tomándole, le circuncidó por causa de los judíos que había en aquellos lugares; porque todos sabían que su padre era griego. 4 Y al pasar por las ciudades, les entregaban las ordenanzas que habían acordado los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, para que las guardasen. 5 Así que las iglesias eran confirmadas en la fe, y aumentaban en número cada día.”

Desarrollo:

I. Encuentro de Pablo con Timoteo.

Hechos de los Apóstoles 16:1–2 “1 Después llegó a Derbe y a Listra; y he aquí, había allí cierto discípulo llamado Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego; 2 y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio.”

Aquí encontramos información importante acerca de Timoteo:

Era un discípulo. Nombre con que se refiera a los cristianos, no solamente como creyentes, sino como uno que sigue a Cristo. Hechos de los Apóstoles 6:7 “7 Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.”; Hechos de los Apóstoles 9:36 “36 Había entonces en Jope una discípula llamada Tabita, que traducido quiere decir, Dorcas. Esta abundaba en buenas obras y en limosnas que hacía.”.

Era Hijo de una mujer judía creyente pero de padre griego. Mestizo, su madre era Eunice y le había instruido en la fe, 2 Timoteo 1:5 “5 trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.” ; 2 Timoteo 3:14–15 “14 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.” Seguramente su mamá le había instruido en las Escrituras del A. T, lo cual le preparó para recibir el evangelio cuando Pablo visitó Listra en su primer viaje misionero.

Los hermanos de Listra e Iconio daban buen testimonio de él. Tenía buen testimonio entre los hermanos y era conocido por ello a tal punto que no solo en Listra, sino también en Iconio sabían de él. El hecho de que la Escritura mencione esto es muy importante ya que nos recuerda que el llamado a servir en el ministerio siempre va acompañado del respaldo de la Iglesia. Es lo que se conoce como “el llamado externo”.

II. Reclutamiento de Timoteo.

Hechos de los Apóstoles 16:3 “3 Quiso Pablo que éste fuese con él; y tomándole, le circuncidó por causa de los judíos que había en aquellos lugares; porque todos sabían que su padre era griego.”

En esta parte encontramos información importante en cuanto a la manera en que Timoteo fue reclutado y preparado para el ministerio.

Pablo quiso llevárselo. Esto lo hizo considerando su testimonio. Encontró en Timoteo un candidato prometedor para el ministerio de la Palabra. Pensaba en que la obra debe seguir y es necesario preparar mas obreros. La manera de prepararlo no fue enviándolo a otro lugar para que se lo den preparando si no él mismo reclutándolo, pasando tiempo con él para enseñarle. Esto es lo que se lama el mentoreo. Es la manera en que la Biblia nos enseña como se debe preparar a los que son llamados a servir. Es la manera en que el Señor preparó a los doce, Marcos 3:13–15 “13 Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él. 14 Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, 15 y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios:”; es la manera en que también en el antiguo testamento Josué se preparó con Moisés, Éxodo 24:13 “13 Y se levantó Moisés con Josué su servidor, y Moisés subió al monte de Dios.” ; los profetas fueron preparados, como Eliseo que fue preparado por Elías, 1º Reyes 19:19–21 “19 Partiendo él de allí, halló a Eliseo hijo de Safat, que araba con doce yuntas delante de sí, y él tenía la última. Y pasando Elías por delante de él, echó sobre él su manto.20 Entonces dejando él los bueyes, vino corriendo en pos de Elías, y dijo: Te ruego que me dejes besar a mi padre y a mi madre, y luego te seguiré. Y él le dijo: Ve, vuelve; ¿qué te he hecho yo?21 Y se volvió, y tomó un par de bueyes y los mató, y con el arado de los bueyes coció la carne, y la dio al pueblo para que comiesen. Después se levantó y fue tras Elías, y le servía.” La Preparación al ministerio, si bien requiere una gran preparación, esta se da en el ambiente del mentoreo, de la relación, aprendiendo de las Escrituras y de la experiencia de los que están sirviendo y aprendiendo en el camino a servir a Dios.

Le circuncidó. Esto no es una contradicción con la actitud anterior de luchar por no circuncidar a los creyentes gentiles si no que como Timoteo era Judío (ya que era hijo de madre judía), si se circuncidaba tendría puertas abiertas en las sinagogas para predicar la Palabra. Esto tiene que ver con buscar la manera, sin modificar el evangelio, de adaptarnos para que otros escuchen el evangelio. Es lo que Pablo dice en 1 Corintios 9:19–23 “19 Por lo cual, siendo libre de todos, me he hecho siervo de todos para ganar a mayor número. 20 Me he hecho a los judíos como judío, para ganar a los judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley) como sujeto a la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley; 21 a los que están sin ley, como si yo estuviera sin ley (no estando yo sin ley de Dios, sino bajo la ley de Cristo), para ganar a los que están sin ley. 22 Me he hecho débil a los débiles, para ganar a los débiles; a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos. 23 Y esto hago por causa del evangelio, para hacerme copartícipe de él.” No tiene que ver con modificar el evangelio, o hacerlo mas fácil de entender, tiene que ver con estar dispuestos a adaptarnos nosotros para que otros escuchen. Implica estar dispuesto a restringir mi libertad o comodidad por el bien del evangelio.

III. Visita a las Iglesias.

Hechos de los Apóstoles 16:4–5 “4 Y al pasar por las ciudades, les entregaban las ordenanzas que habían acordado los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, para que las guardasen. 5 Así que las iglesias eran confirmadas en la fe, y aumentaban en número cada día.”

Esta entrega de las instrucciones fue de la mano con la visita de los apóstoles. No hubiera sido lo mismo si hubieran enviado una carta. La presencia de los misioneros fue de ánimo y fortaleza y fue una fuente de experiencia para el joven Timoteo.

Conclusión:

La gran labor de una madre que instruye a sus hijos en la fe dará como resultado grandes siervos de Dios.

Es necesario que Dios siga levantando siervos que continúen con la labor de alimentar a la Iglesia con su Palabra.

Los que son llamados a servir siempre deben contar con el respaldo de la Iglesia.

La manera de preparar a los que son llamados a servir es aprendiendo de otros que ya están sirviendo.