Nadie tome en poco tu juventud

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Dios te ha llamado a servirle

Dios nos salvó para que les sirviéramos. Creo que en el último tiempo hemos visto una tendencia a hablar solo de la importancia de vivir para Dios. Y somos salvo del infierno y todo este tema espiritual, que considero que es importante, ustedes saben que lo he hablado aquí.
Sin embargo, considero igual de importante hablar que fuimos salvados, no para ser trofeos de perfección en la pared de Dios. Mas bien, para que andemos en buenas obras.
Efesios 2:8–10 NTV
8 Dios los salvó por su gracia cuando creyeron. Ustedes no tienen ningún mérito en eso; es un regalo de Dios. 9 La salvación no es un premio por las cosas buenas que hayamos hecho, así que ninguno de nosotros puede jactarse de ser salvo. 10 Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás.
Algo que a mí siempre me ha impresionado de Dios, es precisamente que Dios es el que decide siempre dar el primer paso.
Dice la Palabra que Dios vino a buscar lo que estaba perdido.
Vemos en este pasaje que Dios dice que fuimos salvo por un regalo de Dios, pero ese regalo viene acompañado de un deber.
Este ejemplo es simple de entender, tu vida es un regalo de tus padres, tu no hiciste nada para que tus padres considerarán tenerte, pero sin embargo, en tu casa tu tienes unas responsabilidad, que tus padres te van delegando a la medida que vas madurando.
Dios va construyendo en nosotros un nuevo ser y a la medida que vamos creciendo y madurando, Dios pide de nosotros mayor responsabilidad.

Comienza a servir a Dios desde tu juventud

Hay jovenes que se pasan esperando el momento para servirle a Dios. “Es que soy muy joven”. ¿Qué pasaría si mañana murieras y nunca le hablaste de Dios a tu familia o a tus amigos?
Si tu vas a ir al cielo con Dios, pero ¿qué pasaría con tu familia?
El momento de servir es ahora.
El apóstol Pablo le dijo a su joven aprendiz lo siguiente:
1 Timoteo 4:11–13 NTV
11 Enseña esas cosas e insiste en que todos las aprendan. 12 No permitas que nadie te subestime por ser joven. Sé un ejemplo para todos los creyentes en lo que dices, en la forma en que vives, en tu amor, tu fe y tu pureza. 13 Hasta que yo llegue, dedícate a leer las Escrituras a la iglesia, y a animar y a enseñarles a los creyentes.
Pablo le estaba exhortando a su joven aprendiz, haz lo que te he mandado hacer. Enseña a los demás lo que sabes.

Los jóvenes pueden ser poderosos acompañados de mentores

El joven Timoteo fue un líder influyente en la iglesia de Éfeso. Su influencia fue tal que llegó hoy, 2000 años después hablamos de su vida.
¿Qué tipo de joven quieres ser?
Los jóvenes que esperan a la adultez para influenciar en los demás.
Los jóvenes que solo pasan por la vida, pero que nunca serán recordados.
Jóvenes que aprovechan el tiempo y comienzan hacer las obras por la que Dios les llamó hacer. De tal forma que impacten el mundo.
A mis 16 años, escuché este reto que yo les propongo hoy. Comprométete con el Señor a usar todo lo que tienes:
Tiempo
Inteligencia
Creatividad
para impactar a tu sociedad.
A mis 16 años era como cualquier joven, pero con un deseo de hacer mucho para Dios, no tenía dinero, pero sí tenía las ganas de hacer cosas para Dios.
Y lo que te voy a contar no lo hago para vanagloriarme, sino para que te sirva de ejemplo de lo que puede hacer un joven que está impregnado por el llamado de Dios.
A los 16 años, luego de esta palabra, me inscribí en un grupo misionero, prediqué frente a 1,000 personas, mi primera predicación, duró 5 minutos (se convirtieron 7 personas).
A los 17 años fui a un viaje misionero a Bolivia y Brazil (por el Río Amazonas).
A los 18 me fui a otra iglesia de las que pertenecía en aquel momento para fundar un ministerio de jóvenes. Fui a Nicaragua por un mes, yo pagué todos mis gastos.
A los 19 era pastor de jóvenes. Fui a Nicaragua a fundar un ministerio de teatro, fui solo por dos meses. Luego de ahí hasta los 22 años iba todos los años, dos veces al año a Nicaragua para un total de 7 viajes misioneros a Nicaragua.
¿Qué tu vas hacer con tu juventud?
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