El cielo en su hogar - Efesios 5-18-33 Las edivencias de la llenura del Esp San son gozo gratitud y sumision
El cielo en su hogar
Efesios 5:17-33
Cuando el hogar es controlado por la Palabra de Dios, los ángeles van a pedir a Dios si pueden estar con nosotros, y estando con nosotros, ellos no se van a sentir fuera de lugar. (Spurgeon).
El problema es que muchos hogares no están gobernados por la Palabra de Dios, aun hogares donde los miembros profesan ser cristianos – y las consecuencias son trágicas. En lugar de que los ángeles sean los huéspedes de nuestro hogar, parece que los demonios son los que lo controlan. Muchos matrimonios terminan en divorcios, y muchos no saben cómo esposos y esposas terminan emocionalmente divorciados, aunque aun viviendo bajo el mismo techo. William Cowper (poeta inglés dijo) “el hogar es el único pedazo del paraíso que sobrevivió a la caída”. Pero muchos hogares son un rincón del infierno en lugar de un pedazo de cielo. ¿Por qué?
La respuesta es el Espíritu Santo de Dios. Es solamente a través del poder del Espíritu Santo que podemos caminar en la “armonía” que los esposos (5:22-23), padres e hijos (6:1-4), trabajadores y jefes (6:5-9) necesitan. La unidad del pueblo de Dios descrita en 4:1-16, debe ser llevada al plano de la vida diaria si queremos gozar de la armonía que es un anticipo del cielo en la tierra.
“Sed llenos del Espíritu”, es un mandamiento de Dios, y ÉL espera que nosotros lo obedezcamos.
· El mandamiento está en número plural, y por eso se aplica a todos los cristianos y no solamente a un grupo escogido de cristianos.
· El verbo está en tiempo presente “sigan siendo llenos del Espíritu Santo”, así que es una experiencia que debemos gozar constantemente y no solo en ocasiones especiales.
· El verbo está en voz pasiva, lo que indica que nos somos nosotros mismos los que nos llenamos, sino que permitimos al Espíritu que ÉL nos llene.
· El verbo “lleno” no tiene nada que ver con “contenido” o “cantidad”, por si acaso pensamos en que somos vasos vacíos que necesitamos de una cantidad de combustible espiritual para seguir adelante.
· En la Biblia “llenura” significa “controlado por”.
o “todos… se llenaron de ira” (Lucas 4:28) – significa que fueron controlados por la ira y por esa razón trataron de matar a Jesús.
o “Los judíos se llenaron de celos” (Hechos 13:45) – significa que los judíos se dejaron controlar por los celos y se opusieron al ministerio de Pablo y Bernabé.
· “Sed llenos del Espíritu” significa que “constantemente debemos ser controlados por el Espíritu Santo, en nuestras emociones, en nuestra mente, y en nuestra voluntad”.
Cuando una persona cree en Cristo como su Salvador, inmediatamente es bautizado por el Espíritu Santo en el Cuerpo de Cristo (1 Corintios 12:13).
· Aquí en el Nuevo Testamento, en ningún lugar se nos manda a ser “Bautizados por el Espíritu” porque esta es una experiencia que se tiene una sola vez, y tiene lugar en el momento de la salvación.
· Cuando el Espíritu Santo vino, en el día de Pentecostés, los creyentes fueron bautizados con el Espíritu Santo y fue allí que “el cuerpo de Cristo” se conformó. (Hechos 1:4-5).
· Pero también fueron llenos del Espíritu (Hechos 2:4) y fue esta llenura que les dio el poder que necesitaban para testificar de Cristo (Hechos 1:8).
· En Hechos 2 los Judíos creyentes fueron bautizados con el Espíritu Santo, y en Hechos 10 los gentiles creyentes tuvieron la misma experiencia. Por lo tanto el cuerpo de Cristo (la iglesia) se compone de judíos creyentes y gentiles creyentes (Efesio 2:11-22). Este bautismo histórico, en dos etapas, nunca ha sido repetido más que lo que pasó en el Calvario.
· El bautismo es personal cuando los pecadores creen en Cristo y el Espíritu Santo entra en el individuo para convertirlo en miembro del cuerpo de Cristo.
· El bautismo del Espíritu Santo significa que ahora pertenezco al cuerpo de Cristo. La llenura del Espíritu Santo significa que mi cuerpo pertenece a Cristo.
Usualmente pensamos del poder del Espíritu que es necesario para predicar o para testificar, y eso es verdad. Los apóstoles tuvieron varios momentos cuando fueron llenos del Espíritu Santo, a más de la primera vez allá en Pentecostés.
· Pero Pablo escribió que la llenura del Espíritu Santo también se necesita en el hogar.
· Si nuestros hogares son llamados a representar una parte del cielo aquí en la tierra, entonces debemos ser controlados por el Espíritu Santo.
Pero ¿cómo una persona puede decir cuando es llena con el Espíritu Santo? El apóstol Pablo nos dice que hay tres evidencias de la llenura del Espíritu Santo a un creyente:
1. El creyente es alegre (5:19);
2. el creyente es agradecido (5:20);
3. el creyente es sumiso (5:21-33).
Pablo no dijo nada sobre milagros o lenguas, o alguna otra manifestación especial. Pablo dijo que el hogar puede llegar a ser una parte del cielo aquí en la tierra si cada miembro de la familia es controlado por el Espíritu Santo y es alegre, es agradecido y es sumiso.
1. La primera evidencia de que un creyente está lleno del Espíritu Santo es que ese creyente es ALEGRE. 5:19.
El gozo es uno de los frutos del Espíritu (Gal. 5:22). El gozo cristiano no es una simple emoción que, como un termómetro, aumenta y disminuye de acuerdo a los cambios atmosféricos del hogar. En cambio, el gozo cristiano es una profunda experiencia de suficiencia y confianza a pesar de las circunstancias a nuestro alrededor.
El cristiano puede estar alegre a pesar del dolor y del sufrimiento. Esta clase de gozo no es un termómetro sino un termostato. En lugar de aumentar o disminuir a causa de las circunstancias, el termostato determina la temperatura espiritual de los sucesos a nuestro alrededor. Pablo lo puso en unas palabras sencillas y hermosas, cuando escribió: “He aprendido a contentarme cualquiera sea mi situación” Filipenses 4:11.
Para ilustrar este gozo, Pablo usa una figura muy conocida “el curadito”: “No os embriaguéis con vino… antes bien sed llenos del Espíritu”. Cuando los creyentes allá en Pentecostés fueron llenos del Espíritu Santo, la muchedumbre los acusó de estar borrachos. (Hechos 2:13-15). Hubo tal gozo entre los hermanos que los inconversos que los miraban no tenían ninguna compasión.
Pero algunas lecciones prácticas se pueden aprender de estos contrastes.
· Para empezar la persona ebria está bajo el control de una fuerza externa a él, siendo que el alcohol es un depresivo. Esta persona siente un gran sentido de libertad, (todos sus problemas se desaparecen momentáneamente).
· Esta persona puede “acercarse” a cualquier persona sin sentir vergüenza. El ebrio no se avergüenza de lo que dice o hace, y tampoco puede esconder lo que siente o piensa de algo o de alguien.
Traspasando esta figura al creyente podemos decir que el creyente lleno del Espíritu Santo:
· Tiene su vida controlada por Dios.
· Experimenta un profundo gozo, tanto que no tiene vergüenza de expresar a los demás lo que Dios hace en su vida cotidianamente.
· El creyente experimenta un “auto-control” que realmente es un indicador de que Dios está en control. Mientras que el ebrio está “fuera de control” ya que el alcohol afecta su cerebro. El “auto-control” es uno de los frutos del Espíritu (templanza)
Es cierto que es fácil vivir o trabajar con alguien que está lleno del Espíritu Santo y es alegre, tiene gozo.
· Aquella persona tiene un himno de alabanza en su corazón y en su boca.
· El ebrio a menudo canta, pero lo que sale de su boca es muestra de su putrefacto corazón.
· El cristiano lleno del Espíritu de Dios tiene una canción espiritual en su vida que habla de Dios y nunca va a cantar algo que no venga del Espíritu de Dios y alabe a Dios.
o Pablo y Silas tuvieron el ánimo para cantar alabanzas a Dios en medio de la cárcel en Filipos (Hechos 16:25). Y el resultado de eso fue la conversión del carcelero y toda su familia.
o ¡Qué momento tan maravilloso vivieron aquellos en esa hora, y no tuvieron la necesidad de beber ni una gota de alcohol para gozarlo!
“El pub del vecindario es el lugar más amistoso en el vecindario”. Este era el slogan que tenía un cierto lugar donde la gente iba a pasarla bien, beber un poco, bailar y “divertirse”. Pero a la larga, todos esos lugares aparecen en los noticieros con crónicas policiales, muertes, peleas, arrestos, tráfico, etc… Es cierto que ellos se divierten temporalmente.
Pero el cristiano lleno del Espíritu Santo, también la pasa bien, se divierte y se goza con otros cristianos llenos del Espritu Santo. Todos estos cristianos no tienen ni la más mínima necesidad del alcohol o de ir a esos lugares, para tener gozo en su vida. El creyente lleno del Espíritu Santo no necesita la falsedad de los estimulantes del mundo; los cristianos tienen el Espíritu de Dios, y eso es todo lo que necesitan.
2. La segunda evidencia de que un creyente está lleno del Espíritu Santo es que ese creyente es AGRADECIDO. 5:19.
Alguien definió al hogar como “el lugar donde somos mejor atendidos y mejor nos quejamos”… Hay hogares donde los padres no tienen comunicación con sus hijos sino solo cuando los hijos necesitan plata o cuando los padres quieren saber las calificaciones. Una vez un adolescente dijo: “después de todo un adolescente necesita ánimo de vez en cuando”. Los consejeros matrimoniales usualmente dicen: “asumir que el otro lo da por hecho, es la causa más común de divorcio”. Ser agradecido a Dios por el cónyuge o por el padre o por el hijo, es el secreto de un hogar feliz, y es el Espíritu Santo que nos da la gracia para ser agradecido.
¿Cómo un corazón agradecido promueve la armonía en el hogar?
A través de una cosa: La persona sinceramente agradecida se da cuenta de que es enriquecido a través de los demás, lo cual es una marca de la humildad. La persona que cree que el mundo le pertenece, nunca es agradecida por nada. El que tiene el corazón agradecido usualmente es humilde; y sabe que Dios es “el dador de toda buena dádiva y de todo don perfecto” (Santiago 1:17). Como el regalo de María a Jesús en Juan 12, la gratitud llena o inunda toda la casa de una deliciosa fragancia.
Todos nosotros estamos agradecidos por algo especial en un momento especial; pero Pablo mandó a sus lectores a que estén agradecidos por todas las cosas en todo momento. Esta exhortación en sí, prueba nuestra necesidad del Espíritu Santo de Dios, porque en nuestra propia fuerza nunca podremos obedecer sus mandamientos. ¿Podemos estar realmente agradecidos en tiempos de sufrimiento, desanimo, o aun en tiempos de duelo? Tenga en mente que Pablo está en prisión cuando escribió estas palabras, y aun él estaba agradecido por lo que Dios estaba haciendo en él y por él (Efesios 1:16 – 5:4y20 Filipenses 1:3) Cuando un cristiano se encuentra en una situación difícil, inmediatamente debería dar gracias a Dios el Padre, en el nombre de Jesús y por el poder del Espíritu Santo; para mantener su corazón alejado de las quejas y las preocupaciones. El enemigo se empieza a mover cuando el cristiano se empieza a quejar; pero dar las gracias en el Espíritu derrota al enemigo y glorifica a Dios. “Dad gracias en todo, porque ésta es la voluntad de Dios” (1 Tesalonicenses 5:18).
La palabra “gratitud” viene de la misma raíz que “gracia”. Si hemos experimentado la gracia de Dios, entonces debemos ser agradecidos por lo que Dios nos ha dado.
3. La tercera evidencia de que un creyente está lleno del Espíritu Santo es que ese creyente es SUMISO. 5:19.
Pablo aplicó el principio de la armonía a
· los esposos y esposas (Efesios 5:21-33),
· padres e hijos (Efesios 6:1-4)
· y sirvientes y amos (Efesios 6:5-9);
· y él empezó con la exhortación de que cada uno debe someterse a los demás (Efesios 5:21).
¿Esto quiere decir que los hijos deben decir a los padres lo que deben hacer? Por supuesto que no. La sumisión no tiene nada que ver con el orden de autoridad. Por el contrario, la sumisión va a regular la operación de la autoridad, cómo es dada y cómo es recibida. A menudo Jesucristo enseñó a sus discípulos a no querer ser grande a expensas de alguien más. Desafortunadamente ellos fallaron en aprender la lección, y aun en la ultima cena estuvieron discutiendo sobre quién era el mayor (Lucas 22:24-27).
Cuando Jesús lavó los pies de los discípulos, ÉL les enseñó que el más grande es la persona que usa su autoridad para edificar a otros, y no (como los fariseos lo hacían) edificar su propia autoridad y hacerse ellos mismos más importantes. Nosotros estamos para estimar a otros como “más importantes que nosotros” (Romanos 12:10; Filip. 2:1-4). Por naturaleza vamos a querer promovernos a nosotros mismos, pero el Espíritu Santo nos capacita para someternos unos a otros.
Mientras estudiamos el mensaje de Pablo a los esposos y a las esposas, recuerde que él estaba escribiendo a creyentes. Él no estaba sugiriendo que las mujeres son inferiores en comparación a los hombres, o que todas las mujeres deben estar en sujeción a todos los varones en toda situación. El hecho de que Pablo usa a Cristo y a la iglesia como su ilustración es una evidencia de que él tiene a los cristianos en mente.
Esposas, estén sujetas… (vv.22-24). Él da dos razones para este mandamiento:
· El señorío de Cristo (Efesios 5:22)
· y la jefatura del hombre en Cristo (Efesios 5:23).
Cuando la esposa cristiana se somete a sí misma a Cristo y deja que ÉL sea el Señor de su vida, ella no tendrá dificultad en someterse a su esposo. Esto no significa que ella se convierte en esclava, ya que el esposo también está sometido a Cristo. Y si los dos están viviendo bajo el Señorío de Cristo, solo puede haber armonía.
La jefatura no significa “dictadura”. “Los unos a los otros, y todos al Señor”. El esposo cristiano y la esposa cristiana deben orar juntos y pasar tiempo juntos en la Palabra de Dios, para que los dos sepan cual es la voluntad de Dios para sí mismo y para su hogar.
Esto explica claramente porqué Cristianos deben unirse en un yugo que es el mismo entre sí, y no casarse con un inconverso (2 Corintios 6:14-18). Si el cristiano está sometido a Cristo, no tratará de llevar un hogar que desobedecerá a Dios.
Pero algo más es importante, la pareja cristiana debe tener cuidado de someterse al Señorío de Cristo aun antes de casarse. A no ser de que la pareja cristiana oren juntos, y sinceramente busque juntos hacer la voluntad de Dios, su matrimonio comenzará con un fundamento débil. Pecados cometidos antes del matrimonio (somos Cristianos, podemos salir libres de esto) aseguran un camino de problemas después del matrimonio. Seguramente Dios está dispuesto a perdonar, pero algo muy precioso se perderá. El Dr. William Culbertson, ex presidente del Moody Bible Institute, solía advertir acerca de “las tristes consecuencias de perdonarse los pecados” así que los novios cristianos necesitan tomar esto muy enserio.
Esposo, ama a tu esposa. (vv.25-33).
Pablo tenía mucho más que decir a los esposos cristianos que a las esposas cristianas. Él dejó a los varones un alto estándar que cumplir: “ama a tu esposa, así como Cristo lo hizo con su iglesia”. Pablo estaba levantando el amor del matrimonio al nivel más alto posible; porque él vio en el hogar cristiano una ilustración de la relación entre Cristo y la iglesia.
Dios estableció el matrimonio por muchas razones.
· Para empezar, el matrimonio llena las necesidades emocionales del hombre. No es bueno que el hombre esté solo (Génesis 2:18).
· El matrimonio también tiene un propósito social en perpetuar la especie. (Gen. 1:28)
· Un propósito físico, ayudar a los hombres y mujeres a realizar sus deseos normales dados por Dios (1 Cor. 7:1-3)
· Pero en Efesios 5, Pablo menciona un propósito espiritual en el matrimonio, que el esposo y la esposa experimenten juntos la sumisión y amor a Cristo (Efesios 5:22-33).
Tres maneras en que el esposo debe amar a su esposa:
1. SACRIFICIALMENTE. Si el esposo toma el amor de Cristo por la iglesia como el patrón a seguir para amar a su esposa, entonces la amará sacrificialmente (5:25).
a. Cristo se dio a sí mismo por la iglesia, así el esposo, en amor, se da a sí mismo por su esposa.
b. Jacob amo tanto a Raquel que él trabajó sacrificialmente 14 años para poder tenerla como esposa.
c. El amor cristiano es el que busca lo que el otro quiere, no busca lo suyo propio (1 Corintios 13:5), no es egoísta.
Si un esposo está sometido a Cristo y lleno con el Espíritu Santo, su amor sacrificial pagará voluntariamente cualquier precio, para que ella (la esposa) pueda servir a Cristo en el hogar y así glorificar a Dios.
2. SANTIFICADOR. El amor del esposo también será un amor santificador (5:26-27). La Palabra santificar significa “poner aparte”. En la ceremonia del matrimonio, el esposo es puesto aparte para pertenecer exclusivamente a la esposa, y la esposa es puesta aparte para pertenecer exclusivamente al esposo. Cualquier interferencia con este compromiso dado por Dios es pecado.
a. Hoy, Cristo está limpiando su iglesia con el ministerio de la Palabra (Juan 15:3 – 17:17).
b. El amor del esposo por su esposa debe limpiarla (y a él también) para que los dos sean más como Cristo.
c. Aun hasta su relación física debe ser controlada por Dios para sea un medio de enriquecimiento espiritual, así como un medio de regocijo personal (1 Cor. 7:3-5).
d. El marido no debe “usar” a su esposa para su propio placer, sino para mostrar la clase de amor que mutuamente se complace y se sacrifica. La experiencia del matrimonio es una de “continuo” crecimiento cuando Cristo es el Señor del hogar. El amor siempre enriquece, mientras el egoísmo hace lo contrario.
La iglesia de hoy no es perfecta; tiene manchas y arrugas.
· Las manchas son causadas por la contaminación de afuera, Ya que la iglesia ha sido contaminada por el mundo, necesita constantemente ser limpiada, y la Palabra de Dios es el agente limpiador.
· Las arrugas son causadas por la decadencia de adentro. Estrictamente hablando, no debería haber arrugas en la iglesia, ya que son una evidencia de vejez y de decadencia interna.
o Si la iglesia es nutrida con la Palabra de Dios, las arrugas deben desaparecer.
Como una hermosa novia, la iglesia debe ser limpia y joven, lo cual es posible a través del Espíritu de Dios usando la Palabra de Dios. Un día la iglesia será presentada en el cielo como “una iglesia gloriosa” (Judas 24).
3. SASTISFACTORIO. (5:28-30). El amor del esposo por su esposa debe ser sacrifical y santificador, pero también debe ser “satisfactorio”.
a. En la relación del matrimonio el esposo y la esposa se vuelven una sola carne. Por eso, sea lo que sea que el uno haga al otro, se lo hace a sí mismo. Es una experiencia mutuamente satisfactoria.
b. El hombre que ama a su esposa, está realmente amándose a sí mismo, siendo que los dos son una sola carne.
c. Mientras él ama a ella, él la nutre. Así como el amor es el sistema circulatorio del cuerpo de Cristo (4:16) así el amor es el nutriente principal del hogar. Si los dos, están sometidos a Cristo y sometidos entre ellos, estarán tan satisfechos que no serán tentados a mirar a otro lado para sentirse realizados.