Hebreos 3:7-4:13 - El peligro de la incredulidad y la importancia de una fe constante en Cristo.

Introducción

La semana pasada, el autor de hebreos nos animo a considerar como en Cristo y no en Moisés, todos nosotros fuimos incluidos por gracia en una comunidad “En la Familia de Dios”, teneos además una identidad “Somos santos, llamados a vivir para la gloria de Dios” y tenemos la seguridad de que nos espera un futuro glorioso “Recibimos un llamamiento celestial - un día heredaremos el reino de los cielos”.

Al considerar todo lo que tenemos en Cristo, ahora este autor nos anima a no menospreciarlo, sino mas bien a atesorarlo. El desea que hagamos que la palabra del evangelio penetre profundo en nuestros corazones, que la retengamos hasta alcanzar la plenitud de lo que somos y tenemos en Cristo, es decir:

Hasta que todos estemos juntos en la casa de nuestro Padre en intima y perfecta comunión

Hasta que ya no tengamos mas que lidiar con el pecado que hoy nos asedia y nos engaña y

Hasta que heredemos “al lugar del reposo de Dios”.

De manera que el texto que vamos a considerar es la segunda exhortación de esta carta, son palabras de animo que nos estimulan a la fe en el evangelio, a la comunión con Dios, a la comunión con la iglesia, al servicio a Cristo en medio de este mundo y a meditar en las promesas del evangelio que son poderosas para transformarnos cada día. El estimulo nos es dado junto a una solemne Advertencia “Tengan cuidado con la incredulidad”, una advertencia que nos recuerda que todo lo que tenemos en Cristo “la comunidad, la identidad y la seguridad eterna” lo recibimos solamente por gracia, por medio de la fe, de manera que estas cosas no las podemos perder.

Un incrédulo puede disfrutar y gustar de la familia de la fe, de la misma manera que un invitado disfruta de una cena familiar.... puede pasarla bien, comer la misma comida, disfrutar del amor familiar y de la atención de los anfitriones, pero en algún momento tendrá que partir de la casa, aunque haya sido tratado bien, con amor y se le haya hecho participante de todos los beneficios en un cálido hogar, un visitante nunca esta a gusto en casa ajena, sabe que los intereses de esa familia son ajenos a su estilo de vida y lo único que desea es estar en su propia morada, aunque puede disfrutar de los beneficios como un invitado.

Esto ilustra muy bien lo que el autor de hebreos quiere decir cuando advierte dice: Hebreos 3:6

Hebreos 3:6 (NBLA)

Pero Cristo fue fiel como Hijo sobre la casa de Dios, cuya casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin nuestra confianza y la gloria de nuestra esperanza.

Hebreos 3:14 (NBLA)

Porque somos hechos partícipes de Cristo, si es que retenemos firme hasta el fin el principio de nuestra seguridad.

Los que han recibido por gracia una familia, una identidad y seguridad eterna por la fe, permanecerán en la fe, retienen la fe hasta que hereden las promesas. No se ganan estas cosas con la perseverancia, noten que ya las tenemos, la perseverancia es una evidencia de que tenemos una familia una identidad y seguridad eterna. Estas cosas no se pueden perder, la salvación no se pierde.

Esto es importante, porque las advertencias y la exhortación pude hacernos preguntar ¿que pasa si alguien endurece el corazón y dejo de perseverar después de haber creído? La respuesta que es que la falta de perseverancia evidencia que la persona nunca tuvo estas cosas, siempre fue un visitante en casa ajena. Su naturaleza nunca le permitió sentirse cómodo en la casa de Dios, nunca tuvo los mismos intereses, estaba por la bendiciones que podía disfrutar, pero no porque amaba a Dios.

Así que lo que el autor dice es: hemos llegado a ser partícipes de Cristo si retenemos la esperanza, hasta el fin. Por implicación y si no retenemos firme nuestra esperanza hasta el fin, entonces no hemos llegado a ser partícipes de Cristo, solo demostramos que realmente no fuimos salvos.

¿Entonces cual es el propósito de la advertencia y la exhortación del autor, si no perderemos la salvación que tenemos en Cristo?

El propósito de este texto es animarnos, advertirnos y capacitarnos para que seamos fervientes y vigilantes en la batalla de la fe, de manera que fortalecidos por la gracia de Dios no cedamos a la incredulidad, sino que nos mantengamos firmes en fe, con los ojos puestos en Cristo y echando mano a de los medios por los cuales Dios nos imparte de su gracia para perseverar hasta el fin. De manera que Dios nos da determinación para perseverar por medio de sus advertencias y exhortaciones.

El Espíritu Santo desea que ninguno en la iglesia se pierda, las advertencias también son dadas para que ninguno de por sentado que pertenece a la familia de Dios sin serlo, de manera que el texto de esta mañana tiene también como propósito incomodar a los incrédulos y duros de corazón. Para que prueben si están en la fe, de manera que si no lo están, aun Dios esta dando tiempo para que se arrepientan. Quiera el Señor que si no estas haciendo nada cada vez que oyes la escritura, sepas que estas en problemas y que aun Dios esta esperando tu arrepentimiento.

Vamos ver estas cosas mientras leemos juntos la palabra de Dios en Hebreos 3:7-4:13

1. La advertencia solemne contra la Incredulidad

Nuestro texto inicia con una solemne advertencia, precedida por una ilustración bíblica.

La ilustración viene del Salmo 95:7-11 un salmo inspirado por el Espíritu de Dios, noten que el autor escribe “Dice el Espíritu Santo”, aun cuando entiende que fue un Salmo escrito por David Hebreos 4:7. David fue el autor humano, pero escribió siendo inspirado por Dios, de manera que el Salmo es palabra de Dios. Importante rersaltar que este Salmo es es la palabra de Dios viva y eficaz Hebreos 4:12, notemos que al autor no escribe: “dijo el E.S.” el uso el verbo presente activo “Dice” el Salmo es la palabra de Dios para nosotros y de hecho el salmo cita eventos de la ley que para David era la palabra de Dios para ellos entonces.

De manera que toda la escritura, que es inspirada por Dios, es siempre eficaz para todo tiempo, no es letra muerta, es letra viva y eficaz para transformarnos. De manera que la ilustración del autor y su advertencia es muy solemne, Dios esperaba que los receptores de esta carta, Judíos a punto de abandonar la fe, tomaran en serio esta advertencia. Y espera hoy que consideremos también nosotros lo que está diciendo, que respondamos hoy con fe al evangelio, tal vez no habrá mañana para ti, La solemnidad del "hoy" se repite en los versículos 7, 13, 15 y dos veces en 4:7. como dijo Pablo a los Corintios

2 Corintios 6:2 NBLA

pues Él dice: «En el tiempo propicio te escuché, Y en el día de salvación te socorrí.” Pero ahora es «el tiempo propicio»; ahora es «el dia de salvación».

Quiera Dios usar esta ilustración para llamarte a la fe o para que temas caer en la incredulidad. Escucha la palabra de Dios.

El trasfondo de las advertencias de David lo tenemos en la historia de Israel narrada por Moisés en Números 13 y 14 cuando el pueblo de Dios recibió con temor el informe de los espías y se negaron intentar la conquista por causa de su incredulidad. En consecuencia Dios juró en su ira que esa generación no entraría en el reposo de la tierra de Canaan:

Números 14:20–23 NBLA

Entonces el Señor dijo: «Los he perdonado según tu palabra; pero ciertamente, vivo Yo, que toda la tierra será llena de la gloria del Señor. »Ciertamente todos los que han visto Mi gloria y las señales que hice en Egipto y en el desierto, y que me han puesto a prueba estas diez veces y no han oído Mi voz, no verán la tierra que juré a sus padres, ni la verá ninguno de los que me desdeñaron.

Israel había experimentado el poder de Dios que obro en favor de ellos para sacarlos de una circunstancia terrible “la esclavitud de Egipto”, habían visto la gloria de Dios resplandecer, vieron milagros y prodigios. En lugar de alabar a Dios y confiar en él luego de considerar su poder, su misericordia, su gracia y su grandeza, ellos no creyeron, mas bien tentaron a Dios constantemente con sus criticas y sus quejas por las circunstancias. De esta manera provocaron a Dios con su incredulidad.

A pesar de su incredulidad, por 40 años vieron la gloria de Dios en todo su esplendor: Habitando en medio de ellos, proveyendo pacientemente para sus necesidades de manera que no les falto provisión, ni su ropa, su calzado nunca se gasto y aun así la gracia, misericordia y provisión de Dios no les fue suficiente, no se arrepintieron de su incredulidad y endurecieron as sus corazones.

Ellos dieron por sentado su relación con Dios, se volvieron exigentes y temerarios al provocar constantemente a Dios con sus pecados de amargura, chisme, idolatría y muchas cosas mas. Aunque comieron y bebieron de la mesa que Dios preparó para ellos en el desierto, nunca se sintieron parte de la familia, de hecho menospreciaron la invitación de Dios y anhelaban regresar a Egipto para comer sus manjares, nos les gustó caminar en pos del Dios santo que les extendió su misericordia y les estaba mostrando gracia.

Todos ellos aunque escucharon el evangelio de salvación y experimentaron una libertad temporal de Egipto como sombra de la gracia que vendría en Jesucristo, no se arrepintieron, ni pusieron en Dios su confianza.

Hebreos 4:2 (NBLA)

Porque en verdad, a nosotros se nos ha anunciado las buenas nuevas, como también a ellos. Pero la palabra que ellos oyeron no les aprovechó por no ir acompañada por la fe en los que la oyeron.

El resultado de su incredulidad, fue que Dios se enojo y nos les permitió entrar en la Tierra Prometida. Ahora, el mensaje es que esto es lo que nos sucederá, si endurecemos nuestros corazones en el día de la prueba y murmuramos contra Dios y desechamos nuestra confianza y nuestra esperanza en Dios, si echamos en la espalda su palabra y sus promesas, como si nunca hubiéramos conocido su carácter.

Es fácil estar emocionados cuando Dios cambia las circunstancias como lo estuvo Israel cuando salió de Egipto. Pero que difícil es confiar en la dirección de Dios que nos lleva por caminos que el elige para nuestra vida, es en esos momentos donde se revelará lo que hay verdaderamente en el corazón. En la prueba, muchos en Israel revelaron su incredulidad, cuando se trataba de obedecer la instrucción de Dios, muchos se mostraron displicentes y prefirieron servir a sus ídolos.

¿que esperaba Dios de Israel en medio de la prueba? que esperaran en Dios, que confiaran en él con todo su corazón. Que sus corazones estuvieran afirmados en su carácter, que no anduviesen sospechando de las intenciones de Dios en medio de sus circunstancias. Pero Israel no creyó en Dios, no confiaron en su bondad para guiarles, protegerles y proveerles. Aunque vieron cómo Dios destruyo a sus enemigos y le libro de la esclavitud, cuando se sintieron sedientos, sus corazones se endurecieron contra Dios y no confiaron que él estaba cuidando de ellos, mas bien sospecharon de las intenciones de Dios.

Sospechar de Dios, dudar de Dios, es un terreno muy peligroso y engañoso, hace que nuestro corazón se llene de amargura, de autosuficiencia y soberbia, nos endurece. Cuantos que han profesado a Cristo, al inicio estaban emocionados por la novedad de vivir con cierta seguridad en su vida “pensando que escaparan del infierno, porque tuvieron una experiencia liberadora” pero viene la prueba y dejan de tener interés en Cristo, no les gusta la circunstancias provistas por Dios, no les parece como Dios gobierna su mundo y pierden el interés en la oración, en la iglesia y finalmente de manera progresiva se entregan al pecado para terminar en apostasía.

Si esta es su situación en esta mañana, entonces le ruego que escuche al Espíritu Santo hablándole en este texto. Preste atención a la Palabra de Dios (2:1). No endurezca su corazón (3:8). Reconozca el engaño del pecado (3:13). Considere a Jesús, el Apóstol y Sumo Sacerdote de nuestra gran fe (3:1). Y retenga firmemente su confianza y la gloria de su esperanza en Dios (3:6).

Y si usted nunca ha dado el primer paso para acercarse a Dios, ponga entonces su esperanza en él. Aléjese del pecado y de la auto-confianza y ponga su confianza en un gran Salvador. Estas cosas fueron escritas (y este sermón es predicado) para que ustedes puedan creer y mantenerse firmes, y tener vida.

Hay mas en el texto, para que sientas horror por la incredulidad.

Esta historia la usó David para advertir a su generación. Una generación que ya estaba habitando en la tierra prometida y que necesitaba confiar en Dios para entrar en su reposo.

El autor de Hebreos llama nuestra atención sobre esto, para que entendamos que Canaan no era el lugar de reposo al que Dios estaba invitando a Israel, si lo hubiese sido, Josue les hubiese dado reposo en la conquista de la tierra, y serían extrañas las palabras de David en el salmo que sugiere que aun queda un reposo para Israel ahora que esta en pocesión de Canaan.

El autor de Hebreos nos asegura que la razón por la que David sugiere que Israel debe entrar en el reposo, es porque efectivamente faltaba un reposo para el pueblo de Dios de ese entonces y de hecho para nosotros hoy, aun cuando ya en Cristo hemos entrado en el reposo de Dios por medio de la fe. A ellos y a nosotros nos queda un reposo al cual estamos siendo invitados

¿Que tipo de reposo es este? Genesis 2

Cuando Dios reposo de sus obras en el día 7.... un día que no tenía tarde y noche como los demás días. Un día que es bendecido por Dios como un ámbito eterno en el cual el gobierna desde su trono de gloria, un día al cual Adan podía aspirar si obedecía a Dios de manera personal y perfecta. Por la desobediencia de Adán, el no podía aspirar a entrar en el ámbito de este glorioso día. Pero en Cristo Israel y nosotros, estamos siendo invitados por la fe a entrar en ese glorioso y eterno ámbito de la gloria de Dios. Jesus por su perfecta vida de obediencia, ganó la entrada a esta gloria para nosotros y por su muerte nos ha dado acceso a ella por medio de la fe al hacer propiciación por nuestros pecados y por su resurrección y ascensión aseguro esa gloria para nosotros como nuestro precursor.

Entonces: ya tenemos reposo por nuestra unión con Cristo, pero aun no hemos entrado en él, aun estamos como Israel en el desierto, enfrentando pruebas, pero siendo pastoreados por Dios, que nos hará pasar por valles de sombra de muerte, hasta llevarnos seguros a su gloria cuando Cristo venga por segunda vez.

De manera que la incredulidad nos deja lejos de alcanzar la gloria de Dios, esa gloria eterna que solo se alcanza por medio de la fe. El reposo que perdieron muchos en Israel por causa de su apostasía, fue puyes, el reposo eterno.

Por esto la advertencia en el 3:12 “Tengan cuidado”, temamos a la incredulidad 4:1. Amados, que no haya en medio de nosotros alguno con un corazón malo, preso del engaño del pecado, creyendo que que esta bien como esta a pesar de que esta abrazado un ídolo, un pecado no tan notable.... te vas a endurecer, un pecado siempre lleva a otro, el pecado es dinámico y finalmente nos endurece.

Saul nuca pensó que su impaciencia le traería problemas, su impaciencia le llevo a la desobediencia, la desobediencia acarreo para ñel disciplina, no acepto la disciplina de Dios y se endurecio en cu corazón contra David, se lleno de amargura por la manera en que Dios estaba actuando y la amargura lo llevo a al homicidio de sacerdotes y el homicidio lo llevo a apartarse de Dios para consultar una adivina. Nunca tuvo la intención de apostatar, pero poco a poco el pecado lo engaño y se revelo lo que siempre fue “Un incrédulo”

Cuidado hermanos, teman a la incredulidad, la promesa del reposo aun esta en pie para los que perseveran en la fe, para los temen alejarse del Dios vivo para caer bajo el ardor de su ira. El temor es un buen síntoma de vida espiritual. Hermanos, no sean descuidados o despreocupados o negligentes en cuanto a la condición de sus corazones. Dice Pablo:

2 Corintios 13:5 NBLA

Pónganse a prueba para ver si están en la fe. Examínense a sí mismos. ¿O no se reconocen a ustedes mismos de que Jesucristo está en ustedes, a menos de que en verdad no pasen la prueba?

Si hay temor, escucha ahora:

II. La Exhortación a perseverar en la fe

¿Como podemos cuidarnos de la incredulidad y perseverar en la fe? Todos batallamos con la incredulidad como este padre que le dijo a Jesus:

Marcos 9:23–24 NBLA

«¿Cómo “si Tú puedes?” », le dijo Jesús. «Todas las cosas son posibles para el que cree». Al instante el padre del muchacho gritó y dijo: «Creo; ayúdame en mi incredulidad»

Al Señor le encanta responder esta oración y lo hace en la medida que buscamos en obediencia sus medios de gracia de manera permanente y constante. Noten lo que dice Jesus en:

Juan 7:17 NBLA

»Si alguno está dispuesto a hacer la voluntad de Dios, sabrá si Mi enseñanza es de Dios o si hablo de Mí mismo.

Quieres saber como Dios puede ayudarte en medio de tu incredulidad, quieres comprobar que la palabra de Dios es poderosa para transformarte y que el E.S. puede vivificarte, debes estar dispuesto a obedecer momento a momento y podrás comprobarlo. Debemos ser diligentes mientras experimentamos como el poder de Dios nos hace perseverar

2 Pedro 1:10 NBLA

Así que, hermanos, sean cada vez más diligentes para hacer firme su llamado y elección de parte de Dios. Porque mientras hagan estas cosas nunca caerán.

¿Como hacemos firme nuestro llamamiento y elección?

A. Teniendo comunión intima con el Dios vivo.

El autor dice que un corazón malo se aparta del Dios vivo, por implicación un corazón regenerado se acerca a Dios, sabiendo que le hay y que es galardonado de quienes le buscan.

B. Exhortándolos mutuamente para no ser endurecidos por el engaño por el pecado.

La vida Cristiana no se puede vivir en aislamiento, el incrédulo se aleja de Dios y de la iglesia. Necesitamos el ministerio de nuestros hermanos que pueden notar nuestros puntos ciegos. Nosotros no podemos notar cuando estamos alejándonos de la fe, el pecado es engañoso y cuando nos atrapa, nos hace creer que estamos bien mientras nos alejamos de la sincera obediencia a Cristo.

Dios nos llama a que nos ayudemos unos a otros a poner nuestra mirada en Cristo. Estamos llamaos a mostrarle a nuestros hermanos como es que Jesus es Mejor que cualquier otra cosa, el es bueno, glorioso y vale la pena seguir confiando en él.

Dios desea que la gloria de su hijo sea el centro de nuestras interacciones:

Juan 16:14 NBLA

»Él me glorificará, porque tomará de lo Mío y se lo hará saber a ustedes.

Juan 17:5 NBLA

»Y ahora, glorifícame Tú, Padre, junto a Ti, con la gloria que tenía contigo antes que el mundo existiera.

Un pastor dijo acertadamente que: "Dios ordena que la seguridad eterna sea un proyecto comunitario porque no quiere que su Hijo sea olvidado como una vacunación, sino que sea celebrado cada día como el mayor tesoro del universo”

C. Sirviendo a Cristo.

El autor de Hebreos dice que todos los que permanecen en la fe, son participantes de Cristo.

Participar de Cristo involucra no solo identificarnos con el en su vida, muerte y resurrección, esto nos justifica, participar de Cristo implica también padecer con él mientras le servimos fielmente en este mundo.

Mantenemos la fe resolviendo cada día rendir cada área de nuestra vida al servicio de nuestro Señor, resolviendo cada día vivir para hacer avanzar su reino como él nos ha llamado.

Una de las cosas que Israel no hizo a causa de la dureza de corazón, fue resistir a Dios que les ordeno conquistar la tierra de Canaan para su gloria. Ellos fueron desobedientes, no participaron de la obra de Dios, no se asociaron con Dios, aun cuando participaron de las bendiciones de Dios al salir libres de Egipto. Su desobediencia fue una expresión de su incredulidad. Hermano, sirve a Cristo y a sus propósitos.

D. Esforzándonos por entrar en el reposo de Dios - 4:11

El esfuerzo consiste en confiar en Dios. alguien dijo:

“La vida cristiana es una vida de confianza cada día, cada hora, en las promesas de Dios para ayudarnos y guiarnos a tener cuidado de nosotros y perdonarnos y llevarnos hacia un futuro de santidad y gozo que satisfará infinitamente nuestros corazones, más que si le olvidáramos y confiáramos en nosotros mismos o en las promesas de este mundo. Y la confianza de cada día, de cada hora, en las promesas de Dios no es automática. Es el resultado del esfuerzo diario, y es el resultado de un temor adecuado”

Este es el punto del autor de Hebreos.... la fe es el resultado de un esfuerzo diaria en meditar en las promesas de Dios, entendiendo que la palabra es viva y eficaz, ella llega hasta lo mas profundo de nuestro corazón y no pone delante de Dios al descubierto, para que siempre llevemos cuentas cortas y vivamos en arrepentimiento y fe.

La fe es también el resultado de un santo temor no entrar al reposo de Dios (4:1) es un temor a la ira de Dios.

No quiere decir que vamos a vivir con un constante temor a perdernos. Una ilustración me ayudo a comprender mejor como funciona el temor:

Cuando ustedes eran pequeños, su padre y su madre les decían con determinación “nunca corran en la calle. Agarren siempre mi mano, pueden morir atropellados”. En otras palabras, teman correr en la calle. ¿esto significaba que no podíamos divertirnos en el ante-jardin de la casa o en algún parque? No, de hecho, la mayoría del tiempo ustedes ni pensaban en cuán peligrosa era la calle. Solo cuando se acercaban a la calle y quizás cuando la pelota caía rodando a la calle, o quizás cuando alguien les tentaba a correr cruzando la calle cuando no debían hacerlo. Solo entonces sentían ustedes el temor de la calle. El resto del tiempo el temor les mantenía jugando en lugares donde no tenían que sentir temor alguno.

Así funciona el temor a la incredulidad. Teman a la incredulidad, cuando las circunstancias los empujen a sentirse tentados a enfrentarse a ella, sientan terror y mantengan en un lugar seguro, echando mano de los medios de gracia.

Conclusión:

Dios nos ayude a escuchar hoy su advertencia y su exhortación a permanecer en la fe. Riego que ninguno endurezca su corazón.

Oremos