La Resurrección, Romanos 1:3-4
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Introducción:
Introducción:
Promesas de políticos, la mayoría del tiempo, son equivalentes a mentiras descaradas. Pero ¿qué pensarías de un político quien cumplió plenamente cada una de las promesas que hizo? Sería algo extraordinario, tendría la capacidad de hacer muchos cambios significativos.
En nuestros tiempos desesperanzados, anhelamos por tal figura que simplemente pueda cumplir sus promesas. Lamentablemente no es algo humanamente posible, debido a la pecaminosidad del hombre mismo.
Pero hay uno que si, hasta ahora, aunque difícil de creerlo, ha cumplido cada una de las promesas que ha hecho, en el tiempo apropiado. ¿Quién es este? Estamos estudiando su historia en esta serie…
La historia hasta ahora...
Génesis 1:31 — Dios creó todo
Génesis 1:27 — Todos creados a imagen de Dios
Génesis 3:6 — La Caída lo cambió todo
Génesis 3:15 — La promesa de redención de Dios
Génesis 12:2-3 — La Simiente de Abraham
Génesis 49:10 — La Simiente Real de Judá
Éxodo 12:23 — El Cordero Pascual
2 Samuel 7:13 — El Linaje de David
Isaías 53:6 — El Siervo Sufriente
Ezequiel 36:26 — La Vida Nueva Prometida
Isaías 65:17 — La Nueva Creación
Juan 19:30 — La Cruz
“Dios es el creador de todo, y todo lo que creó fue bueno. Dios creó al ser humano para ser Sus representantes en este mundo bueno, pero su decisión de desobedecer a Dios y ceder a la tentación resultó en la maldición del pecado sobre toda la humanidad y la creación. Sin embargo, junto con las consecuencias del pecado, Dios da esperanza: la promesa de la redención. Por medio de la familia de Abraham, y específicamente por medio del linaje real de Judá, David, las bendiciones del pacto vendrían al mundo. Debido a que el pueblo era culpable y merecían la muerte, los sacrificios de la ley Mosaica revelaron más claramente su necesidad de un substituto— el Siervo Sufriente. A través del Siervo y la obra del Su Espíritu, Dios establecería y daría vida a Su pueblo in el nuevo cielo y nueva tierra. Jesús es Aquel por medio del cual todas estas promesas encuentran su cumplimiento, primeramente en Su muerte por el pecado”.
Hoy veremos como el cumplimiento también se ve en Su resurrección victoriosa y reino como Rey.
Si, ese individuo es Dios, quién ha cumplido toda promesa que ha hecho relevante al tiempo pasado y presente. Los únicos que faltan cumplir son aquellas relacionadas al futuro en la historia del mundo.
La cruz fue el evento más importante de la historia del mundo, al entenderlo junto con la resurrección. Son dos lados del mismo evento— la reconciliación del Dios Todopoderoso y Santo con el hombre finito y pecador.
Si Cristo no hubiera hecho Su sacrificio en la cruz, no hubiera pagado el precio para nuestra redención. Si Cristo no hubiera resucitado, Su sacrificio no hubiera significado nada, porque hubiera demostrado que no era quién dijo ser, y Su obra sería inválida.
Sin la resurrección, Su muerte sería un evento sin efecto ni afirmación divina.
Sin la resurrección, ninguna de las promesas de Jesús serían confiables.
Sin la resurrección, no habría fundamento para la iglesia.
Sin la resurrección, no habría un ejemplo perfecto de la vida en sacrificio.
Sin la resurrección, no habría ninguna paz ni seguridad futura de un renuevo y redención del mundo.
Sin embargo, Cristo es quien se declaró ser, el Mesías, el Hijo de Dios, el Dios Salvador, y Su resurrección lo comprueba.
acerca de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era del linaje de David según la carne, que fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos,
En esta vida, la resurrección significa que el creyente puede experimentar la vida en Dios, la resurrección a una eternidad en presencia de Dios, y la vida abundante y verdadera paz a través de esta vida con Dios.
La resurrección impacta nuestro entendimiento del perdón de pecados y nuestra justificación ante Dios. Implica esperanza en nuestra lucha corriente con el pecado.
La resurrección significa que podemos ser unido a Cristo. Significa que Él realmente nos ayuda e intercede por nosotros en esta vida. Significa que nuestro pasado, presente, y futuro tiene propósito y significado real en el plan de Dios.
Cada creyente puede vivir en la victoria de la resurrección de Cristo al entender las razones por la que Él tuvo que resucitar.
La resurrección significa que Jesús es el Mesías prometido.
La resurrección significa que Jesús es el Mesías prometido.
“linaje de David” - Las promesas de Dios acerca de Jesús, el descendiente del rey David, Rom. 1:1-3.
Pablo, siervo de Jesucristo, llamado a ser apóstol, apartado para el evangelio de Dios, que él había prometido antes por sus profetas en las santas Escrituras, acerca de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era del linaje de David según la carne,
“según la carne” - Jesús es 100% hombre, nuestro representante victorioso ante el Padre.
La promesa del establecimiento del trono de David, Is. 11:1-2; 2 Sam. 7:13. Tenía que por reinar eternamente como descendiente de David y cumplimiento de la promesa de un reino eterno.
Isaías 11:1–2 (RVR60)
Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.
El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.
El Mesías venidero era toda la esperanza del pueblo de Dios, Jer. 23:5-6.
He aquí que vienen días, dice Jehová, en que levantaré a David renuevo justo, y reinará como Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra. En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado; y este será su nombre con el cual le llamarán: Jehová, justicia nuestra.
Juan el Bautista afirmó que Jesús era el indicado, el Mesías Prometido, Jn. 1:25-27, 29.
Juan 1:25–27, 29 (RVR60)
Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta? Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis. Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.... El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
Jesús constantemente hacía recordar a quienes hablaba que las Escrituras (nuestro AT) proclamaban su venida, Jn. 5:39, 46-47.
Juan 5:39, 46-47 (RVR60)
Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;… Porque si creyeseis a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él. Pero si no creéis a sus escritos, ¿cómo creeréis a mis palabras?
La desilusión de los discípulos, es respondida por Jesús mostrando que el Mesías debía padecer, Luc. 24:21, 26-27.
Lucas 24:21, 26-27 (RVR60)
Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel; y ahora, además de todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha acontecido… ¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían.
Pablo lo proclamó a quienes les predicaba, Hch. 17:2-3.
Y Pablo, como acostumbraba, fue a ellos, y por tres días de reposo discutió con ellos, declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, que era necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos; y que Jesús, a quien yo os anuncio, decía él, es el Cristo.
Este descendiente de David, Jesucristo, fue el cumplimiento de todas las promesas de Dios a Su pueblo, pero esto era solo el comienzo, la inauguración del reino de Dios. En la resurrección, fueron confirmados todas las promesas de Dios a Su pueblo.
Los profetas del AT veían las revelaciones de Dios acerca del futuro como cimas de montaña, en los cuales se ven los picos, pero no se ve la distancia entre las montañas mismas.
Perspectiva profética
Perspectiva profética Joel
La venida de Jesús marcó el cumplimiento de las promesas de Dios a Su pueblo, sin embargo era sólo el comienzo de los cumplimientos.
Ilustración: La resurrección significa que Jesús era el Mesías prometido.
Traducido y modificado: “A modo de ilustración, digamos que vamos al aeropuerto a recoger a una persona que nunca hemos conocido o visto antes, como un favor para un amigo. Nuestro amigo dijo que esta persona volará de Amsterdam a Buenos Aires en el vuelo 257 de KLM Airlines. Ese vuelo aterrizará a las 3:00 pm en el aeropuerto de Ezeiza. Nuestro amigo procede a dar más información: “Esta persona lo recibirá en el área de recogida de equipaje dos. Tiene piel bronceada, ojos marrones y cabello negro. Es bastante bajo y de aspecto normal. Llevará una sudadera gris para estar cómodo en su viaje. El frente de su sudadera con capucha dirá: "¡Todo es más divertido en Ámsterdam!" Nació originalmente en Ámsterdam pero se mudará a Buenos Aires para asistir a la universidad. Su número de documento es xxxxxxx. Su número de teléfono es xxxxxxxx. Su correo electrónico es xxxxxx”. Pensaríamos: “¡Eso es bastante completo! ¡Deberíamos poder encontrar fácilmente a esta persona! Luego, Susan agrega que esta persona se parará en el área de reclamo de equipaje y gritará: “¡Soy amiga de Susan! ¡Yo soy el que estás buscando! Soy de Ámsterdam. ¡Estoy aquí en Buenos Aires para ir a la universidad! Probablemente pensaríamos: "Ok... esto es demasiado". Luego nuestro amigo procede a dar aún más información…
“Comparto esa exageración al decir, la Biblia es muy así al dar detalles sobre la venida del mesías. Hay más de 300 profecías sobre Cristo en el Antiguo Testamento. Todos fueron dados al menos 400 años antes de que él naciera, algunos miles de años antes de su nacimiento. Treinta y tres de estas profecías se cumplieron el día de su crucifixión.”
https://bible.org/seriespage/8-evidence-christ-s-deity-prophecy-and-miracles#_ftn2
Aplicación: La resurrección significa que Jesús era el Mesías prometido.
La Resurrección significa que Jesús es el verdadero Hijo de Dios.
La Resurrección significa que Jesús es el verdadero Hijo de Dios.
“fue declarado Hijo de Dios” - quiere decir que Su Deidad fue afirmado, destacado, confirmado. Fue el hecho de su resurrección que sin duda alguna presentó a Jesús como el Hijo de Dios a sus primeros seguidores.
Tenía que demostrar que realmente era el Hijo de Dios, Deidad en carne humana, Jn. 1:14.
Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Jesús demostró por las señas que hacía, Jn. 3:2, Luc. 5:20-25.
Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él.
Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios? Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. Al instante, levantándose en presencia de ellos, y tomando el lecho en que estaba acostado, se fue a su casa, glorificando a Dios.
Jesús también lo dio a entender repetidamente, Jn. 9:35-37; 11:27.
Juan 9:35–37 (RVR60)
Oyó Jesús que le habían expulsado; y hallándole, le dijo: ¿Crees tú en el Hijo de Dios?Respondió él y dijo: ¿Quién es, Señor, para que crea en él?Le dijo Jesús: Pues le has visto, y el que habla contigo, él es… Juan 11:27 (RVR60) Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo.
Su resurrección fue lo que convenció a sus propios hermanos que Él era el Hijo de Dios, Jn. 7:5; 1 Cor. 15:4, 7; Hch. 1:14.
Juan 7:5 (RVR60) Porque ni aun sus hermanos creían en él. 1 Corintios 15:4 (RVR60) y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; 1 Corintios 15:7 (RVR60) Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles; Hechos de los Apóstoles 1:14 (RVR60) Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.
El ser Hijo de Dios es demostrado en Su poder de dar Su vida y volverla a tomar, Jn. 10:17-18.
Juan 10:17–18 (RVR60)
Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.
También le da autoridad para juzgar, Hch. 10:42.
Y nos mandó que predicásemos al pueblo, y testificásemos que él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos.
Es el testimonio de Juan el Bautista, y la razón por la que escribe el evangelio de Juan el discípulo de Cristo, Jn. 1:34; 20:31.
Juan 1:34 (RVR60)
Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios… Juan 20:31 (RVR60) Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
Ilustración: La resurrección significa que Jesús era el verdadero Hijo de Dios.
Aplicación: La resurrección significa que Jesús era el verdadero Hijo de Dios.
La Resurrección significa que Jesús derrotó al pecado y la muerte.
La Resurrección significa que Jesús derrotó al pecado y la muerte.
Tenía que derrotar al pecado y la muerte, Col. 2:12-15.
Colosenses 2:12–15 (RVR60)
sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos. Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados, anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz, y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.
En Su resurrección tenemos victoria contra el pecado y la muerte, 1 Cor. 15:17-20, 55-57.
y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados. Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron. Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres. Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.
¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
En Su resurrección, el poder de la resurrección obra en cada creyente para hacerles una criatura nueva, siendo moldeado a la imagen de Jesucristo, Rom. 6:4; 8:11; 2 Cor. 5:17.
Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Ilustración: La resurrección significa que Jesús derrotó al pecado y la muerte. VIDEO: Serpiente decapitado mordiendo.
Letra “Sólo en Jesús”:
Su cuerpo en tierra reposó
Luz en la oscuridad moró
Mas de la tumba ascendió
Día glorioso ¡Él vive hoy!
Y en su victoria libre soy
No reina el pecado en mí
Porque Él es mío suyo soy
Pues con Su sangre me compró
Ya no hay miedo del morir
Mora el poder de Dios en mí
Desde el nacer hasta el final
Cristo mi vida guiará
Ni Satanás ni el hombre vil
Pueden quitarme de Su redil
Hasta que El venga o voy a Él
En el poder de Cristo estoy
Aplicación: La resurrección significa que Jesús derrotó al pecado y la muerte.
Por ende, como criaturas nuevas, debemos fijar nuestras vidas en esa victoria, Col. 3:1-4.
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.