EL REGALO ES DIOS

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Juan 14:15–26 NBLA
15 »Si ustedes me aman, guardarán Mis mandamientos. 16 »Entonces Yo rogaré al Padre, y Él les dará otro Consolador para que esté con ustedes para siempre; 17 es decir, el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque ni lo ve ni lo conoce, pero ustedes sí lo conocen porque mora con ustedes y estará en ustedes. 18 »No los dejaré huérfanos; vendré a ustedes. 19 »Un poco más de tiempo y el mundo no me verá más, pero ustedes me verán; porque Yo vivo, ustedes también vivirán. 20 »En ese día conocerán que Yo estoy en Mi Padre, y ustedes en Mí y Yo en ustedes. 21 »El que tiene Mis mandamientos y los guarda, ese es el que me ama; y el que me ama será amado por Mi Padre; y Yo lo amaré y me manifestaré a él». 22 Judas (no el Iscariote) le dijo*: «Señor, ¿y qué ha pasado que te vas a manifestar a nosotros y no al mundo?» 23 Jesús le respondió: «Si alguien me ama, guardará Mi palabra; y Mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada. 24 »El que no me ama, no guarda Mis palabras; y la palabra que ustedes oyen no es Mía, sino del Padre que me envió. 25 »Estas cosas les he dicho estando con ustedes. 26 »Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en Mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he dicho.
Si ustedes se fueran a un lugar en donde no los volverían a ver, qué ledirían a sus seres más amados?

¿Qué le dejarían a sus seres más amados?

Contexto:

El Señor está dando un discurso de consuelo y de ánimo a sus discípulos.
A pesar de su partida no se desanimen ni se llenen de desesperanza.
Les prepararé un hogar
Vendré otra vez por ustedes
Harán cosas mayores a las que yo he hecho
Juan 14:15 NBLA
15 »Si ustedes me aman, guardarán Mis mandamientos.
Juan 14:21 NBLA
21 »El que tiene Mis mandamientos y los guarda, ese es el que me ama; y el que me ama será amado por Mi Padre; y Yo lo amaré y me manifestaré a él».
Juan 14:23 NBLA
23 Jesús le respondió: «Si alguien me ama, guardará Mi palabra; y Mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.
Juan 14:24 NBLA
24 »El que no me ama, no guarda Mis palabras; y la palabra que ustedes oyen no es Mía, sino del Padre que me envió.

Guardar la palabra de Jesús, los mandamientos de Jesús.

A sus discípulos les está diciendo, si de verdad me aman, no se queden lamentándose cuando yo no esté, no se encierren.
Sino sigan cumpliendo mi palabra, hagan lo que los he mandado a hacer.

Guardar los mandamientos de Jesús es nuestra forma de expresar el amor que tenemos hacia él.

El que ama a Dios cumple sus mandamientos, el que no cumple sus mandamientos no lo ama.
El amor hacia Dios no es un sentimiento, el amor es la decisión diaria de guardar los mandamientos de Jesús.
No se trata de si siento o no siento que amo a Dios, se trata de Señor yo te amo y por eso guardo tu palabra.

Los discípulos tenía el desafío de amar a Dios no por sus sentimientos porque probablemente los sentimientos iban a mermar al no tener a Jesús en medio de ellos, pero ahora debían amar a Jesús por sus convicciones y sus principios basados en la fe que tenían en las palabras de Jesús.

La realidad nuestra es igual

En medio de los afanes de la vida, los temores, las ausencias, las carencias y los vacíos:
Nos cuesta mucho amar. Nos cuesta amar a Dios.
Nuestra forma de ser, nuestra naturaleza caída, nuestros deseos, van en la dirección contraria de amar a Dios.
Amamos más nuestras propias vidas que ha Dios.
Preferimos servirnos a nosotros mismos que guardar los mandamientos de Dios.
Preferimos satisfacer nuestros placeres que guardar los mandamientos del Señor.
Analice su vida, imagínese el vídeo de su vida. Cuántas veces esta semana escogió sus propias ideas, deseos, placeres, pensamientos en vez de las palabras de Jesús. En vez de los mandamientos de Jesús.
Esa es nuestra realidad todas las semanas.

Nuestro amor hacia Dios no está determinado por lo que decimos, sino por lo que hacemos. Si guardamos su palabra amamos a Dios

Muchos de nosotros nos encanta saber que Dios nos ama y que nos ha salvado pero no queremos amar a Dios guardando su palabra.

Hay promesas para los que guardan sus palabras, hay promesas para los que aman al Señor.

Pero estas promesas son para los que aman al Señor.

A veces nosotros vivimos reclamando y declarando las promesas de Dios sobre nuestra vida pero no guardamos su palabra.
Jesús cuando está hablando de esto, está siendo excluyente.
El que guarda mis palabras me ama y tiene promesas pero el que no las guarda no.

Jesús da 5 promesas pero son para los que guardan sus palabras. Si usted no guarda la palabra de Jesús, esto no es para usted.

El Señor quiere que cumplamos su plan, sus mandamientos, sus palabras, que caminemos esta vida como cristianos, como sus discípulos, no escondidos, no a medias, no para nosotros mismos sino que vivamos para extender el reino y llevar su gloria a las demás personas que aún no lo conocen.
El Señor quiere que vivamos el evangelio en todas partes y en todo tiempo a pesar de las dificultades de la vida.

Para eso nos promete darnos lo necesario para permanecer y seguir adelante.

Jesús promete algunas cosas para aquellos que guardan los mandamientos.

Será amado por Mi Padre
Yo lo amaré
Me manifestaré en él.
Vendremos a él y haremos con él morada
Les daré el Espíritu de Verdad
Juan 14:16–17 NBLA
16 »Entonces Yo rogaré al Padre, y Él les dará otro Consolador para que esté con ustedes para siempre; 17 es decir, el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque ni lo ve ni lo conoce, pero ustedes sí lo conocen porque mora con ustedes y estará en ustedes.
Juan 14:18 NBLA
18 »No los dejaré huérfanos; vendré a ustedes.
Juan 14:19–20 NBLA
19 »Un poco más de tiempo y el mundo no me verá más, pero ustedes me verán; porque Yo vivo, ustedes también vivirán. 20 »En ese día conocerán que Yo estoy en Mi Padre, y ustedes en Mí y Yo en ustedes.
Juan 14:26 NBLA
26 »Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en Mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he dicho.

Yo rogaré al Padre, Él les dará otro Consolador

Vemos en estas palabras de Jesús 3 elementos de la Trinidad
La interacción del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo:
el Hijo que ruega, el Padre que da y el Espíritu que consuela.

No los dejaré huérfanos.

Les dejaré el Espíritu Santo para que esté con ustedes para siempre.

El Espíritu Santo

Ayudador,

Paráclito.
Acompañe. cuide, ayude, defienda, consuele, soporte.

Espíritu de Verdad

Mora con ustedes
Estará con ustedes
Les enseñará todas las cosas
Les recordará todo lo que les he dicho.

El mundo no lo conoce.

Este ayudador solo está para aquellos que reconocen a Jesús como Señor y Salvador. El cristiano tiene al ayudador de su lado cuidando su vida.

El Espíritu Santo es Dios

El E.S. no es una fuerza, no es un poder especial. El espíritu Santo es Dios.
Jesús es claro en mostrar que E.S. es una persona.
Es el ayudador, es quien el Padre enviará en mi Nombre
Él les enseñará todas las cosas.
El Espíritu Santo es Dios .

Dios ahora se quedó permanentemente en nuestras vidas.

El E.S. es Dios ayudando al cristiano en el día a día.

El espíritu de Dios como lo vemos en muchas ocasiones en el A.t estaba en las personas pero no estaba de manera permanente en todas las personas estaba en algunos y iba y venía.
Ahora a partir de Cristo, El Espíritu Santo está presente todos los días, todo el tiempo en la vida del cristiano, en los creyentes y en los que guardan la palabra de Jesús.

Este es un consuelo enorme para los discípulos.

No tendrán más a Jesús pero Dios estará en ellos por medio del E.S.

Es un mayor consuelo que antes. Antes teníamos que estar en un lugar específico para estar con Jesús, ahora Dios estará viviendo en nosotros todo el tiempo.

No quedarán huérfanos, no serán huérfanos, Jesús no los abandona sino que más bien ahora estará en ellos, ahora morará, vivirá con ellos y estará con ellos todo el tiempo.

Jesús le promete a sus discípulos y esto es para nosotros también.

Para aquellos que guardan lo que les ha dicho.
Dios ya no estará lejos, sino que vive en nosotros, está en nosotros, nos acompaña todo el tiempo y nos consuela mientras esperamos la venida de Jesucristo por segunda vez para ser llevados al cielo.

El E.S. es Dios presente en la vida de los cristianos.

Que además de acompañar y consolar.
Nos enseña las cosas que so verdad, nos guía a la verdad, y nos recuerda todas las palabras que nos ha enseñado el Señor.
Esto es fundamental,
Jesús dice guarden mis palabras, recuérdenlas, guárdenlas, cúmplanlas.
Pero tranquilos que la tarea va a ser más fácil porque les dejo al E.S que les recordará las cosas, se las enseñará y les ayudará a entenderlas.
Hoy para nosotros es mucho más sencillo entenderlo todo, aplicarlo todo, predicarlo, enseñarlo y vivirlo porque el Espíritu Santo nos ha abierto el entendimiento de las cosas, nos recuerda las verdades, nos guía a ellas, nos las explica en el corazón y nos da luz de las cosas.

Aplicación Práctica

Mi tarea es muy sencilla, lea las palabras de Jesús, busque las palabras y los mandamientos de Jesús, que el E.S. se va a encargar de explicarlos, enseñarlos y recordarlos.
Jesús aquí está consolando a sus discípulos diciéndoles,
No se angustien, me voy pero les dejo el E.S. que los va a acompañar, consolar, animar, enseñar y recordar lo que deben hacer.
ANÍMENSE QUE LO MEJOR QUE LES PUEDE PASAR, PASARÁ AL IRME PORQUE DIOS VIVIRÁ EN USTEDES.
Ese mensaje es para nosotros.

DIOS VIVE EN NOSOTROS.

Antes estábamos separados ahora por medio de Jesús, ESTAMOS UNIDOS, EL VIVE EN NOSOTROS.
SU ESPÍRITU MORA EN MI.
SU ESPÍRITU ME CONSUELA
SU ESPÍRITU ME ANIMA
SU ESPÍRITU ME SOSTIENE
SU ESPÍRITU ME FORTALECE
SU ESPÍRITU ME GUÍA A LA VERDAD
SU ESPÍRITU ME ENSEÑA LAS COSAS
SU ESPÍRITU ME RECUERDA LAS ENSEÑANZAS
SU ESPÍRITU PERMANECE EN MI DÍA A DÍA.
DIOS ESTÁ CON NOSOTROS EN TODO TIEMPO Y EN TODO LUGAR Y SIN EL NO PODRÍAMOS ESTAR AQUÍ.
SOLO A TRAVÉS DEL E.S PODEMOS COMPRENDER EL EVANGELIO, CREER EN EL EVANGELIO Y VIVIR DE ACUERDO AL EVANGELIO.
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