Siete Versículos para Iniciar el Día.

Siete Versículos para Iniciar el Día.

Buenas noches me da mucho gusto saludarlos en este lunes 25 de octubre. Yo soy Hector Viruega y soy el responsable de los grupos pequeños de nuestra iglesia, Satélite Iglesia Cristiana.

Hay un dicho en inglés, que hasta es el nombre de un restaurante. El dicho es: Thanks God it’s Friday, o dicho en español, gracias a Dios que es viernes. Y es que la mayoría de las personas trabajamos de lunes a viernes, y por lo general descansamos lo que llamamos el fin de semana que son los días sábado y domingo.

Digo por lo general, porque por ejemplo mis hermanos que viven en Playa del Carmen, para ellos los fines de semana no son tan de descanso, ya que para ellos el trabajo es prácticamente todos los días, o sus días de descanso no son necesariamente sábado y domingo.

Pero volviendo a lo que la mayoría de las personas hacemos, trabajar de lunes a viernes, por lo general cuando llega el jueves decimos que es el casi-viernes, y al llegar al viernes, decimos thanks God it’s Friday.

Sin embargo, por otra parte, cuando llega el lunes, muchas personas se deprimen. Por lo mismo, es el inicio de la semana laboral. Yo recuerdo hace mucho muchos años que para mi los lunes eran días muy difíciles ya que estaba en un trabajo donde estaba muy presionado. Y sinceramente quería ponerle una pausa al domingo y que no llegara el lunes.

Ahora bien, ¿sabe usted que hay un día que supuestamente es el día más triste del año? Se trata del llamado Blue Monday y es el tercer lunes de enero.

En el año 2005 un profesor de la Universidad de Cardiff, especializado en psicología, aseguró el descubrimiento de la fórmula matemática que determina el día más triste del año.

Para esta persona cada tercer lunes de enero es el día del año en el que se acumula más tristeza o carga negativa en el cuerpo. ¿Motivos? La temida cuesta de enero por el gasto realizado en Navidad, el frío, la desmotivación y los propósitos de Año Nuevo incumplidos, entre otros.

No se si esto sea cierto o no, y tampoco se si a usted le desagradan los lunes, pero es un hecho que hay días que nos cuesta más trabajo que otros. Días en los que nos cuesta más trabajo levantarnos de la cama.

Tal vez días donde nos sintamos tristes, desmotivados, nerviosos, temerosos, no lo se; por eso, hoy quiero que veamos 7 versículos de la Biblia para arrancar el día.

Antes de comenzar, quiero decirte que la Palabra de Dios es tan perfecta que sería imposible aseverar que estos son los únicos 7 versículos para arrancar el día, o los mejores versículos para hacerlo.

Tampoco quiero que piensen que este es un nuevo ritual para arrancar el día y que te vaya bien. No se trata de eso.

Yo les puedo afirmar que podríamos encontrar muchos más versículos, pero, número 1, estos son los que Dios puso en mi corazón compartir con ustedes hoy, y número 2, quise escribir 7 porque bueno, una semana tiene siete días.

Así que habiendo hecho estos disclaimers, vamos a comenzar.

1. Dios hizo este día especialmente para ti.

24Este es el día que el Señor ha hecho; regocijémonos y alegrémonos en él. Salmo 118:24 LBLA

Hay días cuando lo menos que queremos hacer es alegrarnos. Nuestro ánimo está decaído, nuestra situación no está al alcance de nuestras manos, la tristeza o culpabilidad es abrumadora.

Algo maravilloso de la Escritura es que no niega los sentimientos humanos. ¿Alguna vez te has identificado con los salmistas cuando ellos escriben que se sienten agobiados? Es maravilloso que podemos ver que no importa cuán deprimidos se sintieran los escritores bíblicos de los Salmos, siempre fueron sinceros con Dios en cuanto a cómo se sentían.

Pero ¿sabes algo muy interesante de estos salmos de lamento? Es que, cuando hablaban con Dios, sus oraciones terminaban en alabanzas. No se quedaban con las quejas, sino que cerraban alabando y glorificando el nombre de Dios.

Por eso, lo primero que quiero decirle en esta noche es que cuando no sientas deseos de alegrarte, dile a Dios cómo te sientes realmente. Y vas a ver, vas a descubrir que Dios te dará una razón para hacerlo.

Ahora bien, el primer versículo en el que quiero que meditemos en esta noche es este:

24Este es el día que el Señor ha hecho; regocijémonos y alegrémonos en él. Salmo 118:24 LBLA

Para empezar, podemos reconocer que Dios nos ha dado este día para vivir y servirlo: así que, ¡alégrate![1]

Cada día es un regalo que Dios nos da: Éste es el día que el Señor ha hecho; y en él nos alegraremos y regocijaremos.

Tal vez digas, ¿cómo me puedo alegrar si estoy pasando por diversas pruebas? ¿Sabes por qué puedes alegrarte?

Porque Dios sabe por lo que estás pasando. El salmo 31:7 (LBLA) dice:

Me gozaré y me alegraré en tu misericordia, porque tú has visto mi aflicción; has conocido las angustias de mi alma,

Así que a pesar de nuestras aflicciones podemos alegrarnos porque eso no pasa desapercibido para Dios, sino que Él las conoce, y está atento a nosotros; y eso me lleva a un segundo punto, y es que:

2. El amor de Dios nunca se acaba.

22 El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota.

23 Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!

Lamentaciones 3:22 NVI

¿Cuál ha sido la más oscura experiencia en tu vida, el momento en que sentiste lo peor, tal vez hasta el punto de una extrema desesperación?

Para Jeremías y sus contemporáneos en Judá, fue la destrucción de Jerusalén. El magnífico Templo de los israelitas fue reducido a cenizas, los muros de la ciudad fueron derribados, la mayor parte de la población había sido muerta o deportada y sólo quedaron muriendo de hambre ancianos, mujeres y niños (Lm 2.10-12).

Sólo una verdad mantenía viva la esperanza: el conocimiento de la misericordia del Señor (3.22-24).

La misericordia de Dios (Heb. kjésed; véase Dt 7.9) comprende su amor imperecedero y la fidelidad hacia su pueblo. A pesar de las situaciones, Él nunca abandonaría a su pueblo.

No se si tu ahora te encuentres en una situación difícil, pero quiero decirte en esta noche que tampoco Dios olvidará a sus hijos hoy.

Su misericordia y su gracia han sido extendidos a aquellos que están en Cristo Jesús (Ro 8.1), y nada puede separarnos de su amor (8.31-39). Como resultado, podemos tener esperanza (5.1-5; 1 P 1.3-5), aun en medio de las circunstancias más tenebrosas (2 Co 1.8-11).

En el v. 23 se nos dice que cada día se nos presenta con una nueva oportunidad para descubrir y experimentar más del amor de Dios. Aun en medio de terribles sufrimientos, Jeremías encontró señales de clemencia porque la fidelidad de Dios es grande.

En estos versículos que hemos leìdo está el corazón del Libro de Lamentaciones. El consuelo, el carácter compasivo de Dios, quien permanece «lleno de gracia y de verdad» en cada situación (Éx 34.6, 7; Jn 1.14).[2]

Jeremías es conocido como el profeta llorón. Vivió en una época muy sombría para la historia de Israel. Escribió el libro de Lamentaciones, y ya desde el nombre del mismo nos damos cuenta del ánimo del escritor, sin embargo, en medio de este entorno vio un rayo de esperanza en toda la tristeza que lo rodeaba:

..las misericordias del SEÑOR jamás terminan, pues nunca fallan sus bondades; son nuevas cada mañana; ¡grande es tu fidelidad!

Cada mañana la ayuda del SEÑOR está disponible. Cada mañana Dios responde con agrado brindándonos ayuda cuando se la pedimos.

Por experiencia personal, Jeremías conocía la fidelidad de Dios. A pesar de la situación en la que estaban, Jeremías sabía que Dios también cumpliría Su promesa de restauración y bendiciones futuras, y creer en la fidelidad de Dios día tras día nos hace confiar en sus grandes promesas para el futuro.

Y eso me lleva al siguiente punto:

3. Puedes sentirte seguro en Dios

1 SEÑOR, tú eres mi Dios; te exaltaré y alabaré tu nombre porque has hecho maravillas. Desde tiempos antiguos tus planes son fieles y seguros.

Isaías 25:1 NVI.

Isaías exaltó y alabó a Dios porque se dio cuenta de que Él cumple sus planes según lo ha prometido. También Dios cumple las promesas que te hace a ti. Piensa en las oraciones que te ha contestado y alábalo por su bondad y fidelidad.[3]

Yo siempre les traigo a la memoria esos himnos retro.

¿Se acuerdan del himno “Oh Tu Fidelidad”?

Oh Dios eterno, tu misericordia

Ni una sombra de duda tendrás

Tu compasión y bondad nunca fallan

Y por los siglos el mismo serás

Oh tu fidelidad, oh tu fidelidad

Cada momento la veo en mí

Nada me falta, pues todo provees

Grande, Señor, es tu fidelidad

Tú me perdonas, me impartes el gozo

Tierno me guías por sendas de paz

Eres mi fuerza, mi fe y mi reposo

Y por los siglos mi Padre serás

Que bendición poder confiar en un Dios que no cambia, que lo que dice lo hace, que su compasión y bondad nunca fallan y que vemos su fidelidad siempre en nosotros, día tras día; por siempre y para siempre.

Ahora, quiero que vayamos al cuarto versículo en el que vamos a meditar.

4. No luchas solo.

19 Bendito sea el Señor, nuestro Dios y Salvador, que día tras día sobrelleva nuestras cargas. Salmo 68:19 NVI

El salmo cierra diciendo que Dios lleva nuestras cargas.

Este Salmo describe a Dios como un guerrero invencible y celebra sus victorias a favor de su pueblo. El ha mantenido su parte del pacto: Desde tiempos pasados El peleó por su pueblo (vers. 2–4), juzgó con justicia (vers. 5–7), proveyó sustento para el pueblo de su pacto (vers. 8–10), además de que aseguró la posesión permanente de la tierra (vers. 11–14), y ejerció efectivamente su reinado al librar a Israel y destruir a sus enemigos (vers. 19–23).

El salmista le hace ver a sus lectores que Dios es el que los ha acompañado siempre y el que ha peleado por ellos. Así que en nuestras luchas no estamos solos, Dios pelea por nosotros.[4]

Yo creo que nunca sabremos cómo el Señor “nos colma de beneficios” cada día de nuestra vida. Damos por sentado muchas de Sus bendiciones: vida, comida, casa, amigos, familia, ropa. ¡Pero siempre debemos alabarlo por quién es![5]

Esta sección de los salmos es una bendición, una bendición al Señor por sus misericordias de cada día en la vida del pueblo de la fe.

Nuestro Dios y Salvador es un gran título para el que salvó a Israel de Egipto, el que salvó a Israel de su pecado, el que continúa salvando a su pueblo en su vida diaria y el que glorificará a su pueblo en el futuro.[6]

Si analizamos un poco el contexto de este salmo, veremos que David ha relatado siglos de historia, pero aquí pasa al presente. Dios nos sostiene incluso ahora, y seguirá sosteniéndonos en el futuro.

Algo muy importante, que debemos reconocer al igual que lo hizo David, es que el rey pastor atribuye la “salvación” a Dios. Él no solo lleva nuestras cargas a diario, sino que, en última instancia, salva nuestras almas. No solo nos ha conducido en el pasado, y no solo nos llevará en el presente, sino que nos librará en el futuro, finalmente de la muerte. ¡Qué confianza podemos tener en este Dios maravilloso![7]

Vamos ahora al quinto versículo.

5. Deja que el Señor te guíe.

5 Confía en el SEÑOR de todo corazón, y no en tu propia inteligencia.

Proverbios 3:5 NVI

No se si a ti te pasa, pero en ocasiones se despierta uno en las madrugadas pensando que decisión debe tomar uno con relación a ciertas cosas.

Decisiones familiares, escolares, laborales, etc.

Cuando tenemos alguna decisión importante que tomar, a veces nos sentimos que no podemos confiar en nadie. Sin embargo, en el que siempre podremos confiar es en Dios, porque Él sabe lo que es mejor para nosotros.

Pablo escribe en la epístola a los Romanos que la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta.

Debemos confiar en Él completamente en todas las decisiones que tomemos. Esto no significa que debamos dejar de pensar con cuidado ni menospreciar la capacidad de razonamiento que Dios nos ha dado.

Significa, sin embargo, que no nos creamos sabios ante nuestros ojos. Siempre debemos estar dispuestos a escuchar lo que la Palabra de Dios y consejeros sabios nos guíen. Lo mejor que podemos hacer es llevar en oración nuestras decisiones a Dios. Utiliza la Biblia como guía y luego sigue la dirección de Dios. Él hará sus caminos derechos al encaminarlo y protegerlo.[8]

Si en verdad confiamos en Dios, le obedeceremos. Podemos pensar que nuestra sabiduría es suficiente, pero no lo es; necesitamos la sabiduría de Dios.

El versículo 5 no enseña que los cristianos debemos dejar de pensar y considerar los hechos al tomar decisiones, porque Dios espera que usemos nuestros cerebros. Más bien quiere decir que no debemos confiar en nuestras ideas y sabiduría; debemos pedirle a Dios que nos dirija (Stg 1.5).[9]

Siguiente punto.

6. Recuerda que Dios es bueno.

7 El Señor es bueno; es un refugio en el día de la angustia. El Señor conoce a los que en él confían. Nahum 1:7 RVC

Lo primero que hace el profeta Nahum es declarar que el SEÑOR es bueno. Y me gustaría que platicáramos un poco acerca del contexto de este pasaje.

Años antes Jonás había ido a predicar a Nínive y a pesar de que era una ciudad muy malvada, el pueblo se arrepintió y Dios no ejerció su juicio en contra de ella.

Más de cien años después, la idolatría, la violencia y la arrogancia regresaron a ella, por lo que ahora Nahum está de vuelta en esta ciudad profetizando un juicio de Dios sobre ella.

En Nahum encontramos que el profeta quiere decir que Dios es fiel en la administración de la justicia.

Para aquellos que le sirven, Jehová es… fortaleza en el día de la angustia, dice la RV60.

Y es interesante porque Nahum quiere hacer un contraste con las murallas de Nínive. Aunque parecían invencibles, proporcionarían poca protección a los que confiaran en ellas en el día del juicio de esa ciudad que sería destruida. Por otro lado, Dios es una fortaleza que no les fallará a aquellos que ponen su confianza en El.

Esta era una maravillosa promesa para la pequeña nación de Judá en aquellos días de crisis. Un gran imperio estaba al borde del desmoronamiento, y aunque sus murallas parecieran infranqueables, nada se compara con la verdadera fortaleza y refugio que es nuestro Dios.

Además es importante recordar que Jehová… conocea los que en él confían, y los cuida.[10]

7. Todo lo puedes en Cristo.

13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13 RV60

Este es posiblemente el versículo de la Biblia que es más sacado de contexto.

Por lo general lo usamos cuando queremos motivarnos para hacer algo.

Tengo que tratar con una persona que me cuesta trabajo: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Tengo que aprobar una materia en la que no soy muy bueno: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Tengo que terminar un trabajo que no se bien como hacerlo: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Y miren, está bien. Pero ese no es realmente el contexto del pasaje.

En los versículos anteriores Pablo escribe (v.11 y 12):

he aprendido a estar satisfecho en cualquier situación en que me encuentre. 12 Sé lo que es vivir en la pobreza, y lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a vivir en todas y cada una de las circunstancias, tanto a quedar saciado como a pasar hambre, a tener de sobra como a sufrir escasez.

Para Pablo las circunstancias no eran lo más importante. Es más, esta carta la escribe desde la prisión.

Pablo estaba contento porque pudo ver la vida desde la perspectiva de Dios. Se concentró en lo que se suponía que debía hacer, no en lo que sintió que debía tener. Tenía sus prioridades definidas y estaba agradecido por cada cosa que Dios le había dado.

Pablo se había despegado de las cosas no esenciales a fin de poder concentrarse en lo eterno.[11]

Cierro diciéndote, tal vez estemos en una situación de abundancia, o tal vez estemos en una situación de escasez, y aquí quiero que le agregues lo siguiente:

· De salud

· De economía.

· De trabajo.

· De felicidad.

· No sé de que, pero sea lo que sea que estés enfrentando o tu situación, todo lo puedes en Cristo que te fortalece.

Comentarios finales.

Que Dios les bendiga.

[1] Biblia del diario vivir. 2000. Electronic ed. Nashville: Editorial Caribe. [2] Nuevo comentario ilustrado de la biblia. 2003. Nashville: Editorial Caribe. [3] Biblia del diario vivir. 2000. Electronic ed. Nashville: Editorial Caribe. [4]Hernández, Eduardo A., Lockman Foundation. 2003. Biblia de estudio: LBLA. La Habra, CA: Editorial Funacion, Casa Editoral para La Fundacion Biblica Lockman. [5] Stanley, Charles F. 2005. La Biblia de principios de vida de Charles F. Stanley: Nueva versión King James. Nashville, TN: Biblias Nelson. [6] Neuvo comentario ilustrado de la biblia. 2003. Nashville: Editorial Caribe. [7]Platt, David. 2023. «DIOS EN MOVIMIENTO (SALMO 68)». En Exaltación de Jesús en Salmos 51–100, editado por Daniel L. Akin, Tony Merida, y David Platt, Sal 68:19-20. Comentario Expositivo Cristocéntrico. Bellingham, WA: Editorial Tesoro Bíblico. [8] Biblia del diario vivir. 2000. Electronic ed. Nashville: Editorial Caribe. [9]Wiersbe, Warren W. 1995. Bosquejos expositivos de la Biblia: Antiguo y Nuevo Testamento. Electronic ed. Nashville: Editorial Caribe. [10]Dunning, Ray H. 2010. «El Libro de NAHUM». En Comentario Bíblico Beacon: Los Profetas Menores (Tomo 5), 242. Lenexa, KS: Casa Nazarena de Publicaciones. [11] Biblia del diario vivir. 2000. Electronic ed. Nashville: Editorial Caribe.