Consejo y oración para hoy
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3 de noviembre
3 de noviembre
Isaías 41:10 (RVR60)
No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
La fuente de nuestra confianza y seguridad debe estar puesta solo en Dios; la fuente de nuestra fortaleza debe ser la fuerza, la ayuda y el sustento que Dios nos da.
Hay dos verdades sobre las que se fundamenta nuestra confianza y fortaleza:
La primera verdad es que, Dios está conmigo. Esta verdad es la que debe alejar todo temor de nuestras vidas. Dios está conmigo no porque yo lo quiera sino por que El ha decidido estar de mi lado. El nos escogió para que estuviésemos a su lado, El ha decidido estar a nuestro lado en el momento de nuestra necesidad.
La segunda verdad es que, él es nuestro Dios. Los seres humanos tienen la libertad para escoger a quien adorar. En la antigüedad era fácil verlo, las naciones alrededor de Israel habían decidió construir sus propios dioses de metal pidiendo a sus artesanos que los elaboraran con sus manos.
Saber que Jehova, El Dios de Israel, El Dios de la Biblia es nuestro Dios, es lo que quita todo desaliento de nuestra vida, al saber que él es el creador de todo, el que tiene control de todas las cosas, el que nos defiende de nuestros enemigos, el que extiende su brazo para ayudarnos y manifestar su justicia, el que hace brotar los ríos que sacian nuestra sed.
Cuando el temor y el desaliento quieran invadir mi vida, debo elevar mi mirada a Dios en quien confío, debo centrar mi atención no en mi mismo, ni en las circunstancias que me rodean sino en las promesas que Dios me ha hecho en su palabra.
Yo soy tu Dios, Yo estoy contigo son dos declaraciones sobre las cuales voy fundamentar mi seguridad y confianza hoy.
La fortaleza y sustento que Dios me ofrece serán el alimento que hoy dará vigor a mi vida.
Oremos,
Padre nuestro que tu presencia nos quite el temor en medio de las circunstancias que vivimos.
Te doy gracias porque en mi debilidad puedo decir: Fuerte soy, porque tu estás conmigo para fortalecerme y sustentarme.
Te pido que hoy me guíes con tu mano a tomar decisiones en aquellas áreas de mi vida, donde tengo temor a hablar o actuar.
También oro por los que equivocadamente están confiando en si mismos o han creado sus propios dioses para que escuchen tu palabra que les invita a confiar en el que verdaderamente puede ayudarles.
Oro en el nombre de Jesús, amén.
3 de noviembre
3 de noviembre