EL DESCANSO DEL ALMA

INTRODUCCIÓN

Ciertamente, descansar es algo vital para todos. La falta de descanso podría provocar irritabilidad, depresión, pérdida de concentración, ansiedad y hasta insomnio. Por eso es importante tomar siempre el descanso necesitado.

El descanso es tan valioso que hasta Dios reposó el 7mo día de haber creado todo.

Pero ¿qué podemos decir del descanso del alma? El alma no descansa:

Aunque durmamos las 8 horas reglamentarias.

Aunque tomemos vacaciones en el trabajo.

Aunque nos vayamos a un resort.

Aunque renunciemos al empleo que nos estresa.

El alma cansada no encontrará descanso en los esfuerzos humanos, ni en los procedimientos psicológicos, ni tampoco en las exigencias de las religiones y sectas.

“He leído Sócrates, Platón y Aristóteles, pero ninguno de ellos decía: Venid a mí todos los cansados y cargados, yo os haré descansar.” Agustín de Hipona

Solo existe un lugar de descanso para el alma agobiada y es Jesús. Y hoy estaremos compartiendo sobre cómo podemos encontrar ese descanso deseado para nuestras almas.

PARA ENCONTRAR EL DESCANSO QUE NUESTRAS ALMAS NECESITAN, TENEMOS QUE VENIR A JESÚS (Ver V.28)

¿Por qué venir a Jesús? ¿Por qué no encontramos el descanso de nuestras almas en otra parte? ¿Por qué en las religiones no se encuentran este descanso? Solo Jesús garantiza la satisfacción del alma, porque ningún otro ha dicho:

Yo Soy El Pan de Vida

Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás (Juan 6:35).

Yo Soy La Luz Del Mundo

Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida (Juan 8:12).

Yo Soy La Puerta

“Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos” (Juan 10:9).

Yo Soy El Buen Pastor

“Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas” (Juan 10:11).

Yo Soy La Resurrección Y La Vida

“Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente” (Juan 11:25-26).

Yo Soy El Camino, Y La Verdad, Y La Vida

“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6).

Yo Soy La Vid

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer” (Juan 15:5).

Ninguna religión, secta, grupo o persona ha traído jamás descanso al alma abatida y cansada, sino solo carga, fatiga y esclavitud.

“Una religión de mera emoción y sensacionalismo es la más terrible de las maldiciones que puede sobrevenir a cualquier pueblo.” Samuel Chadwick

c. ¿Qué implica venir a Cristo?

Venir a Cristo es escuchar su voz y no ser indiferente a su llamado.

Venir a Cristo es acercarme a él tal como soy y tal como estoy.

Venir a Cristo es no resistirme a su gracia y aceptarla aun cuando no la comprenda.

Venir a Cristo es traer todas mis cargas para dejarlas ahí y tomar la suya.

Venir a Cristo es dejar el pasado de pecado y frustración atrás y vivir la vida que él me da.

Venir a Cristo es aceptar que soy un vil pecador, que no merezco nada de él y que, aun así, él me acepta y me da todo lo que precisamente no merezco.

PARA ENCONTRAR EL DESCANSO QUE NUESTRAS ALMAS NECESITAN, DEBEMOS DE LLEVAR EL YUGO DE JESÚS (ver V. 29a)

La pregunta obligada en este punto es ¿Qué es el yugo?

Traducción de varias palabras hebreo y griego, usada ya sea literalmente para el marco de madera que une a dos animales (generalmente bueyes), o metafóricamente para describir la sujeción de un individuo a otro o a un sistema religioso. Veamos algunos ejemplos en el NT:

Todos los que están bajo yugo como esclavos, consideren a sus propios amos como dignos de todo honor, para que el nombre de Dios y nuestra doctrina no sean blasfemados. (1Ti 6:1 NBLA)

"Ahora pues, ¿por qué tientan a Dios poniendo sobre el cuello de los discípulos un yugo que ni nuestros padres (antepasados) ni nosotros hemos podido llevar? (Hch 15:10 NBLA)

Para libertad fue que Cristo nos hizo libres. Por tanto, permanezcan firmes, y no se sometan otra vez al yugo de esclavitud. (Gál 5:1 NBLA)

Habiendo entendido el significado de la palabra “yugo” podemos preguntarnos: ¿a qué se refería Jesús con ‘llevar su yugo’?

Llevar el yugo de Jesús es someterme voluntariamente a su liderazgo y a su Señorío.

Llevar el yugo de Jesús es asumir el sistema de vida y enseñanzas de Jesús que cambia la vida del ser humano.

Llevar el yugo de Jesús es compartir con él la carga del trabajo y la vida como lo hacen los animales unidos por un yugo.

Llevar el yugo de Jesús es placentero y liviano o fácil de llevar (ver v.30).

La palabra fácil = crestos (χρηστός), dicho de cosas, de aquello que es placentero.

“No pidan a Dios que les de una carga apta para sus hombros; pídanle unos hombros aptos para soportar sus cargas”. Phillips Brooks

PARA ENCONTRAR EL DESCANSO QUE NUESTRAS ALMAS NECESITAN, DEBEMOS DE APRENDER DE JESÚS MANSEDUMBRE Y HUMILDAD (Ver V. 29b)

Jeremías 6:16 (NBLA) — 16 Así dice el SEÑOR: «Párense en los caminos y miren, Y pregunten por los senderos antiguos, Cuál es el buen camino, y anden por él; Y hallarán descanso para sus almas. Pero dijeron: ‘No andaremos en él.’

Así como Jesús afrontó todo el dolor y el pesar del proceso que vivió, nosotros encontraremos descanso aprendiendo de su mansedumbre y humildad.

Así como Jesús, ante los insultos y las calumnias, no abrió su boca, nosotros encontraremos descanso aprendiendo de su mansedumbre y humildad.

Así como Jesús, aunque quería que terminara el dolor y no proseguir con la copa que le tocaba beber, prefirió aceptar la voluntad del Padre, nosotros encontraremos descanso aprendiendo de su mansedumbre y humildad.

Así como Jesús perdonó a todos aquellos que le maltrataron cuando estaba en la cruz, nosotros encontraremos descanso aprendiendo de su mansedumbre y humildad.

Así como Jesús, siempre estuvo seguro del propósito de Dios y que nada impediría que este sea llevado a cabo, nosotros encontraremos descanso aprendiendo de su mansedumbre y humildad.

APLICACIONES Y CONCLUSIONES

Traigamos nuestras almas agobiadas por el pecado a los pies de Jesús en arrepentimiento y fe.

Demos un paso de fe y abandonemos nuestro pasado dejando a los pies de Jesús nuestras cargas y pesares.

Tomemos la decisión de un cambio en nuestro sistema de vida, asumiendo las enseñanzas de Jesús para que encontremos descanso para nuestras almas.

Asumamos una actitud mansa y humilde ante las diferentes circunstancias de la vida y estaremos en descanso continuo, así como Cristo lo prometió.