David entre los filisteos

1º Samuel 27:1–4

“1Dijo luego David en su corazón: Al fin seré muerto algún día por la mano de Saúl; nada, por tanto, me será mejor que fugarme a la tierra de los filisteos, para que Saúl no se ocupe de mí, y no me ande buscando más por todo el territorio de Israel; y así escaparé de su mano. 2Se levantó, pues, David, y con los seiscientos hombres que tenía consigo se pasó a Aquis hijo de Maoc, rey de Gat. 3Y moró David con Aquis en Gat, él y sus hombres, cada uno con su familia; David con sus dos mujeres, Ahinoam jezreelita y Abigail la que fue mujer de Nabal el de Carmel. 4Y vino a Saúl la nueva de que David había huido a Gat, y no lo buscó más.”

Introducción

En el último encuentro de David con Saúl, quedó claro a la vista del ejército de Israel que David no era enemigo de Saúl como decían.

Aunque Saúl había mostrado algún arrepentimiento y ofreció a David volver al palacio con él...

1º Samuel 26:21 “Entonces dijo Saúl: He pecado; vuélvete, hijo mío David, que ningún mal te haré más, porque mi vida ha sido estimada preciosa hoy a tus ojos. He aquí yo he hecho neciamente, y he errado en gran manera.”

David no se fiaba de las palabras de Saúl.

Ya no podía esconderse en el territorio de Israel, porque tenía muchos enemigos, Saúl ya conocía todos sus escondites y su ejercito había crecido mucho y era difícil ocultarse.

Así que decide refugiarse con los filisteos.

David en Gat

1º Samuel 27:2 “Se levantó, pues, David, y con los seiscientos hombres que tenía consigo se pasó a Aquis hijo de Maoc, rey de Gat.”

Anteriormente David ya había huido a Gat de los filisteos (c.21), en esa ocasión estaba solo, los filisteos aun no sabía de la enemistad de Saúl con David, así que no pudo estar ahí porque corría peligro su vida.

Por ahora, habían pasado muchos años, esta vez Aquis recibe a David y sus hombres con gusto porque sabía de su enemistad con Saúl, le convenía una alianza con el enemigo de su enemigo.

Aquis asumía que David también era enemigo de Saúl, pero David seguía siendo fiel a Saúl, a Israel y a su Dios.

Parecía que los enemigos de David habían tenido éxito al lograr que David huyera a tierra extranjera. Pero Dios cambió la derrota en victoria.

David pide una ciudad

1º Samuel 27:5–6 “5Y David dijo a Aquis: Si he hallado gracia ante tus ojos, séame dado lugar en alguna de las aldeas para que habite allí; pues ¿por qué ha de morar tu siervo contigo en la ciudad real? 6Y Aquis le dio aquel día a Siclag, por lo cual Siclag vino a ser de los reyes de Judá hasta hoy.”

Si David se quedaba en Gat, se vería obligado a adorar los dioses paganos de la ciudad, así que solicitó un lugar para vivir con sus hombres.

Las circunstancias eran convenientes para los filisteos que David pidiera un lugar lejos de la ciudad:

A David le acompañaba un ejército de 600 hombres con sus familias, fácilmente 1500 personas.

No convenía que esta gran cantidad de gente consumiera los recursos de Gat (tierra, agua, alimento). Pues crearía molestia a los habitantes.

Aquis gustosamente les concedió la tierra de Siclag, en la frontera con Israel, pues no solamente evitaba tener en su ciudad esa gran cantidad de gente, sino que también sería un escudo, contra los ataques de Saúl.

Si embargo, Dios cambió esa desventaja en ventaja:

David tenía un ciudad donde podía establecer el culto a Jehová en tierra extrajera.

La tierra de Siclag, al estar en la frontera con Israel volvería a ser de su territorio. 1º Samuel 27:6 “Y Aquis le dio aquel día a Siclag, por lo cual Siclag vino a ser de los reyes de Judá hasta hoy.” David recuperó esta tierra que anteriormente perteneció a la tribu de Simeón.

David continúa con la conquista de la tierra prometida

1º Samuel 27:8 “Y subía David con sus hombres, y hacían incursiones contra los gesuritas, los gezritas y los amalecitas; porque éstos habitaban de largo tiempo la tierra, desde como quien va a Shur hasta la tierra de Egipto.”

David engañaba a Aquis haciéndole creer que atacaba ciudades de Israel cuando en realidad atacaba pueblos cananeos.

Estos pueblos no fueron conquistados en la época de Josué. Josué 13:13 “Mas a los gesureos y a los maacateos no los echaron los hijos de Israel, sino que Gesur y Maaca habitaron entre los israelitas hasta hoy.”

Aunque David engañaba y mentía a Aquis, esta es una práctica que debemos evitar porque Dios no la aprueba.

Levítico 19:11 “No hurtaréis, y no engañaréis ni mentiréis el uno al otro.”

Colosenses 3:9 “No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos”

Aunque la Biblia menciona el engaño de David, no significa que lo apruebe. Pero sí evidencia la imperfección de los siervos de Dios, pues la Biblia da testimonio de David conforme al corazón de Jehová.

Hechos de los Apóstoles 13:22 “Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero.”

Aun en la imperfección humana, si somos sumisos y humildes ante Dios, Él nos usará y nos levantará.

Conclusión

Los enemigos de David posiblemente celebraban que al final habían logrado exiliarlo.

Pero era todo lo contrario, Dios lo estaba prosperando y fortaleciendo, mientras que Saúl menguaba.

No solo recuperó el territorio de Siclag para Israel.

Conquistó territorio que no pudieron conquistar sus antepasados de los cananeos.

Además, estando en Siclag soldados del ejército de Saúl se unieron a él. 1º Crónicas 12:1–2 “1Estos son los que vinieron a David en Siclag, estando él aún encerrado por causa de Saúl hijo de Cis, y eran de los valientes que le ayudaron en la guerra. 2Estaban armados de arcos, y usaban de ambas manos para tirar piedras con honda y saetas con arco. De los hermanos de Saúl de Benjamín:”

Aún de los filisteos se unieron a David: 1º Crónicas 12:8 “También de los de Gad huyeron y fueron a David, al lugar fuerte en el desierto, hombres de guerra muy valientes para pelear, diestros con escudo y pavés; sus rostros eran como rostros de leones, y eran ligeros como las gacelas sobre las montañas.”

Cada día que pasaba, Dios honraba y levantaba a David por sobre sus enemigos porque se mantuvo fiel y perseverando en los caminos de Dios.

Ante las acusaciones falsas que se levanten contra nosotros, mantengámonos fieles a Dios, dejando todo en sus manos y actuando conforme a su Palabra, para que a su tiempo Él nos exhalte.

1 Pedro 2:12 “manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.”

Toda esta desgracia vino sobre David, lo formaba para ser el próximo rey de Israel.

Sin embargo, aun no había terminado la prueba... seguiremos estudiando las últimas pruebas a las que se enfrentó David.