ARREPENTIMIENTO

ARREPENTIMIENTO Cambio de actitud y acción del pecado a la obediencia a Dios. El concepto de arrepentimiento difiere ligeramente en el pensamiento hebreo y griego, pero en ambos es consistente el énfasis en un comportamiento correcto.

Arrepentimiento en hebreo

No hay un término hebreo que sea el equivalente exacto de la palabra “arrepentimiento” del español. El arrepentimiento era expresado a través de distintas acciones para demostrar un cambio en el pensamiento y en la actitud hacia el pecado y hacia Dios.

El arrepentimiento podía ser demostrado a través de:

• manifestación pública de dolor acerca del pecado, como el llanto (Esd 10:1), rasgarse las ropas y/o el cabello (Esd 9:3) o vestir telas ásperas

Joel 1:13 “13 Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.”

• hacer restituciones por los errores cometidos (1 Crón 21:22–26)

• humillarse a uno mismo ante la parte perjudicada (Gén 33:3)

La palabra hebrea que más se aproxima a “arrepentirse” o “arrepentimiento” se traduce al español como “regresar”, lo cual básicamente significa “volverse e ir en la dirección contraria”. En contextos teológicos, esto implica volverse de un camino caracterizado por la rebelión contra Dios, hacia un camino caracterizado por la obediencia. El énfasis está en acciones que necesariamente provienen de orientarse uno mismo hacia Dios.

Arrepentimiento en griego

El término griego para “arrepentimiento” deriva de un verbo que significa “cambiar radicalmente la manera de pensar”. “Arrepentimiento” se refiere a un evento en donde un individuo obtiene un nuevo entendimiento, provisto de manera divina, acerca de su comportamiento, y se siente obligado a cambiar aquel comportamiento y a comenzar una nueva relación con Dios (Heb 6:1; Hech 20:21). Mientras que el idioma griego puede representar el concepto de arrepentimiento como una acción independiente, el trasfondo semítico de los escritores del Nuevo Testamento exigía que la acción de arrepentimiento fuera seguida de acciones apropiadas. (Mat 3:8; Hech 26:20). Algunos ejemplos de comportamientos cambiados luego del arrepentimiento incluyen a:

• Zaqueo restituyendo el fraude que había cometido como parte de su ocupación (Luc 19:1–10)

• Pablo predicando la fe que anteriormente había querido destruir (Hech 9:1–28)

• Onésimo, el esclavo fugitivo, regresando a su amo, Filemón, para enfrentarse a las consecuencias de sus actos (Film 8–16)

Sant 2:14–26 nos da los comentarios más explícitos del Nuevo Testamento acerca de la relación entre el arrepentimiento y las acciones apropiadas. Santiago argumenta que las acciones adecuadas inevitablemente suceden tras una sincera experiencia de arrepentimiento. La pregunta retórica “¿De qué le sirve a uno …?” (2:14) no cuestiona la suficiencia de la fe en Cristo sin necesidad de acompañarla con buenas obras para salvar al pecador, sino que cuestiona la presencia misma de la fe si no viene seguida por las obras. Él sostiene que tal como la evidencia de la vida biológica en el cuerpo humano son los procesos de respiración y circulación, la evidencia de la fe salvadora son los actos de justicia y misericordia surgen espontáneamente de una vida cambiada (2:18).