MOMENTUM - RESPONDIENDO AL LLAMADO A SALVACION

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El enfoque del retiro es que reconozcan que ellos se encuentran en “ese momento u ocasión óptima” donde ellos pueden responder a Cristo y avanzar con gran impulso en sus propósitos.

Notes
Transcript

INTRODUCCIÓN

Ilustración: introducir predicación con el chiste del predicador que en medio de su predicación se confunde llamando a Zaqueo por Nicodemo.

EL MOMENTO DE ENFRENTAR LOS IMPEDIMENTOS (ver v. 1-4, 7)

Primer impedimento es la discrepancia entre el significado de su nombre y su vida o carácter (v. 2a).

Su nombre deriva de la palabra hebrea זַכַּי(zakkay), la cual significa “puro” o “inocente”.[1]
Creo que todos estaremos de acuerdo en que Zaqueo ni era puro ni era inocente. Él pasó gran parte de su vida donde su nombre apuntaba en una dirección, pero su carácter y su vida apuntaba en otra. Le fue otorgado un nombre al cual no estaba haciendo honor.

Segundo impedimento es su profesión (v.2b).

Zaqueo era un recaudador de impuesto para el imperio Romano. Esta profesión requería que el oficial recaudara cierta cantidad de dinero y se le permitía cobrar más y quedarse con el excedente, lo cual se practicaba de manera abusiva por la mayoría de los recaudadores o publicanos.
Esta profesión gozaba del rechazo del pueblo judío porque se les consideraba traidores, además de abusadores en su gestión.

Tercer impedimento es su estatus social (v.2c).

Zaqueo era “rico” y era “jefe de los recaudadores”. Pero esta riqueza no fue obtenida de manera honrada. Viene como resultado de su gestión laboral lo cual le llevó a acumular una gran cantidad de recursos.
No quisiera imaginarme lo que se siente tener mucha acumulación de bienes y riquezas y mirar a los lados y ser acosado por la sombra de que todo es producto de lo ilícito que he estado haciendo.

Cuarto impedimento su limitación física (v.3).

La limitación de estatura también fue un elemento con el que Zaqueo tuvo que lidiar. Una gran multitud alrededor de Jesús más su limitación física se convirtieron en un gran impedimento para satisfacer su curiosidad de “ver quien era Jesús” (v. 3).
Zaqueo tuvo que ponerse creativo, así que trepó a un árbol (v. 4).

Quinto impedimento el rechazo y exclusión de la sociedad (v.7).

A causa de todos los impedimentos anteriores, viene como consecuencia el presente: el rechazo de la sociedad:
1. Rechazo por la religión porque su conducta no se confirma a lo exigido.
2. Rechazo por sus hermanos judíos porque los traicionó jurando lealtad a la nación que los oprime.
3. Rechazo por la sociedad, a quienes ha ultrajado y ha abusado de ella haciéndose rico.
4. Rechazo por su apariencia física. Tal vez sufrió de bulling de niño y de grande de burla y chistes despectivos a causa de su baja estatura.
Me pregunto cuántos ‘Zaqueos’ habrá sentados en estas sillas en el día de hoy. Me pregunto cuántos de ustedes están en un momento a punto de encontrarse con Jesús, pero están enfrentando impedimentos como lo experimentó Zaqueo.
Tal vez tu impedimento para aprovechar el momento y aceptar el llamado de Dios a Salvación sea que tu vida no muestra el cristianismo que tus padres te han inculcado; puede ser que vayas a la iglesia para complacer a tus familiares y amigos. Estas en un colegio cristiano porque no tienes de otra. En fin, tu vida misma es la principal excusa para venir a Cristo.
Tal vez tu impedimento para aprovechar el momento y aceptar el llamado de Dios a Salvación sea que tu testimonio y reputación está tan afectado que te da vergüenza acercarte a Dios porque ya lo has intentado tantas veces y has vuelto atrás, que no quieres seguir poniendo a Dios de relajo. O puede ser que no lo has intentado en lo absoluto, porque entiendes que eres un caso perdido. Mejor no molestar al Maestro.
Tal vez tu impedimento para aprovechar el momento y aceptar el llamado de Dios a Salvación sea que estás luchando con una condición física o complejo con tu apariencia o cuerpo. Posiblemente, luchas con tu identidad, con atracción a personas del mismo sexo, con alguna discapacidad o tal vez con algún trauma que ha provocado que actúes de cierta manera. Puede ser que seas objeto de burla y rechazo.
Sea cual sea que tu impedimento, de la misma manera como pasó con Zaqueo, que no pasó por inadvertido, tú tampoco. Jesús te ve en el árbol donde te encuentras subido.

EL MOMENTO DEL ENCUENTRO CON JESÚS (ver v. 5-10)

En el versículo 10 encontramos una afirmación de Jesús sobre su propósito: “buscar y salvar lo que se había perdido”.
¿Reúne Zaqueo la condición de perdido?
Un hombre cuyo carácter es todo lo contrario a ser “puro” e “inocente”.
Un hombre que se dedicó al hurto y abuso y que gracias a esto alcanzo riquezas.
Un hombre que alcanzó mala reputación y se ganó el desprecio de sus compatriotas con razones legítimas.
Me parece que Zaqueo estaba en la lista de perdidos por su condición. De hecho, estaba en la lista de Jesús, de aquellos que necesitaban tener un encuentro con él.

El perdido fue encontrado por Jesús en un árbol (v. 5a)

A pesar de la multitud (v. 3) que rodeaba a Jesús, él fija su vista en alguien que aparentemente es invisible para la religión y para su sociedad.
Jesús vio a alguien que posiblemente no tenía muchas expectativas de ser atendido; posiblemente se sentía indigno de ser recibido; probablemente no tenía esperanza de ser rescatado o salvado.
Jesús ve a los invisibles. Él encuentra a los perdidos. Él está pendiente del árbol donde nos hemos trepado. Desde allí nos llama.

El perdido se convirtió en el anfitrión de la visita de Jesús (v. 5b).

Jesús lo llama por su nombre.
Jesús le urge compartir con él.
Jesús se autoinvita a su casa.

El perdido muestra arrepentimiento genuino gracias a la experiencia de compartir con Jesús (v. 8).

Lo que hasta el momento Zaqueo estaba experimentando con Jesús, fue suficiente para cambiar su perspectiva de la vida. Estuvo dispuesto a hacer los cambios esperando de una persona que se ha arrepentido en verdad.

El perdido es receptor de la salvación dada por Jesús (v. 9-10).

La salvación llega cuando somos encontrados por Cristo.
La salvación llega cuando Cristo es recibido.
“En verdad les digo, que el que recibe al que Yo envíe, me recibe a Mí; y el que me recibe a Mí, recibe a Aquel que me envió.” (Juan 13:20, NBLA)
La salvación llega cuando Cristo es conocido.
“Y esta es la vida eterna: que te conozcan a Ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3, NBLA)

CONCLUSIÓN Y APLICACIONES

Chicos, al igual que Zaqueo, muchos de ustedes se encuentran perdidos y no solo en situaciones difíciles, como traumas, rechazo, enfermedades, soledades, depresiones, adiciones, confusiones, entre otros, sino que además de todo esto están perdidos en sus pecados, los cuales le hacen infelices y vivir una vida sin propósito; tal vez presumiendo una relación con Dios que no tienen.
Hoy hay un llamado divino para tu vida. Jesús se detiene en su camino y hace una parada necesaria y mira el árbol donde te encuentras. Allí donde puedes ser espectador, pero Jesús te invita a ser su anfitrión.
Hoy se te ofrece la salvación de tu alma. El perdón de tus pecados. La liberación de la carga de tus hombros que te separa de Dios. El poder que te da la oportunidad de ser una nueva criatura. Una relación restaurada con Dios. ¿Puedes responder en arrepentimiento y fe?
[1] Michelle Morris, «Zaqueo», ed. John D. Barry y Lazarus Wentz, Diccionario Bíblico Lexham (Bellingham, WA: Lexham Press, 2014).
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