Manantial de Vida
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Manantial de Vida
Manantial de Vida
Proverbios 10:11
Manantial de vida es la boca del justo; pero violencia cubrirá la boca de los impíos.
Hermanos, acá en este versiculo dice que la boca del justo es manantial de vida. Esta noche quiero estudiar lo que significa este versiculo y como debemos aplicarlo a nuestra vida. Vamos a ver otros versiculos tambien en este capítulo.
Hermanos, primero, el versiculo dice la boca del justo. Esta frase hace referencia a la boca de ellos que son justos. Ahora, nosotros sabemos que ningun hombre es justo en los ojos de Dios a menos que han recibido la salvación de Dios. I Pedro 3:18
Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado por el Espíritu;
Hermanos aquí vemos que Jesús es el justo. Él nunca pecó, ni una vez. Pero nosotros sí. Nosotros somos injustos. Pero Cristo murió en la cruz, el justo por los injustos, para hacernos justos en los ojos de Dios. Entonces, creo que la mayoría de nosotros acá somos salvos. Si somos salvos, somos justos en los ojos de Dios.
Entonces, esta frase hace referencia a nosotros. Ellos que son salvos. Pero hermanos, la verdad es que a veces no nos comportamos como justos cierto? Por qué es así? Porque nosotros todavía tenemos la carne. Fallaremos, y pecaremos.
Entonces, este versiculo nos dice que la boca del justo o la boca de los que son salvos es un manantial de vida. Hermanos, si somos salvos, nuestra boca y nuestro hablar debe reflejar nuestra justicia. En la justicia tenemos vida, y como hablamos debe reflejarlo.
Si visita un manantial natural de agua, es impresionante. Yo he visitado lugares así, y es impresionante la calidad del agua que viene de esas manantiales. El agua es increiblemente clara, y deliciosa. Es muy limpio, y muy buena para la salud porque contiene muchos minerales.
Hermanos, eso es la comparación que el autor Salomón está haciendo aquí. Nuestra boca debe ser como un manantial de agua. Limpio, bueno, y saludable y una ayuda a los demás.
Nosotros debemos examinarnos y ver si nuestro hablar es así. Yo he escuchado el hablar de personas que dicen que son cristianos, pero en ninguna manera refleja su salvación. Su hablar es lleno de grosuras, y usan su boca para destruir a los demas.
Hermanos, como justos, nuestro hablar no debe ser así. Entonces acá en este capítulo, muchas veces hace referencia al hablar de los justos y el hablar de los impíos. Vamos a ver las características de los dos, y comparar la diferencia esta noche.
El justo refrena sus labios
Proverbios 10:19 Acá vemos que un sabio, alguien que es prudente como nosotros debemos estar, refrena sus labios. Pero ellos que no refrenan sus labios en sus vidas no hay falta de pecado.
En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente.
Creo que cada uno de nosotros podemos recordar alguien y podría ser nosotros, quien no podía refrenar sus labios. Siempre está hablando, siempre está diciendo lo que está pensando. Hermanos, esa persona no es sabio. Eclesiastes 5:2-3
No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú en la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras. Porque de la mucha ocupación viene el sueño, y de la multitud de las palabras la voz del necio.
Si queremos estar un manantial de vida a los demás, debemos tomar el control de nuestros labios, y eso significa que debemos aprender como no hablar. Yo entiendo. Es nuestra tendencia, especialmente cuando estamos discutiendo con alguien, decir lo que pensamos inmediatamente.
Pero hermanos, hay sabiduría en esperar, y escuchar, y no reaccionar inmediatamente con nuestras palabras. Yo digo tambien, que nosotros debemos aprender a escuchar sin pensar en lo que vamos a decir. Dejar nuestros pensamientos, y escuchar a las palabras de los demás, es sabio.
Proverbios 18:13 Acá vemos esta verdad claramente. Cuando respondemos, antes de oír, es necedad. Nosotros debemos aprender como escuchar. Cuando era la última vez que alguien vino a usted, y empezó a hablar, y usted solamente escuchó, y no respondió hasta que terminó? Es difícil. Pero es sabio.
El que responde palabra antes de oír, le es necedad y vergüenza.
El justo con sus labios alimenta a muchos
Proverbios 10:21 Hermanos, ya vemos que es sabio refrenar nuestros labios, pero si queremos estar un manantial de vida, nosotros debemos aprender como alimentar a los demás cuando empezamos a hablar.
Los labios del justo alimentan a muchos; mas los necios mueren por falta de entendimiento.
Qué significa alimentar con los labios? Significa que cuando habla, lo que dice edifica a los demás, ayuda a los demás. Hermanos, nosotros debemos refrenar nuestras palabras, y despues, cuando abre su boca para hablar, debe decir algo que va a ayudar.
Eso puede ser facíl cuando hablamos con un amigo o familia, pero que tal un enemigo? O alguien con quien tenemos un problema? La palabra de Dios dice que los labios de los justos alimentan a muchos. No importa la situación, debemos aprender como alimentar con nuestros labios.
Decir algo bueno, decir algo que va a ayudar y no destruir, es como alimentamos. Colosenses 4:6 Como debe responder a cada uno? Con gracia, sazonada con sal. Hermanos, ha probado una comida que no tiene sal? No es agradable cierto?
Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
No tiene sabor. Hermanos, nuestra palabra debe ser sazonada con sal. No se ve muchas veces el sal, pero es obvio que está allá en la comida. Es lo que hace la comida rica. Entonces para nosotros, debemos alimentar a los demás con nuestras palabras. Debemos sazonar con sal nuestras palabras con los pensamientos que vienen de la escritura y la sabiduría de Dios y cuando estas palabras salen de la boca, es una ayuda a muchos, alimentan a muchos.
Hermanos, debemos alimentar a los demás con nuestras palabras.
El justo con sus labios produce sabiduría
Proverbios 10:31 Ahora, si ha aprendido como refrenar sus labios, y si ha aprendido como alimentar a los demás, debemos con nuestras bocas producir sabiduría. A mi, este punto es un paso más que alimentar. Cuando producimos sabiduría con nuestra boca, vamos a saber como mejorar situaciones con palabras de sabiduría.
La boca del justo producirá sabiduría; mas la lengua perversa será cortada.
Hace unos años, yo estaba en una situación difícil, y había un problema con otra persona y no iba bien. Pero de repente otra persona cerca a nosotros, dijo algo sencillo, pero con mucha sabiduría, y inmediatamente mejoró la situación y la conversación.
Hermanos, eso es el poder de usar la sabiduría de palabras. Pero eso viene de un corazón recto y sabio. Por eso es importante tener la presencia del Espíritu Santo. Hermanos, cuando andamos con Dios, y tenemos la sabiduría de Dios, podemos usar nuestras palabras para mejorar situaciones. Eclesiastes 10:12
Las palabras de la boca del sabio son gracia; mas los labios del necio causan su propia ruina.
Hermanos cuando tenemos sabiduría en nuestras palabras, es gracia. Algo bueno que puede mejorar cualquier situación. Algo que puede cambiar una situación de mala a buena. Entonces nuestras palabras deben producir sabiduría.
El impío habla perversidades
Proverbios 10:32 Para terminar, quiero enfocar en el opuesto de lo que hemos estudiado. El lado de los impíos, o ellos que no son salvos. Ellos que están parte del mundo. Los impíos por su naturaleza, hablan perversidades. Hablan de cosas que no agradan a Dios.
Los labios del justo saben lo que agrada; mas la boca de los impíos habla perversidades.
Entonces, no es una sorpresa escuchar perversidades salir de la boca de ellos que están en el mundo. Pero lo triste es que muchas veces, escucho las perversidades salir de la boca de ellos que dicen que son justos, y salvos.
Eso no debe ser hermanos. Nosotros debemos reflejar en nuestro hablar que somos salvos, que somos justos, que nosotros tenemos la presencia del Espíritu Santo. Hermanos, yo entiendo que tenemos la carne, entiendo que hay veces cuando fallamos, y decimos algo que no debemos.
Pero hay cristianos que nunca pueden mantener el control de sus labios, y su hablar es perverso. De pronto no habla así en la iglesia, pero en su trabajo, o en la casa, o en la calle sabe que sus palabras no agradecen a Dios. Colosenses 3:8
Mas ahora dejad también vosotros todas estas cosas; ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras sucias de vuestra boca.
Al fin de este versiculo dice, dejad palabras sucias de vuestra boca. Hermanos, lo más triste a mi es cuando yo escucho de la boca de Cristianos, el nombre de Dios tomado en vano, dicho como una grosura, como es nada.
Eso es parte de hablar perversidades. Es uno de los 10 mandamientos, no toma el nombre de Dios en vano. Hermanos, no debe usar el nombre de Dios como es algo sucio que no vale nada.
Entonces hermanos, si quiere ser un manantial de vida, no debe ser como los impíos y hablar perversidades.
Hermanos, un manantial de vida es lo que cada uno de nosotros debemos ser. Siempre debemos buscar oportunidades para ayudar a los demás con nuestras palabras. Puede ser por refrenar nuestras palabras y no hablar. Puede ser por alimentar a los demás con las palabras y animar a ellos. Puede ser por dar sabiduría y mejorar las circunstancias y situaciones.
Hermanos, yo quiero que otros digan de mi, cuando yo hablo con él, me siento que yo he tomado un vaso de agua clara, limpia, y saludable que me ha ayudado mucho. Es es como debemos estar hermanos.