LOS 3 DÍAS RESTANTES DE LA CREACIÓN

(Gn. 1:14 – 31)

Cuarto día:

Gn. 1:14 – 15

Dios crea el espacio sideral, el ámbito celestial de las estrellas y los planetas.

En el primer día, el Señor dijo: Sea la luz y fue la luz. Esta luz es en su naturaleza intrínseca. Ahora Dios trajo a la existencia generadores o portadores de luz.

Las estrellas y las lumbreras llegaron a brillar tan pronto como Dios las creo.

El poder de la Palabra de Dios que la luz de las distantes estrellas llegase a iluminar el universo sin que hubiese o hiciese falta una evolución en desarrollo.

Dios creo un universo adulto, no un universo en desarrollo progresivo.

Gn. 1:16 – 19

E hizo Dios… Se materializa lo que Dios de antemano lo pensó.

Hizo, habla de creación. De llegar a existir.

Observemos que las lumbreras son una creación dada por Dios para distinguir las estaciones, días y años.

A través de toda la historia, ha existido múltiples calendarios en distintas épocas y culturas.

El calendario Juliano, Hebreo, Islámico, Chino, Maya, Helénico, Persa, Hindú, etc

El calendario que nosotros en occidente usamos y al cual nos regimos, es el calendario gregoriano.

Lo que tienen en común todos estos calendarios, es que usan como punto de referencia la lumbrera menor y la lumbrera mayor (la luna y el sol), para poder distinguir y medir el tiempo entre días, semanas, meses y años.

Dios proveyó el método de medir el tiempo. La forma en como el hombre mide el tiempo, no es de su propia invención. Ya Dios desde la creación determinó como se iba a medir el tiempo.

Sal. 19:1, 5 – 6

Los cielos, el firmamento, el sol y por ende todos los astros, hablan de la gloria de Dios. Nosotros tendríamos que observar constantemente la obra atmosférica de Dios para admirarnos más de Su gloria y alabarlo por tal obra.

Después del tiempo de la creación, Dios también evidenció Su gloria de una forma más cercana y con un destello de Gloria más evidente.

Jn. 1:14

Hb. 1:2 – 3a

2 Co. 3:17 – 18 Nosotros necesitamos conocer más de la Gloria de Dios en el resplandor de Su Hijo, para que nuestra imagen caída y dañada por el pecado, pueda ser transformada en la imagen y semejanza del Señor Jesucristo.

Por eso Pablo dice: a cara descubierta. A nosotros se nos ha quitado el velo.

Ahora necesitamos conocer más de la gloriosa imagen de Cristo, para que esa gloriosa imagen de Cristo también nosotros la podamos reflejar.

Gn. 1:19

Quinto día:

Gn. 1:20 – 22

En el quinto día Dios lleno los mares con toda clase de peces y pobló los cielos con una enorme variedad de aves.

Dios creo simultáneamente a las aves y a los peces, y fue instantáneamente. No existe ni la más mínima evidencia bíblica de que estas aves y estos peces, evolucionaron en millones de años.

Dios creo a la ballena (el animal marino más grande que jamás haya existido) incluyendo los grandes reptiles extintos llamados dinosaurios.

La teoría de la evolución es rechazada por las Escrituras.

Ballena: mamífero cuadrúpedo terrestre.

Gn. 1:23

Sexto día:

Gn. 1:24 – 31

El día sexto revela tanto la culminación como la meta de la creación.

Gn. 1:24 – 25

Dios crea la vida animal.

Job. 40:15 – Este grupo de animales incluye los dinosaurios como Behemot.

Gn. 1:26 - 28

Dios crea la vida humana para disfrutar y gobernar el actual mundo habitable.

El perfecto diseño de Dios ha seguido un orden. Dios ha creado hierba verde, plantas con su semilla y árboles que den fruto. Luego Dios creó y colocó en su sitio las lumbreras y las estrellas, y adornó el inmenso espacio con innumerables estrellas.

Además, creo los peces del mar, las aves de los cielos y los monstruos marinos.

El Creador no omitió ni un solo detalle. Lo que estaba desordenado, fue ordenado. Lo que estaba vació fue llenado.

Hay una diferencia bien marcada en la creación del hombre frente a todo lo creado anteriormente:

v. 20 produzcan las aguas…

v. 24 produzca la tierra…

v. 26 Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…

Primero: Dios se involucra personalmente a formar y dar vida a ese ser humano.

Segundo: En comparación con los animales, el hombre es designado como “rey de la creación” (señoree) y como administrador de toda la tierra (Gn. 1:29)

Sal. 8:6 – 8

Gn. 1:26 “Hagamos al hombre…” (esa forma plural ha sido causa de debate – controversial)

Teólogos conservadores: tiene que ver con la pluralidad de personas en la Deidad.

Esta es una referencia a la Trinidad de Dios (está implica en el lenguaje usado).

Este verbo armoniza con el nombre plural “Dios” – Elojím – Dioses.

La fe cristiana es una fe Trinitaria. Ninguna otra religión enseña la existencia de un solo y único Dios vivo y verdadero en tres Personas, que son coiguales, consubstanciales y coeternos.

Solo el cristianismo bíblico enseña la doctrina de la Trinidad.

Existió y existe una postura liberal que dice que “hagamos” no lo dijo Dios, sino los ángeles. Según esta postura el hombre fue creado a imagen de los ángeles.

Ningún texto bíblico apoya tal postura. La Biblia enseña de manera contundente que el Dios Soberano del Genesis es el autor creó todas las cosas, incluyendo al hombre.

“…a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…”

En el hebreo imagen y semejanza son sinónimos, así que no debemos de demarcar a cada palabra como algo diferente. Y se refiere primordialmente al parecido espiritual del hombre con su Creador.

Imagen (ts é lem) tiene que ver con todos los aspectos de la naturaleza humana que son ajenos a los animales.

El término imagen no nos habla de que el ser humano físicamente es una representación de Dios, porque Dios es Espíritu.

El término imagen tiene que ver con que el hombre tiene una personalidad, tiene una naturaleza (cuerpo y espíritu) y también tiene la capacidad de tomar una decisión moral.

La imagen de Dios nos habla que el hombre tiene los atributos comunicados de Dios, que proceden del aliento recibido (Gn. 2:7)

Por lo tanto, los seres humanos tienen vida espiritual, sensibilidad ética y moral, consciencia y la capacidad de representar a Dios.

Semejanza (demút) también tiene que ver con algo muy similar a imagen, y es que el hombre tiene capacidad intelectual y moral. Esa es la capacidad que le permite al hombre relacionarse con Dios.

Aún después de la caída el hombre retiene la imagen de Dios.

Stg. 3:9, hablando de la lengua.

Aplicación:

Cada vida tiene un valor incalculable delante de Dios. Ese mismo valor tenemos que darnos unos a los otros.

Ilustración:

¿Qué hace la imagen de un presidente en medio de una plaza?

Dios creó una imagen para que todos puedan elevar su vista a los cielos y conocer que hay un Dios Creador.

Gn. 1:27 – 28

“…sojuzgadla y señoread…”

Dios ubica al hombre en una posición especial, los designa mayordomos de la creación.

Estos dos términos nos hablan de que Dios dio una responsabilidad al ser humano.

Aplicación:

Dios dejo un mandato cultural de que sus hijos puedan señorear en este mundo. Sus hijos, pero lo que vemos ahora es que hombres paganos dominan las esferas sociales. Las posiciones de poder mayormente están siendo dominados por incrédulos que llevan la sociedad a una dirección en contra de Dios.

Es cierto que el mundo entero esta bajo el maligno (1 Jn. 5:19), pero también es cierto que Dios quiere que su luz brille en el mundo a través de sus redimidos.

Sal. 8:5 – 6

Dios puso todo bajo el gobierno del ser humano, para que el hombre lo glorifique, pero quienes gobiernan hoy el mundo son quienes viven de espaldas a Dios.

Gn. 1:26 – 27

“…hombre…”

Este término es genérico, es decir, incluye al varón y a la hembra.

“…y los bendijo Dios…”

Es una referencia a que Dios creo al hombre para hacerle bien. Es decir, para bendecirlo, no para hacerle mal.

Aplicación:

Jr. 29:11

Gn. 1:28 revela una comisión cultural.

Mt. 28:19 revela una comisión espiritual.

Gn. 1:29 – 30

Toda planta y todo animal Dios proveyó para que el hombre pueda comer.

Pero por el pecado, en ciertas culturas paganas, se derrama la sangre de un humano como sacrificio al dios vaca.

A la Pachamama.

Gn. 1:31

El superlativo, bueno en gran manera.

La enfática declaración afirma que no hay ninguna imperfección en la obra creadora de Dios.

Conclusión:

Cuando Dios creaba el mundo, dijo que era bueno y cuando termino de crear todo el mundo (incluyendo al hombre), dijo que todo era bueno en gran manera. ¿Qué dirá ahora?