Las Bendiciones que Constituyen Nuestra Riqueza Espiritual

Efésios 1

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‌Hablamos de la Serie del libro de Efesios: “Las riquezas de la gracia de Dios”…

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Hoy muchos creyentes en Jesús no entienden quiénes son realmente en Cristo, qué tienen y cómo poseer lo que ya es suyo.

Para que puedas vivir la vida que Jesús vino a darnos (Juan 10:10) necesitas entender lo que Dios dice de ti.

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Necesitas saber quién eres, qué tienes en Cristo y cómo usar lo que tienes.

Si alguien te pregunta qué está pasando en IBNU puedes decir que estamos descubriendo “Las Riquezas de la Gracia de Dios”…

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‌Eso es lo que está pasando...

‌Hoy lo descubriremos‌

‌"Las bendiciones que componen nuestra riqueza espiritual"

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Bendiciones de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.

Ephesians 1:3–14 (RVR60)

3Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, 4según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, 5en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, 6para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado, 7en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia, 8que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia, 9dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, 10de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.

11En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad, 12a fin de que seamos para alabanza de su gloria, nosotros los que primeramente esperábamos en Cristo. 13En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, 14que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.

La frase más larga de la Biblia. Pablo empezó a hablar de Jesús y no podía parar.

Estaba tan emocionado que se dejó llevar.

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Paulo estaba emocionado, ¿y qué le emocionaba?

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¡Las bendiciones que componen nuestra riqueza espiritual!

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Lo primero que nos cuenta es sobre la

I. Bendiciones de Dios Padre (Efesios 1:4-6)

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A. El Padre nos eligió

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Ver versículo 4

Ephe.1:4

Ephesians 1:4

4 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo,

Nosotros, queridos amigos, somos el pueblo elegido de Dios.

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Dios determinó nuestro fundamento—nuestra salvación—antes de la fundación del mundo.

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Antes de que pusiéramos este planeta en su lugar, antes de que ahuecaramos los océanos, antes de que amontonáramos las montañas y antes de que expulsáramos las estrellas, nosotros, la Iglesia, estábamos en el corazón y la mente de Dios, porque, verás, Dios es un Dios de amor.

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¿Y de qué sirve ser un Dios de amor si no hay nadie ni nada a quien amar? Entonces Dios simplemente puso Su amor sobre nosotros.

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Dios puso Su afecto en nosotros, y Dios nos eligió mucho antes de que supiéramos algo acerca de Él, mucho antes de que existiéramos.

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Lo más increíble de todo es que no hay nada que hubiera hecho que Dios nos hubiera elegido antes o después de nuestra existencia, porque cuando Dios nos vio, vio nuestra debilidad, vio nuestra pecaminosidad, vio nuestra indignidad.

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Pero Dios ha puesto su afecto en nosotros.

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Ahora, cuando leemos aquí el nos escogió, no significa que Dios eligió a un pecador sobre otro pecador.

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- no significa que unos sean elegidos para perderse y otros para salvarse.

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Dios quisiera que todos los hombres se salvaran.

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Quiero que apunte esa pasaje: 1 Timoteo:2:3-4. Y nunca dejes que nadie te enseñe lo contrario. Escucha ahora:

1 Timothy 2:3–4 Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, 4el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.

Nunca pienses que Dios eligió a un hombre para ir al cielo y a otro para ir al infierno. Dios desea que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad.

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Debemos predicar el evangelio a TODA criatura. Y la Biblia dice:

2 Peter 3:9

9El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.

El deseo del corazón de Dios es "que nadie perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento".

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Y si un hombre perece, no es porque estuviera predestinado a ir al infierno; es porque no quiere venir a Jesús, quien le dijo: "Venid a mí... y yo os haré descansar" (Mateo 11:28).

Él nos eligió: puso en nosotros su cariño, su amor. La iglesia estaba en el corazón de Dios antes de la fundación del mundo.

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En otras palabras, la elección de Dios por nosotros nos permite elegir por Él.

Dios nos permite elegir y debemos elegir.

Deuteronomy 30:19 A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia.

Podemos elegir o rechazar, pero no podemos elegirlo a menos que Él nos haya elegido primero.

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Y Su elección por nosotros nos permite elegirlo a Él.

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Primera bendición: Somos elegidos,

B. El Padre nos predestinó

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Mire el versículo 5:

Ephesians 1:5 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad,

Las cosas siguen mejorando cada vez más:

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Fuimos elegidos antes de la fundación del mundo y, después, estamos predestinados a la adopción y a ser como el Señor Jesucristo.

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Ahora bien, la predestinación no es que Dios diga desde la eternidad que este hombre irá al cielo y este otro hombre irá al infierno.

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No, la predestinación es lo que Dios hace por las personas salvas, ellas eligen a Cristo como su Señor y Salvador – Escríbelo:

Romans 8:29 (NIV84)

Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.

Esto es lo que nos dice la Biblia en Romanos 8 y versículo 29: “A los que antes conoció Dios, también los predestinó” (Romanos 8:29)

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Lo que esto significa es esto: que Dios, antes de crear este mundo, determinó que tendría una familia con muchos hijos: Su Iglesia.

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Y así, debido a Su elección por mí, Su amor por mí, pude elegir amarlo a Él. Por eso, entonces Dios dice: "Tendrás derecho a convertirte en un hijo/hija de Dios". Juan 1:12

1 John 5:1

1 Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido engendrado por él.

¡Creer que Jesús es el Cristo lo soluciona todo!

(1 Jn 5:4–5)

4Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. 5¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?

¡Creer que Jesús es el Cristo lo soluciona todo!

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Y Dios, mirando desde Su morada en la eternidad, dijo: "Predestinaré a ese joven, a esa joven, a ese hombre, a esa mujer, para que sea como Jesús".

‌Y amigo, ahí está nuestra seguridad, mi seguridad.

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Estoy "[predestinado] a ser conformado a la imagen del Hijo [de Dios]" (Romanos 8:29).

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Y quiero decirte, querido amigo, que lo que fue predestinado en la eternidad nunca podrá deshacerse en el tiempo.

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Quiero decirte que estoy tan seguro de ir al cielo como si ya estuviera allí. Un día seré como Jesús. Estoy predestinado. Esto está establecido en el corazón y la mente de Dios Padre desde antes de la fundación del mundo.

C. El Padre nos Adoptó

Ephesians 1:5

5 5en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad,

en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos.

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Ahora quiero hacerte una pregunta:‌

¿Cómo entramos en la familia de Dios? “¿Nacemos en la familia de Dios o somos adoptados en la familia de Dios?”

????

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La respuesta es si y si. Sí, nacemos en la familia de Dios y también somos adoptados en la familia de Dios.

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La respuesta de mi esposa...

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Nacemos espiritualmente en la familia de Dios, y esto tiene que ver con nuestra posición en Cristo. Y luego, somos adoptados legalmente en la familia de Dios, y esto concierne a nuestros privilegios en Cristo.

Wiersbe, WW (1996). El comentario de la exposición bíblica (Vol. 2, p. 11). Libros Víctor.

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La adopción tiene un doble significado, tanto presente como futuro.

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No se ingresa a la familia de Dios por adopción. Entras en Su familia a través de la regeneración, el nuevo nacimiento (Juan 3:1-18; 1 Pedro 1:22-25).

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La adopción es el acto de Dios por el cual le da a su "nacido" una posición adulta en la familia.

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¿Por qué lo hace? ¡Para que podamos comenzar inmediatamente a reclamar nuestra herencia y disfrutar de nuestra riqueza espiritual! Un bebé no puede usar legalmente esta herencia (Gálatas 4:1-7), pero un hijo adulto puede—¡y debe hacerlo! Esto significa que no tienes que esperar hasta ser un santo anciano para poder reclamar tus riquezas en Cristo.

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El aspecto futuro de la adopción se encuentra en Romanos 8:22-23, el cuerpo glorificado que tendremos cuando Jesús regrese. Ya tenemos nuestra condición de adultos ante Dios, pero el mundo no puede verlo. ¡Cuando Cristo regrese, esta "adopción privada" se hará pública para que todos la vean!

D. El Padre Nos Aceptó

Ephesians 1:6

6para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado,

Piensa en lo maravilloso que es esto.

Elegido en el pasado,

predestinado para el futuro

y aceptado en el presente!

¡Esto es maravilloso!

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Y la Biblia dice que “Él nos aceptó en el amado.

¿No te gusta la palabra aceptado?

Cuando caminas y ves un cartel que dice: “No entrar. "Keep Out" Quédese fuera. No se exceda. Sólo miembros. Rechazado. "Rechazado - Negado" ¿No es tan malo? ¡Es negativo!

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Cuando hacemos una solicitud y nos llega la respuesta "Has sido aceptado..." "Aprobado"... ¿no es bueno?

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“EL Nos aceptó en el amado”

‌Ahora bien, ¿qué significa “aceptados en el Amado” (Efesios 1:6)? ¿Quién es el amado? El amado es Jesús.

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¡En el Señor Jesucristo, tú, mi querido amigo, eres aceptado! ¡Aceptado!

Eres aceptado porque estás en Cristo. Recuerde, a Jesús se le llama “el Hijo amado”. Dios Padre dijo: “Éste es mi Hijo amado”.

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Decir que eres “aceptado en el Amado” simplemente significa que eres aceptado en Cristo.

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Cuando Dios te ve, en realidad no te ve; Él ve a Su Hijo Jesús, porque estás en Cristo.

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Ahora, apunte este pasaje: Juan 17, versículo 23. Jesús está hablando de la unión y comunión del hijo de Dios consigo mismo, y dijo:

John 17:23

23 23Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.

Aquí tienes un versículo para que medites… ¿Sabes lo que dice este versículo?

Jesús dice que Dios me ama como Dios ama a su propio Hijo.

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Eso es lo que dijo Jesús. Dios me ama como ama a Jesús.

Escuche nuevamente: “Yo en ellos…tú en mí…” - “para que…” – “…el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.” (Juan 17:23).

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El mismo amor que Dios tiene por su amado Hijo, lo tiene por nosotros.

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Verás, somos “aceptados en el Amado” (Efesios 1:6).

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¡Esto es realmente maravilloso!

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Cuando estamos en Cristo, entonces tengo la misma aceptación que tiene Jesús.

Ahora escuche: ¿Fui aceptado? ¡Si yo fui! Pero no soy aceptado por mis méritos. No puedo andar alardeando y enorgulleciéndose porque eso ...

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"para alabanza de la gloria de su gracia" (Efesios 1:6).

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No habrá nádia con el pecho inflado en el cielo. Será como la canción de nuestro hermano.

‌Asaf Borba: Fue Gracia

Cuando esta vida termine

Y allá en el cielo llego

Habrá multitud de hermanos.

esperando abrazarme

Y pedirán una voz

De vuelta a mí

Oh, cuéntanos cómo estás, hermano.

Ganó y llegó aquí.

Y hablaré y cantaré‌

De Jesús que me amó

Y que por este pecador

él se entregó

Y hablaré y cantaré

De Jesús que me amó

Y que por este pecador

él se entregó

‌Fue gracia, gracia, gracia súper abundante.

Gracia, gracia, preciosa y dulce gracia.

Fue gracia hermano, gracia hermano

te digo que fue asi

Fue sólo por la gracia de Jesús

que gané y llegué aquí

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En el cielo todos tendremos que decir "Fue sólo por la gracia de Jesús

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Que gané y llegué hasta aquí”

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(Consulta el tiempo… …) La próxima semana veremos las Bendiciones de Dios Hijo…

Conclusión

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Por favor levántate:

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Inclinemos juntos nuestros rostros en oración.

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Las cabezas están inclinadas. Los ojos están cerrados. ¿Conoces a Jesus? Oh, querido amigo, Él ha puesto Su afecto en ti. Él lo eligió - Él “no quiere que perezcáis” (2 Pedro 3:9).

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Él quiere salvarte - Él quiere salvarte para poder enriquecerte y satisfacer todas tus necesidades.

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Me pregunto, mientras las cabezas están inclinadas y los ojos cerrados, nadie se mueve, nadie mira a su alrededor, nadie camina.

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Cuantos aquí presentes pueden decir: “Pastor Samuel, ya recibí a Jesucristo como mi Salvador y Señor personal.

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Y no sólo eso, sino que el Espíritu de Dios, prenda de mi herencia, da testimonio a mi espíritu de que soy hijo de Dios.

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Y no sólo eso, he confesado a Jesucristo abierta y públicamente ante los hombres. Porque en obediencia al mandamiento de mi Señor Jesús fui bautizado por inmersión después de ser salvo.

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Y no sólo eso: ahora vivo para el Señor Jesús en la comunión de una iglesia del Nuevo Testamento, que cree en la Biblia, que predica la Biblia y que gana almas".

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Si te identificas con lo que acabo de decir, ¿podrías levantar la mano como testimonio de tu fe?

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Levanta la mano en testimonio de tu fe, y con la mano levantada hables: "Gracias, Señor, por todo lo que has hecho por mí. ¡Aleluya! Gracias, Jesús". Ahora baja las manos.

Algunos de ustedes no pudieron levantar la mano. ¡Algunos de ustedes no pudieron levantar la mano porque nunca creyeron que Jesús es el Cristo, nunca confesaron con su boca a Jesús como Señor y nunca se arrepintieron! Incluso sientes el deseo y la necesidad de Jesús, pero aún no has tenido el valor de acudir a Él, y por eso aún no has recibido el perdón.

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Otros aquí ya han sido salvos, pero aún no lo han hecho público. Algunos de ustedes aún no han seguido a Jesús en el bautismo.

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Algunos de ustedes no están completamente seguros de su salvación.

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Algunos de ustedes no son miembros de una iglesia que predique la Biblia.

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Y sabes que tienes que tomar una decisión, y quiero orar por ti, para que tomes una decisión y la hagas bien.

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Todos continúan con los ojos cerrados en oración:

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Si te identificas con lo que acabo de decir, ¿podrías levantar la mano para que pueda orar por ti?

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Si sientes el deseo y la necesidad del perdón de Jesús en tu vida, ¡levanta la mano!

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Se has sido salvo, pero aún no lo has hecho público. Aún no has seguido a Jesús en el bautismo. ¡Levante la mano!

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Si no estás completamente seguros de su salvación. ¡Levante la mano!

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Se has sido salvo pero nunca se hecho miembro de una iglesia que predica la Biblia. ¡Levante la mano!

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Padre Santo, oro por aquellos que levantaron la mano diciendo que necesitan al Señor Jesús. Padre, ¡están diciendo sí a Jesús tu hijo!

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¡Señor, sé que esta es tu obra, realiza este milagro divino en sus corazones! Yo los presento.

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Derrama sobre ellos el don del Espíritu Santo.

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¡Bautiza con tu fuego y purifícalos con la sangre de Jesús! Fortalécelos con Tu Palabra.

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Y de ahora en adelante, opera tus deseos y acciones en sus vidas.

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Esta es la oración de TU iglesia. En el maravilloso y sublime nombre de Jesús. Amén!